Especial
Jordi Sánchez vuelve al rodeo con ‘Alimañas’: una historia de superación en tiempos de COVID
El actor de 'La que se avecina' escribe y dirige su primer proyecto, una comedia negra que se rodará a lo largo de 2021
Tras pasar 24 días en coma inducido en una UCI a consecuencia del coronavirus, el actor Jordi Sánchez se ha convertido en uno de los iconos de la superación y la esperanza en tiempos de pandemia. El intérprete, uno de los rostros más visibles, queridos y admirados de la serie La que se avecina, sufrió una experiencia traumática. En una entrevista con Catalunya Radio, Sánchez confesó que, al despertar, cuando le dijeron que estaba vivo, se puso a llorar descontroladamente.
"Estaba tan drogado que pensaba que todo aquello era cierto. Las alucinaciones son más fuertes que los sueños. [...] Al principio, no podía caminar, no podía ni escribir y, en dos días, ya podía escribir y, al cuarto, ya caminaba", explicó Jordi Sánchez, cuya evolución hospitalaria conocimos gracias a sus compañeros de reparto, en especial gracias a las publicaciones de Paz Padilla, quien también contrajo el virus, y Fernando Tejero.
El actor deja atrás uno de los peores momentos de su vida y parece mirar al futuro con optimismo. De hecho, ya tiene un nuevo proyecto entre manos: Alimañas. Será su debut como guionista y director en un largometraje; una exhaustiva experiencia creativa que ha compartido junto al autor teatral Pep Antón Gómez, con quien ya ha trabajado en algunas representaciones de teatro que aún siguen en cartelera, como Asesinos Todos, encabezada por Carlos Sobera.
Sus autores han descrito Alimañanas como "una comedia delirante". La historia sigue a una madre que no se quiere morir y a un par de hijos ruines que solo quieren herederar sus fortunas. "Todo un catálogo de situaciones trepidantes donde la mezquindad y la mala leche campan a sus anchas. Una historia de hoy. Una historia de siempre", relatan.
El rodaje de esta comedia negra de mala baba comenzará a rodarse en el último trimestre de 2021 con vistas a estrenarse en cines a lo largo del año siguiente. Confiamos en que la pandemia escampe para entonces y Jordi Sánchez no se encuentre con otro mal trago: el de los cines cerrados.