Carolina Monje, novia de Álex Lequio, vuelve a Barcelona para hacer frente a su nueva vida sin su chico
Tras perder a Álex, la joven comienza una dura etapa estos días
Carolina Monje. / Europa Press Entertainment/Europa Press via Getty Images
El pasado martes 30 de junio, la familia de Álex Lequio lo despedía con una emotiva misa funeral en su honor. El joven, que fallecía el pasado 13 de mayo con tan solo 27 años, no pudo tener en su momento la despedida que merecía debido a las restricciones derivadas del confinamiento y el Estado de Alarma.
Sus padres Ana Obregón y Alessandro Lequio, así como el resto de familiares y amigos, rotos de dolor, despedían al joven en una misa a la que también asistió Carolina Monje, novia de Álex y fiel compañera durante los últimos dos años.
La joven diseñadora, que ha estado junto a la familia de Álex en estos duros meses, ha querido mantenerse en un discreto segundo plano en todo momento. Carolina - o Carola, como la llama su entorno más cercano-, ha sido un gran apoyo para Ana Obregón estas últimas semanas, como vimos en estas imágenes el día de la misa de Álex.
Ana Obregón y Carolina Monje acuden a la misa funeral por Alex Lequio en la Iglesia de Nuestra Señora De La Moraleja de Madrid, el pasado 30 de junio. / Paolo Blocco/GC Images
En todo este tiempo, Carolina ha mantenido un perfil reservado y ha evitado hacer declaraciones a los medios, aunque no pudo evitar despedirse de su pareja en sus redes sociales. En su perfil subió un emotivo post para despedirse de él, pero lo borraría poco después.
Como leímos en ¡Hola!, a finales del mes de junio, Carolina estuvo en el piso de Madrid que compartía con su chico recogiendo sus enseres personales y acompañada de su hermano Fernando y algunos amigos íntimos.
En los últimos días, Carolina ha sido fotografiada volviendo a Barcelona, donde se encuentra su familia, pasar lidiar con el dolor arropada por sus seres queridos. También se refugia en Boby Puchum, un adorable perrito que Álex y ella habían adoptado y que le estará ayudando a sobrellevar el duelo.