Canciones inéditas de Ariana Grande que tal vez hayas escuchado (II)

Ariana Grande es una auténtica mina de oro a la hora de escribir canciones. Hace algunos meses os ofrecimos una primera entrega de esas canciones que habían sido descartadas por la solista en sus discos de estudio pero que finalmente habían acabado viendo la luz, filtraciones o directos mediante.

El camino que comenzamos hace unos meses con Better days lo continuamos hoy con Pink champagne, un tema que esconde una curiosa historia. Porque el baúl de los recuerdos de la solista de Boca Ratón (Florida, Estados Unidos) es más grande de lo que a simple vista pueda parecer.

Esta canción no se puede encontrar editada en la gran mayoría de mercados musicales pero curiosamente Ariana Grande sí la incluyó como extra en la versión japonesa de su segundo álbum de estudio: My everything. Un disco que a día de hoy es casi imposible de encontrar. Pero es que realmente fue compuesta para formar parte del repertorio de su debut, Daydremin'.

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Aunque la cantante ha demostrado a lo largo de toda su carrera que es una de las vocalistas más prolíficas a la hora de componer (lleva tres discos de éxito mundial en apenas tres años: Sweetener, Thank u next y Positions), para aquel disco contó con la colaboración de importantes compositores. Ese fue el caso de Pink Champagne, canción creada originalmente por Kesha junto a su madre Pebe Sebert.

Los créditos de la canción que han visto la luz a través de varias páginas del fandom de Ariana Grande incluyen a la solista de Boca Ratón como co-compositora junto a Damon Sharpe y Matthew Squire. Muchos de sus fans la conocen de algunos conciertos en directo y otros de la celebración de cuando superó los 10 millones de seguidores en Twitter.

En noviembre de 2018, Ariana decidió publicarla junto a otra decena de canciones en la principal plataforma de streaming del momento bajo el seudónimo de Zandhr apenas unos meses después de lanzar su disco Sweetener. Esa recopilación vio la luz bajo el nombre de Nobody does it better.

Y es que estas canciones descartadas que no han sido editadas pero sí estrenadas de una u otra forma generan miles y miles de reproducciones que en la industria musical actual se traducen en dinero. Y para que se lo lleven otros... Además, la calidad de sonido entre un audio filtrado, por ejemplo, y la grabación de un artista no tiene comparación.