La nueva expulsada de ‘Secret Story’ se va incumpliendo las normas al desvelar su secreto a un compañero

La semana pasada, la lista de nominados aumentaba y ponía en la palestra hasta a seis de los concursantes de Secret Story. Poco a poco, a lo largo de la semana, se fueron salvando algunos de ellos hasta, finalmente, dejar la cosa en un duelo entre Emmy Russ y Canales Rivera. Y desde luego, no estaba claro hacia dónde se iba a inclinar la balanza.

Los porcentajes fueron bailando día a día, y no precisamente por casualidad. Los últimos programas del torero han estado marcados por su línea de la vida y el enternecedor secreto que contó al programa, mientras que los de la celebrity alemana lo han estado por sus continuas peticiones de abandonar el reality. Así, acabó en un ajustado 52'7-47'3%.

Aunque la 'planta' del programa parecía tener todas las posibilidades de irse de Guadalix, Jorge Javier se encargó de dar una noticia que tuvo final feliz para todos. Y es que la expulsada era la que más ganas tenía de salir de los dos propuestos:

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Emmy se marchaba definitivamente del programa, algo que aunque recibió con una sonrisa, pero que acabó por costarle una ligera llorera. Admitía que lo había disfrutado, aunque en la misma gala volvían a emitir imágenes en las que admitía que los realities que ha protagonizado duraban como mucho tres semanas. Por ende, la concursante se encontraba agotada y carente del éxito que buscaba desde la primera noche.

Sin embargo, antes de irse le ha dado tiempo a recibir una última reprimenda por parte del presentador. Jorge Javier decidía cambiar su tono afable de las últimas semanas -cuando decidió animar a la concursante- por otro más pasivo-agresivo, preguntándole en directo si había considerado que quizá no generaba ese interés que quería del público porque no era tan interesante como ella pensaba.

El secreto (más inoportuno) de Emmy

Antes de irse, el programa le dio la oportunidad de despedirse de un compañero. Eligió a Luis Rollán, uno de sus grandes apoyos en la casa, al que dijo adiós con lágrimas en los ojos. Eso sí, lo hizo optando por algo que tenía prohibido: revelarle su secreto.

Secret Story ya había decidido revelar los secretos de sus expulsados cada domingo, algo que la alemana decidía ignorar y revelar a su mejor amigo dentro de la casa. Su gran misterio deja libre otro de los huecos de la lista. En concreto, el de 'Viví en un centro de menores porque mi madre me abandonó'.

Aunque no ha dado demasiadas explicaciones por ser "una historia muy larga", la expulsada contó que con 17 años su madre la abandonó en Alicante cuando aún no se desenvolvía bien con el español. Finalmente, lanzaba un alegato contra el maltrato en centros de menores españoles, donde incluso ella misma recibió agresiones según su testimonio.