Karlos Arguiñano habla en ‘El Hormiguero’ de uno de los oficios más extraños de su vida antes de la cocina

• Karlos Arguiñano advierte sobre la "auténtica guarrada" que muchas personas hacen con el aceite en la cocina

Karlos Arguiñano estrena libro, y con él, sigue demostrando que la cocina es para todo aquel o aquella que se lo proponga. Al menos así se lo ha hecho saber a Pablo Motos en su última visita a El Hormiguero, en calidad de invitado platino.

Con una entrada de lo más épica subido a un coche, el invitado llegaba a su entrevista dispuesto a todo. Habiendo hablado de cómo ve la situación actual del país, el futuro de la sociedad española y la importancia de la dieta mediterránea para todos, Motos ha rescatado un detalle de publicidad que no ha pasado desapercibido para él.

"Cuando estabas en el ejército vendías pelucas", le ha dicho el presentador, a lo que Arguiñano ha reaccionado riéndose. Segundos después, adelantaba la anécdota.

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"Mi cabo era el padre de Iñaki López", comenzaba explicando el cocinero hablando de su curiosa conexión con el presentador de La Sexta Noche. Después ha seguido contando que ese mismo jefe cogió la representación de una marca de pelucas y lacas de uñas, y se dedicaban a ir por las peluquerías vendiéndolas.

De todo tipo y colores, tanto él como su cabo se las probaban para convencer a sus potenciales clientes. "Le echábamos bastante cara", ha declarado finalmente el televisivo cocinero, que ha conseguido las risas de todo el público.