‘Operación Camarón’: la película más divertida, gamberra y trapera del verano
No te dejes engañar por el título: estamos ante una entretenidísima historia de policías y ladrones que promete convertirse en el taquillazo del año
Un policía infiltrado en una banda de traperos flamencos con autotune: ya solo la trama augura que Operación Camarón va a ser la película española más divertida y gamberra del año. Todo se confirma cuando en el Festival de Málaga el estreno de esta cinta dirigida por Carlos Therón (Mira lo que has hecho) fue recibido con una avalancha de carcajdas y aplausos. Hacía tiempo que no se escuchaban tantas risas en un cine. Julián López y la troupe humorística formada por Carlos Librado, Miren Ibarguren, Canco Rodríguez, Natalia de Molina y Manuel Burque (que también firma como guionista) funcionan como un reloj suizo a la hora de elaborar gags y contar chistes y se ganan por méritos propios al público. Se percibe que el equipo ha hecho piña durante el rodaje: el buen rollo traspasa la pantalla.
Al contrario de lo que pueda sugerir su título y su cartel (es el más hortera en lo que va de temporada), Operación Camarón hace gala de un humor blanco pero bien imbricado en su particular universo. Los chistes son sencillos pero hacen gracia. La acción está rodada como si se tratara de un buen thriller. Y, lo más importante, los personajes son entrañables, cada uno a su manera: desde esa detective que suelta tortazos a todos sus subalternos hasta a aquel comisario bipolar y 'andalú' al que da vida Paco Tous, sin olvidar a las verdaderas estrellas de la película, Julián López, adorable como policía panoli que se infiltra en una banda de música trapera llamada Los Lolos para dar caza a un sangriento criminal apodado 'el Fantasma', y el líder de la banda musical, Lolo, un sorprendente Carlos Librado en su primer papel humorístico frente a las cámaras.
Operación Camarón presenta un humor sencillo y accesible para todos los públicos que reconvierte tópicos en bromas efectistas y que introduce guiños claramente feministas (el reparto masculino no tiene nada que hacer cuando Miren Ibarguren y Natalia de Molina entran en acción y ponen las cosas en su sitio). Además, esas canciones trapero-flamenco-reguetoneras que planean sobre toda la película convierten Operación Camarón en una experiencia muy musical, ideal para un verano de desescalada en el que el público necesita muchas risas y pocos dramas. Por eso tan solo podemos recomendaros que a partir del 24 de junio os lancéis al cine a verla.
Lo mejor
- Tiene un humor fresco, sencillo, accesible para todos los públicos.
- El ritmo: hora y media que se pasa volando y te deja con ganas de más.
- El reparto, desde Julián López hasta los secundarios, está brillante.
Lo peor
- La trama es previsible.
- Quizás el título, el cartel de la película y el tráiler puedan generar prejuicios y espantar a los cinéfilos más puristas.