The Rolling Stones escribieron el epílogo de Loquillo y Los Trogloditas, sin saberlo
Loquillo quería que su adiós a Los Trogloditas fuera memorable
Como dice el refrán, 'La ocasión la pintan calva'. Loquillo quería que su adiós a Los Trogloditas fuera memorable. Deseaba despedirse por todo lo alto de quien había sido su banda durante más de dos décadas. Y la oportunidad que se le presentó era única: telonear a los Rolling Stones. Después de "tocar" con sus Satánicas Majestades en Barcelona y en Madrid, el 30 de junio de 2007 'Bigger Bang Tour' concluía su periplo por España en El Ejido (Almería). Aquella noche inolvidable, Loquillo y Los Trogloditas pusieron el punto y final a su historia. Un epílogo difícil de superar para una de las mejores bandas de rock nacional. Lo escribieron, sin saberlo, Mick Jagger y compañía.
Los Trogloditas ¿Manolo García... o Quimi Portet?
Los Trogloditas habían nacido en 1983. Los buscó Sabino Méndez en Vic (Barcelona), mientras Loquillo cumplía con el servicio militar, y los encontró: Ricard Puigdomènech (guitarra), Jordi Vila (batería) y Josep Simón Ramírez (bajo). El nombre se lo puso Manolo García de manera fortuita. Al menos, así lo cuenta Sabino en su libro 'Corre, rocker', en el que asegura que el cantante de El Último de la Fila definía el sonido de Jordi Vila como 'troglopop'. Sin embargo, el propio batería cuenta que la idea fue de Quimi Portet, a quien le encantaba el sonido salvaje que producía con sus baquetas y decía que era "muy troglodita".
El primer álbum de Loquillo y Los Trogloditas, El ritmo del garaje (1983), nos dejó un buen puñado de clásicos: Cadillac solitario, El ritmo del garaje o Quiero un camión. A partir de ese momento, y a lo largo los 24 años transcurridos hasta llegar al estadio de Santo Domingo, hubo idas y venidas, desavenencias y abandonos definitivos. Sonada fue, por ejemplo, la trifulca entre Méndez y el ‘Loco’, que terminó felizmente tras años de peleas y distanciamiento. Trogloditas fueron Gabriel Sopeña, Jaime Stinus o Guille Martín, entre otros muchos. Y dejaron de serlo, el guitarra (en 2002) y el batería original (su salida definitiva fue en 2005).
El epílogo de Los Trogloditas
El último disco de estudio acreditado a Loquillo y Los Trogloditas fue Arte y ensayo (2004) y su último concierto fue aquel en el que aparecía su nombre acompañando al de sus idolatrados The Rolling Stones: El 30 de junio de 2007, en el estadio de Santo Domingo, El Ejido (Almería). Ante 30.000 personas.
En 2006, la famosa caída de Keith Richards del cocotero provocó la cancelación de la etapa europea de 'A Bigger Band Tour', que incluía actuaciones en Madrid y Barcelona a finales de mayo. Y un concierto, previsto para el mes de agosto en El Ejido, también se suspendió por problemas de afonía de Mick Jagger. Cuando se retomó un año después, Loquillo se congratulaba porque "los promotores han mantenido la promesa, pues ya nos contrataron para el concierto de Almería del 2006 que no pudo realizarse. Pero ahora sí: seremos el único grupo español que va a tocar con ellos", contaba el artista barcelonés en El Periódico.
El sueño del dandi del rock se culminó cuando supo que también serían teloneros de los Stones en Barcelona, el 21 de junio, y en Madrid, el 28: "Quería despedirme de mi grupo en lo más alto, y qué más se puede pedir que hacerlo con Mick Jagger y compañía", afirmaba en el rotativo barcelonés. Poco antes, el 19 de mayo, habían abierto el show de The Who en Baracaldo: “Sé que soy un hombre afortunado por telonear a los Who, es cumplir un sueño adolescente y también un premio”, decía entonces.
Ni una mala cara, ni un mal gesto... ni una sola palabra
De ese evento memorable, José María Sanz escribía un artículo en El Mundo en el que explicaba: "Fue durante la última gira de los Stones en nuestro país, en El Ejido... donde anuncié a los Trogloditas mi marcha". Y sobre su 'trato' con el grupo, el artista decía que "fue exquisito, ni una mala cara, ni un mal gesto". Eso sí, en el concierto de El Ejido se las ingenió para conseguir una suite "estratégicamente situada en el camino de Mr. Jagger". También contaba que el ‘tour manager’ de la banda les comunicó 5 minutos antes de salir al escenario que podían utilizar todo, sin limitación "por cortesía del señor Jagger". Y concluía: “Y es que tú no sabes lo que es escuchar antes del amanecer, tras una noche inolvidable en nuestras vidas, el sonido de unas guitarras rotas y una armónica de una de las habitaciones de aquel paradisiaco hotel, yo sí”.
Sabino Méndez era uno de Los Trogloditas que telonearon a los Rolling. El músico escribía sus vivencias de esos días en ABC, y aunque mostraba su admiración por la educación británica, también sentía la reserva que guardó el grupo siempre. No se intercambiaron ni una palabra. De esa última noche almeriense recuerda: “Precisamente ahí, en el lugar más pequeño de toda la gira -un campo de futbol polvoriento en medio del desierto-, pusieron a bailar a todo el mundo... Ese era su medio natural... sudando el blues y siendo lo que mejor sabían ser: una gran orquesta de baile eléctrica dedicada al ritmo y blues”.
‘La gloria antes que el poder’
Cuando los Stones volaban rumbo a su siguiente concierto en Montenegro, Loquillo ya había borrado a Los Trogloditas, arrancando así su andadura en solitario. En El Comercio revelaba: “Empiezo de cero con 47 años" y sobre los motivos que le habían llevado a disolver al grupo, aseguraba que "Al morir Guillermo Martín (falleció de cáncer en 2006) pasé un periodo difícil de mi vida. Luego pensé que, sin 'Guille' y con un único miembro original de los 'troglos', era físicamente imposible volver a aquella banda. No obstante, tuvimos la fortuna romántica de poder cerrar ese ciclo de la mejor manera posible al hacer de teloneros de los Rolling Stones y los Who en 2007. Certificamos el lema 'la gloria antes que el poder'”.
En 2008 publicó Balmoral, su primer disco tras la separación de la banda. No era su debut en solitario, ya que en 1999 había grabado Nueve tragos.
Los Trogloditas, propietarios del nombre
Aunque Loquillo argumentó que prescindía de Trogloditas porque ya solo quedaba un miembro original, lo cierto es que él no era el propietario legal del nombre. La idea de registrarlo, años atrás, había sido del bajista Josep Simón: “yo cogí al Ricard y al Jordi y les dije ‘tíos, tenemos que registrar el nombre’. Y lo registramos en Vic”.
El 'Loco' despidió al bajista por teléfono, como contaba en una entrevista con Bilbao en Vivo: "Yo duré hasta 2007. El me llamó por teléfono en junio y me dijo que dejaba la banda. Estábamos haciendo de teloneros de los Rolling Stones y fue así de drástico. Y yo, claro, me quedé un poco perplejo porque se acabara así después de tantos años".
Los Trogloditas sin Loquillo
Jordi Vila y Simón Ramírez, refundaron la banda sin el guitarrista, Puigdomènech, que no quiso sumarse. Aunque a Loquillo no le hace gracia que se utilice el nombre, no le queda más remedio que aceptarlo. Y a veces se hacen la competencia. Coincide que, en una misma ciudad, tocan el mismo día las mismas canciones. Ocurrió por ejemplo en mayo de 2014 en Madrid: Loquillo actuó en La Riviera y Trogloditas en Penélope. La relación entre ambas partes no es buena, pero queda el cariño y los buenos recuerdos de aquellos primeros años de gloria: “El amanecer me sorprenderá, dormido, borracho, en el Cadillac...”.
Alicia Sánchez
Periodista en busca de historias chulas del pop