Especial
Así es Chester Hanks, el hijo ultra y negacionista de Tom Hanks
El pequeño Chet, de 31 años, es la oveja negra de la familia
Ser famoso, multimillonario y uno de los hombres más queridos de Estados Unidos no siempre te asegura que tus hijos sigan tu ejemplo. Al menos eso es lo que le ha ocurrido a Tom Hanks, el también conocido por muchos como el «padre de América». Por mucho que él sea capaz de generar tanta simpatía en esferas de influencia muy diferentes, uno de sus hijos, Chester Hanks, es prácticamente todo lo opuesto: allí donde va abre ríos de titulares, pero para mal.
Chester Hanks tiene 31 años, es rapero –de esos que hipersexualizan a la mujer en sus promociones y videoclips (¿a quién nos suena?)– y, además, flirtea con movimientos ultra, utiliza terminologías abiertamente racistas (llama nigga, negratas, a los negros), ha recibido una denuncia por violencia de género de su ex pareja y, para colmo, tiene tendencias negacionistas a la hora de hablar del coronavirus.
Precisamente hace tan solo unos días publicaba en su cuenta de Instagram un polémico vídeo en el que se mostraba abiertamente contrario a la administración de la vacuna. «Quería ponérmela, pero mi sistema inmune me dijo que era mejor no hacerlo. ¿Vale? No necesito que nadie me manipule. Seamos realistas, el 99% de la gente no usaría champú no aprobado por la FDA, pero sí que os pondríais una inyección experimental del gobierno», dijo, antes de rematar con más desinformación: «Hay más pruebas de que los ovnis son reales que de que esa vacuna sea saludable para ustedes». Luego borró el vídeo y subió otro en el que se burlaba abiertamente de los que decidían inyectarse:
Sorprende este tipo de mensaje cuando sus padres, Tom Hanks y Rita Wilson, pasaron el coronavirus a principios de la pandemia y ambos son unos firmes defensores de la vacuna. Ninguno de ellos se ha pronunciado sobre esta actitud ofensiva de Chester pero es algo habitual, ya que en general Tom Hanks, que es quien tiene más visibilidad mediática, no suele comentar nada que tenga que ver con las polémicas de su hijo. Al fin y al cabo, los otros tres vástagos, el actor Colin Hanks (Fargo), la escritora Elizabeth Hanks y el operador de cámara Truman Hanks han tratado de seguir el ejemplo moderado y conciliador de su padre.
Otras polémicas recientes
El síndrome conspiranoico no es el úncio que ha padecido Chet Hanks a lo largo de su polémica trayectoria como actor y rapero. Según informó la revista People en abril, su expareja, Kiana Parker, le denunció por maltrato físico y verbal y sobre él pesa una demanda de un millón de dólares. Él niega todos los hechos y dice que fue ella quien lo agredió a él y que hasta llegó a presentarse con varios hombres en su casa, uno de los cuales iba armado con una pistola, después de romper su relación.
No es lo único. Chet Hanks también ha sido duramente criticado por sus comentarios racistas –utiliza el término nigga en un tono claramente vejatorio y despectivo– y ha ensalzado el «supermacismo» blanco en tiempos del Black Lives Matter con canciones como White Boy Summer (lit. El verano del hombre blanco), cuyo videoclip es, además, abiertamente machista por el trato hipersexualizado que hace de la mujer. También fue criticado por llevar camisetas con tipografías similares a las que utilizaban los nazis durante la Segunda Guerra Mundial.