Antonio Cardiel explica por qué Enrique Bunbury no ha participado en la biografía de Héroes del Silencio
Aun así, el autor siguió adelante con ‘Héroes de leyenda’
El próximo octubre se conmemoran los 25 años de la disolución de Héroes del Silencio. No ha sido el motivo que ha propiciado el lanzamiento de su biografía, pero es una bonita casualidad. Más, si coincide con el documental de Netflix que ha despertado la nostalgia de muchos.
Héroes de leyenda recoge la historia de este grupo que sigue teniendo hordas de seguidores. Escrita por Antonio Cardiel, el hermano del bajista del grupo que vivió su trayectoria de cerca, repasa el camino que recorrieron estos cuatro amigos que removieron la escena zaragozana a mediados de los ’80 y acaban convirtiéndose en uno de los grupos más destacados del rock español.
Cardiel ha contado con el testimonio de casi todo el grupo. La única ausencia ha sido la de Enrique Bunbury. Explica que cuando le habló del proyecto le aseguró que participaría y con ese sí, se puso manos a la obra. Empezó entrevistando al resto de componentes del grupo y cuando le llegó el turno al cantante, se echó atrás. Sin embargo, sí le hemos visto hablando en ese nuevo documental.
“¿Por qué? Yo te diría varias razones. La primera, que él conoce mucho a Alexis Morante, le ha hecho varios trabajos. Hizo un documental sobre él, vídeos. A mí también me conoce y mucho antes, pero bueno. Hemos tenido muy poco contacto desde el 96. Recuerdo que vino al funeral cuando murió nuestro padre en el 99, se lo agradecí muchísimo. En el 2007, apenas nos vimos un par de veces porque en la gira de regreso, nosotros fuimos a varios conciertos, pero como la banda estaba siempre atosigada de gente y prensa, hablé más con mi hermano y con Pedro y un poco menos con Juan y Enrique”, opina Cardiel sobre por qué si podemos verle en el documental y no en el libro.
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Primero sí, y luego, no
“Cuando se planteó el libro, tuvo algunas dudas. Me dijo que sí, que participaría cuando terminara su gira. La clave puede estar en eso. Me dijo que sí en agosto de 2018 para engancharse en abril de 2019 y en ese momento cuando me puse en contacto con él llevaba ya 25 horas de grabación de cada uno de sus compañeros y había recorrido la mitad dela vida del grupo. Necesitaba que se involucrara durante unos cuantos días y yo creo que él pensaba que se lo iba a soltar en una tarde. Recuerdo que me preguntó, ‘bueno, ¿en una tarde lo solventamos?’ y le dije, ‘no, Enrique, yo con una tarde no hago nada. Llevo 25 horas hablando con Juan, con Pedro y con mi hermano y voy por la mitad, no puedo con tres horas tuyas tener equilibrio de declaraciones y de participación’. Yo creo que es aquí donde él hizo el clic, ‘ostras, ¿ahora me voy a pegar cinco o seis días por Skype, de Los Ángeles a Barcelona conectado horas y horas con este hombre que me va a preguntar de todo?’. Y le dio pereza y aburrimiento pensar que tenía que repetir otra vez lo que siempre ha repetido”, relata sobre lo que ocurrió.
Asegura que zanjaron el asunto de manera cordial, “entendí su razonamiento y como tenía mucho material, afortunadamente seguí adelante”. Aunque tuvo unas primeras dudas porque no contar con el cantante era un hándicap importante.
“Al principio sí que tuve un serio disgusto personal. Yo contaba con los cuatro. Para mí, hablar de la banda sin estar los cuatro, era una premisa que me marqué de arranque. Yo cuando empecé más en serio con el proyecto pensé, ‘o están los cuatro o no lo escribo’. Y cuando me dijeron que sí los cuatro y en agosto de 2018 tenía los cuatro síes, me lancé a la piscina a trabajar, trabajar y trabajar. Y claro, cuando él se descabalga, surgió esa duda, éticamente no debería continuar. Sin el letrista, sin el cantante, era un tipo clave en la banda”, confiesa sobre lo que pensaba sobre este asunto.
No tiró la toalla
Pero era una moneda con dos caras. “A la vez dije, llevo muchísimo trabajo avanzado y no se merecen sus compañeros, que ahora, entre comillas, por su capricho o su negativa, los vaya a dejar en la estacada, cuando además tenía un material buenísimo. Yo ya veía que lo que me estaban contando era un material muy, muy bueno”, admite.
Además, no solo contaba con el testimonio de los implicados, “tenía, además, acceso a fuentes documentales nuevas que nunca nadie había visto”. Así que, decidió continuar y escribir la biografía.
“Lo siento mucho. Le dije, ‘yo voy a seguir, aunque tú no te involucres, yo voy a seguir adelante’. Tenía 800 páginas de borrador en aquel momento. Y afortunadamente seguí y suplí bien su ausencia a base de citas de lo mucho que declaró siempre. Solo lo echo un poco en falta en el último capítulo, que es la parte del final de la vida del grupo que ahí no ha hecho muchas declaraciones. Ahora en el documental ha dicho un poco pero no tiene nada que ver una hora y media de documental con quince horas de lectura de un libro. No se puede contar lo mismo”, reconoce.
Feedback de Enrique
Ahora queda por saber lo que le parece el libro a Enrique. “Cuando el libro estaba a punto de salir de imprenta, hice un listado de personas para enviar un ejemplar gratuito, gente relacionada con el mundo de Héroes, gente de prensa… y le mandé un correo, ‘Enrique, sin ningún compromiso, ¿quieres que te envíe un ejemplar de mi libro?’. Y me contestó a la media hora, que me quedé sorprendido porque estábamos muy lejos, ‘encantado de la vida Antonio, estoy deseando leerlo’”, cuenta Cardiel.
Todavía no ha recibido feedback. “Estoy deseando que me diga algo. También es verdad que ha habido algún problema con la paquetería, con la pandemia hay un follón con las entregas de libros. No sé si lo tiene o no, no sé si lo ha leído o no, no sé si me dirá algo o no, pero en cualquier caso se mostró muy receptivo a leerlo”, explica.
Cristina Zavala
Periodista enamorada de todo el entretenimiento. Enganchada a la tele, los libros, los últimos lanzamientos...