Muere el actor Norman Lloyd, leyenda del Hollywood clásico y ‘El club de los poetas muertos’
El actor había trabajado con directores de la talla de Alfred Hitchcock, Orson Welles, Lewis Milestone, Jean Renoir, Charles Chaplin y Joseph Losey
Tristes noticias para los cinéfilos: el actor Norman Lloyd ha fallecido a los 106 años. Esta estrella, una de las últimas leyendas con vida del Hollywood clásico tras la muerte de Kirk Douglas, llevaba en activo en la industria desde que era un niño. Comenzó haciendo sus primeras representaciones teatrales como intérprete en 1923, con tan solo 9 años, y su carrera en cine y teatro se extendió durante nueve décadas.
Lloyd trabajó de la mano de grandes directores a lo largo de toda su filmografía. Fue uno de los fetiches de Alfred Hitchcock durante su primera etapa como realizador en Estados Unidos, con quien colaboró en Sabotaje (1942), Recuerda (1945) y la serie Alfred Hitchcock presenta..., donde fue precisamente director y productor.
También estuvo bajo las órdenes de Orson Welles en su compañía teatral y trabajó con directores tan diferentes como Jacques Tourneur (El halcón y la flecha; 1950), Joseph Losey (M; 1951), Jean Renoir (El sureño; 1945), Jules Dassin (Una carta para Evie; 1946), Lewis Milestone (Un paseo bajo el Sol; 1945) y Anthony Mann (El reinado del terror; 1949). Por ponerse se puso hasta bajos las directrices de Charles Chaplin en su maravillosa Candilejas (1952).
Durante un tiempo Lloyd estuvo apartado de los grandes focos, pero en 1989 volvió por todo lo alto junto a Peter Weir y Robin Williams en El club de los poetas muertos, donde dio vida al señor Nolan, y cinco años después Martin Scorsese lo fichó para un pequeño papel de La edad de la inocencia. Mientras tanto, y hasta 2015, donde firmó su última película, Y de reprente tú de Judd Apatow, colaboró en infinidad de proyectos documentales como Historia del Cine: Una odisea o el homenaje que le dedicó Richard Schickel a Charlot: Charlie: Vida y obra de Charles Chaplin.
Hoy, tras casi 100 años de carrera profesional, Lloyd nos dice adiós. En el imaginario colectivo deja una infinidad de personajes que ya son historia del cine.