Polémica con el exámen de ortografía de la Policía Nacional: ¿Serías capaz de aprobarlo?
Los opositores han mostrado su enfado por la dificultad de la prueba a través de las redes sociales
El examen de acceso a la Policía Nacional ha vuelto a desencadenar la polémica entre las 17.000 personas que el fin de semana pasado se presentaron a las oposiciones para optar a una de las 2366 plazas que ofrece el Cuerpo.
Al igual que en años anteriores, una de las pruebas que contempla la convocatoria es la prueba de ortografía, la cual se ha convertido en la peor pesadilla para los aspirantes. De hecho, este año ha traído consigo el enfado de muchos de los opositores que consideran que el examen es demasiado difícil o incluso que son palabras con las que difícilmente se encontrarán en su día a día.
El encabezamiento de la prueba decía así: "Este ejercicio tiene por objeto conocer sus conocimientos sobre ortografía. Para la corrección de la prueba se utilizarán las entradas propias que figuran en el Diccionario de la Lengua Española, obra lexicográfica de referencia de la Real Academia Española. Consta de 100 ítems. Para contestar deberá utilizar las siguientes alternativas de respuesta".
Es decir, en apenas ocho minutos, uno tiene que determinar si 100 palabras elegidas al azar son correctas o incorrectas de acuerdo a los criterios del diccionario de la Real Academia Española.
Atrévete a probarlo
En esta prueba, los opositores se han enfrentado a términos como 'alagar', una palabra que puede confundirse con 'halagar'. O también se han quejado de otras palabras como 'resetear', 'outlet', 'franchute' o 'chupachups', palabras estas dos últimas que la RAE ha admitido hace poco en su diccionario.
Si la palabra se encuentra entre las páginas del diccionario, los opositores ganan un punto, pero en caso contrario, pierden otro. No es obligatorio contestar a todas las preguntas, por lo que, en caso de duda, es mejor dejar la respuesta en blanco. Aquí puedes intentar el test y ver qué resultado obtendrías.
Polémica en las redes tras las pruebas
Aquellos que han tenido que hacer frente a esta convocatoria, han mostrado su enfado a través de las redes sociales, resaltando la dificultad de la prueba así como el hecho de que muchas palabras ni siquiera aparecieran en la Real Academia Española.