Especial
‘Candle in the wind’, la despedida de Elton John de su amiga Diana: “Adiós rosa de Inglaterra”
El 6 de Septiembre de 1997, un Elton John emocionado, se sentaba ante un enorme piano en la Abadía de Westminster y entonaba una emotiva despedida a Lady Di
El 6 de Septiembre de 1997, un Elton John emocionado, con los ojos humedecidos y a punto de romperse, se sentaba ante un enorme piano en la Abadía de Westminster y entonaba una emotiva despedida a Lady Di, su querida amiga. El efecto fue sobrecogedor. Millones de personas en todo el mundo enmudecieron mientras él cantaba ‘Adiós rosa de Inglaterra’. Fue "como si alguien disparara una flecha directamente a mis defensas emocionales”, reconocería tiempo después el Príncipe Harry. La nueva versión de Candle in the wind, reescrita por completo en honor a Diana de Gales, se convirtió en el single más vendido de todos los tiempos en el Reino Unido …y casi en el mundo.
Bailando charlestón en el Castillo de Windsor
El 31 de Agosto de 1997, Diana, princesa de Gales, fallecía en un accidente de coche en París. La noticia, que conmocionó al mundo, dejó consternado a Elton John. Ambos eran muy buenos amigos. Se habían conocido 16 años antes, en Febrero de 1981, en la fiesta con la que el Príncipe Andrés celebraba su 21º cumpleaños. Y es que Reginald era un asiduo a los eventos de la familia real, ya que tanto la Reina Madre como la Princesa Margarita eran sus fans incondicionales desde los años 70’s.
En esa ocasión particular, le habían pedido que actuara con el percusionista Ray Cooper y fue entonces, en el Castillo de Windsor, cuando conoció a Diana Spencer. Ella tenía 19 años y faltaban pocos meses para su boda con el que sigue siendo el heredero al trono de Inglaterra. En su autobiografía ‘Me’, publicada en 2019, el músico cuenta con detalle cómo fue ese primer encuentro después de bailar con la Princesa Ana y con la Reina Isabel II, bolso en mano: “Todo cambió cuando apareció Diana. Estaba bendecida con una increíble naturalidad para socializar, tenía una gran habilidad para hacer que la gente se sintiera verdaderamente cómoda en su compañía".
"Esa noche de 1981, en el salón de baile, conectamos inmediatamente. Terminamos pretendiendo bailar el charlestón…”. A partir de ese momento, se estableció un vínculo que les mantendría unidos a lo largo de los años. "Su compañía era fabulosa, la mejor invitada en las cenas de gala, increíblemente indiscreta, una auténtica cotilla: podías preguntarle cualquier cosa y ella te la contaba" escribe John.
La última vez que se vieron fue en el funeral de su amigo, Gianni Versace, tras el asesinato del diseñador el 15 de Julio de 1997. Diana viajó a Estados Unidos y las imágenes en las que aparece consolando a un destrozado Elton John dieron la vuelta al mundo. Ironías de la vida. Pocos días después, sería ella misma la que perdería la vida.
Un tributo a Marilyn Monroe… y a Diana de Gales
En su autobiografía, John cuenta que recibió una llamada de Richard Branson (multimillonario empresario fundador de Virgin), quien le dijo que en el Libro de Condolencias situado en el Palacio de St. James, muchos citaban la letra de Candle in the wind. Le preguntó si podría reescribirla y cantarla en el funeral en la Abadía de Westminster.
La letra original de Candle in the wind, escrita por Bernie Taupin en 1973, era un tributo a Marilyn Monroe, fallecida también a los 36 años, como Diana. La frase inicial era ‘Goodbye Norma Jean, though I never knew you at all’. John contactó con Taupin, que estaba en California, y le pidió que rehiciera la letra. El nuevo texto estuvo listo en pocas horas. “A partir del primer par de líneas, el resto fue encajando en su sitio”, comentó el letrista. Y así fue como ese primer par de líneas se convirtió en “Goodbye England's rose, may you ever grow in our hearts". La mayor parte de la letra fue adaptada a las circunstancias de la vida y la trágica muerte de Diana.
“Una de las cosas más surrealistas que he hecho jamás”
“Cantar en el funeral fue una de las cosas más surrealistas que he hecho jamás. Todo lo que se me pasaba por la cabeza era ‘No te equivoques. Sé estoico”, reveló el cantante a Telegraph. “No te vengas abajo y hazlo lo mejor que puedas sin mostrar de ningún modo tu emoción. Tengo que decir que mi corazón no paraba de latir fuertemente”. Era el 6 de Septiembre de 1997. Y más de dos mil millones de personas presenciaron ese momento desde las televisiones de todo el mundo.
Elton John había entrado a la Abadía de Westminster acompañado de su entonces pareja (y actual marido) David Furnish, y de George Michael. 2.000 personas llenaban la iglesia gótica londinense, includa la familia real británica al completo. A las 11 a.m., el féretro de la princesa había llegado en carruaje desde Kensington Palace.
Cuando John empezó a entonar la primera frase… “Adiós Rosa de Inglaterra”, no pudo evitar que su voz se quebrara de emoción. Tiempo después, Elton desveló que necesitó un teleprompter escondido junto al piano: “Es la primera vez que he tenido un teleprompter, abajo en el lado izquierdo, porque pensaba ‘si canto ‘Adiós Norma Jean’, me van a ahorcar, arrastrar y descuartizar”, confesó el artista. “Así que fue por precaución por lo que pedí que me pusieran allí el teleprompter”.
La actuación de Sir Elton John fue sobrecogedora. En el documental sobre Diana '7 Days', el Príncipe Harry contaba: "La canción de Elton John fue increíblemente emocionante. Ese fue el momento en el que estuve a punto de llorar en público, pero no lo hice”. “Fue como si alguien hubiera disparado una flecha sobre mis defensas emocionales” revelaría posteriormente.
La canción más vendida del mundo… casi
En cuanto terminó el funeral, Elton John fue directamente a los estudios Townhouse. Allí le esperaba ya George Martin, a quien habían pedido que se encargara de la producción de la nueva versión de Candle in the wind. “La canté dos veces, en una sola toma, con el piano, y me fui a casa”, escribe el cantante inglés en ‘Me’. Y ya en su casa, en su mansión de Old Windsor, se derrumbó. Solo David Furnish le vio llorando.
Candle in the wind 1997, también conocida como Goddbye England’s Rose, se publicó el 13 de Septiembre de 1997. Y se convirtió en el single más vendido de todos los tiempos en Reino Unido. Solo el primer día superó las 600.000 copias. Con más de 33 millones de copias vendidas en todo el mundo, según el Libro Guinness de los Récords, se sitúa en el nº2 en ventas físicas mundiales, por detrás de White Christmas de Bing Crosby de 1942. Es el single más vendido desde que nacieron las listas en los años 50’s.
El dinero recaudado con la venta del single se destinó a la Fundación ‘Diana, Princess of Wales Memorial’.
Y después del funeral, nunca más
Elton John solo interpretó esa versión de Candle in the wind en la Abadía de Westminster. Después, nunca más. En sus conciertos interpreta la original. En repetidas ocasiones ha declinado cantarla y asegura que nunca lo hará, excepto si se lo piden sus hijos William y Harry. Nunca ha publicado la canción en ninguno de sus álbumes o recopilatorios.
Y es que el artista empezó a odiar ese éxito que implicaba que se emitieran imágenes suyas en el funeral de Diana cantándolo. Una y otra vez. Como si la gente se recreara en su muerte. "¿Por qué todo el mundo la quiere escuchar?” se pregunta el músico en su biografía. “Me parece insano: morboso y antinatural. Realmente, no creo que sea lo que Diana hubiera querido".
Alicia Sánchez
Periodista en busca de historias chulas del pop