La mala suerte se ceba con los Walker: la joven Meadow revela su lucha contra un tumor

No ha querido preocupar a sus seguidores hasta tener claro que iba a superarlo, pero lo cierto es que Meadow Walker, la hija del actor Paul Walker, fallecido en un trágico accidente de tráfico en 2013, ha debido batallar de nuevo contra la incertidumbre, pero esta vez en sus propias carnes y materializada en un tumor. Así lo ha confesado la joven, de 22 años, en su cuenta de Instagram, donde cosecha tres millones y medio de seguidores.

«Han pasado dos años. He superado un largo camino. Adiós, tumor. Bendecida y agradecida», escribió la heredera de los Walker mientras compartía un selfie en el que aparecía con un gorro desechable de hospital tapándole el pelo, lo que indica que probablemente se ha sometido a una cirugía, y varios electrodos colocados sobre la frente.

No se sabe con certeza qué tipo de tumor tenía Meadow Walker ni si era un tumor benigno o algo más peligroso. Se especula que, por la vestimenta con la que aparece en la fotografía, que es la típica que se utiliza para las tomografías cerebrales, estuviera relacionado con el cerebro, pero ningún familiar, amigo cercano ni la propia Meadow han querido compartir los detalles de la enfermedad.

Lo que sí ha recibido la hija del actor es un derroche de amor y felicidad por parte de sus seguidores, quienes no han tardado en arroparla en los comentarios de su cuenta de Instagram. «Más allá de bendecida. AMADA», comparte uno. «Independientemente de la situación médica a la que te hayas enfrentado, estoy feliz de que la hayas superado. Eres una persona muy dura», comenta otro.

Porque Meadow Walker es una luchadora que con tan solo 14 años tuvo que hacer frente a la muerte de su padre en un accidente de tráfico. Una tragedia que conmocionó al mundo entero y, especialmente, a los fans de Fast & Furious, que no daban crédito al comprobar cómo su estrella protagonista –con perdón de su buen amigo Vin Diesel– se apagaba de forma abrupta de la noche a la mañana.

La muerte de Paul Walker hizo que Vin Diesel y Meadow Walker establecieran una estrecha relación con tintes paterno-filiales. De hecho, fue Meadow quien pidió a Diesel que ocupara el puesto de su padre durante su boda con Louis Thornton-Allan, un joven británico aspirante a actor. La hoy popular estrella de Fast & Furious fue el padrino de Meadow, confirmando así que Diesel es una suerte de ángel de la guarda de la hija de 'Pablo' y que está dispuesto a ir hasta el final por cuidar a la pequeña heredera de su mejor amigo.