Muere ‘Salo’, fundador de Extremoduro, a los 67 años

Gonzalo Muños Hinojal, popularmente conocido como Salo, ha fallecido este martes a causa de un cáncer a los solo 67 años. Miembro fundador de la banda Extremoduro y guitarrista en los tres primeros álbumes de la banda, el músico contaba con una larga carrera profesional que había comenzado en la década de los 60.

Según ha trascendido en el diario Hoy de Extremadura, el artista ha fallecido en Plasencia cuatro días después de ser hospitalizado. Fue el jueves cuando ingresó en el Hospital Virgen del Puerto de esta ciudad tras llevar un tiempo encontrándose mal. Lo que menos se esperaba era que su enfermedad estaba tan extendida, por lo que los médicos no pudieron hacer nada por su vida.

Antes del trágico momento, Salo, que llevaba muchos años alejado de la escena musical nacional (aunque sí seguía participando en sesiones de jazz con amigos), expresó su deseo de no realizar una ceremonia religiosa, por lo que sus restos serán incinerados después del duelo íntimo que está teniendo lugar este martes en el tanatorio para seres queridos, familia y amigos.

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Su faceta más conocida vino de la mano de la creación de Extremoduro, que fue la banda en la que participó primero como bajista y luego como guitarrista, desde 1988 hasta 1993. Antes que eso, formó parte de Los Comancheros o Los Dogos, así como Indecisión Momentánea, un grupo en el que trabajó mano a mano con Luis Von Fanta. Con él coincidiría años después en Extremoduro hasta el año 1992.

Junto con Robe Iniesta, Salo creó un sonido único y aún muy identificable como el de la banda de Plasencia, que lo materializó en el primer elepé del grupo, Rock transgresivo (1989). Fue en este dónde desplegó su talento al bajo, pasándose después a la guitarra para la presentación de sus dos discos posteriores, Somos unos animales (1991) y Deltoya (1992).

Entonces, se sumó a la formación Carlos El Sucio, que se encargó desde entonces del bajo hasta 1993. Fue ese mismo año, tras la publicación de ¿Dónde están mis amigos? cuando Salo abandonó Extremoduro. Por entonces, Robe decidió probar suerte en Barcelona y el fallecido músico decidió quedarse en Plasencia. No obstante, su relación no terminó en ese momento, puesto que en 1996 participó en la gira Agila 96.

A pesar de haber abandonado el grupo, los seguidores del grupo siguen recordando Jesucristo García o Estoy muy bien, temas que se grabaron durante la estancia del músico entre las filas de Extremoduro y que hoy se han configurado como clásicos firmados por Robe y compañía.