Especial
Jason Momoa revienta una entrevista por una pregunta “asquerosa” sobre ‘Juego de Tronos’
El actor, entrevistado por el diario The New York Times, respondió de malas formas después de que un periodista indagara en la sexualidad de Khal Drogo
Jason Momoa actualmente está inmerso en la promoción de la nueva película de Denis Villeneuve, Dune, donde encarna a Duncan Idaho, y, como a todos los artistas, a veces le toca responder preguntas incómodas. Es el caso de las que le ha hecho el periodista y columnista del diario The New York Times David Marchese.
Durante su encuentro, Marchese le preguntó a Momoa por Dune, por la libertad creativa que tuvo Villeneuve a la hora de adaptar la novela de Frank Herbert, por su perspectiva en torno al cine de superhéroes, en un claro niño hacia Aquaman, y por su papel en Juego de Tronos, Khal Drogo, que a pesar de salir solo en la primera temporada causó tanto impacto que todos lo recordamos como uno de los personajes esenciales de la popular ficción de HBO.
A pesar de que Momoa estaba con ganas de hablar de Dune y hasta llegó a confesarle al periodista que Warner Bros. había metido mucha tijera en la película de Villeneuve y que esperaba que algún día pudiésemos ver el director's cut de Dune, que debería durar «entre cuatro y seis horas», Marchese reorientó las preguntas hacia otros temas y se centró esencialmente en la figura de Drogo y su papel en Juego de Tronos.
«No sé si estás muy puesto en este tema, pero Juego de Tronos ha despertado mucho debate sobre el retrato que hizo de las escenas de violaciones y su tratamiento de la mujeres en general», le espetó el periodista. «¿Piensas diferente hoy sobre esas ecenas? ¿Las harías ahora? ¿Te arrepientes? Ese tipo de secuencias parecen pertenecer a un episodio cultural anterior», continúa, esperando una respuesta.
Jason Momoa, educadamente, le contesta: «Bueno, fue importante describir a Drogo y su estilo. Interpretas a alguien que actúa como Genghis Khan. Fue algo muy, muy, muy difícil de hacer. Pero mi trabajo es interpretar algo así, y aunque no sea bonito, es el personaje que es. No es mi trabajo preguntarme '¿No lo haría?'. Nunca me han preguntado si me arrepiento de interpretar un papel. Pongámoslo de esta manera: lo hice. Y no lo volveré a hacer».
«Es una pregunta asquerosa»
La cosa se podría haber quedado ahí, pero desde esa pregunta la actitud de Jason Momoa cambió. Empezó a contestar las preguntas de una forma más fría y cortante. «Antes has hablado de tu visión de Aquaman. ¿Podrías articularla?», le pregunta el periodista, que se topa con un frío y sencillo «no» por respuesta. «Venga, tío», le insiste el periodista. «Lo siento», responde Momoa.
Tras otra pregunta en el que Momoa le dice al periodista que es mejor «hablar de otra cosa», el primero le pregunta si echa de menos aquellos días en los que el actor participó en Los Vigilantes de la Playa: Hawaii (1999-2001). «No. Los viví al máximo», contesta. «¿Te viene alguna memoria a la mente?», trata de sacar el comunicador. «No para ti. Ni para el mundo», ante lo que el otro trata de reconducir la conversación hacia su nueva película para Netflix, Sweet Girl, pero sin demasiadas expectativas.
Cansado de la actitud de Jason Momoa, David Marchese decide concluir la entrevista. «Bueno, supongo que ya hemos terminado«, dice el periodista. «Gracias por tu tiempo». Pero el actor, que tiene la espina clavada, no aguanta sin decirle lo que piensa.
«Quería decirte que has sacado a colación algo que me ha revuelto el estómago. Cuando hablaste de Juego de Tronos dijiste algo que está pasando con mi personaje y me preguntaste si volvería a hacerlo. Me descolocaste. Me parece asqueroso, al igual que tratar de eliminar eso. Como si un actor pudiera volver atrás. No se nos permite hacer eso. Hay productores, guionistas, directores, y no puedes llegar y decir 'no voy a hacer eso porque no me parece apropiado'. Nunca ocurre. Es una pregunta asquerosa. Solo quería que lo supieras». «Muchas gracias y gracias de nuevo», responde el periodista. «Por supuesto», remata Momoa.