Especial
Lady Gaga revivió su traumática violación y otros fantasmas del pasado en el rodaje de ‘La Casa Gucci’
La actriz y cantante se sincera en una profunda entrevista con The Hollywood Reporter donde confiesa que Ridley Scott tuvo que intervenir y pararle los pies para que no se destrozara
Vómitos, ansiedad y traumas. Así es como Lady Gaga definió su paso por el set de rodaje de La Casa Gucci, la nueva película de Ridley Scott, que el 26 de noviembre aterrizará en cines. La actriz y cantante se sinceró durante una entrevista con The Hollywood Reporter en la que explicó que para preprar su personaje siguió la controvertida técnica del método Stanislavski, que casi le hace perder la cabeza.
Esta técnica consiste en, básicamente, conectar con experiencias personales pasadas para traerlas al presente y así hacer más natural y orgánica la interpretación. Esa es la razón por la que Lady Gaga revivió su traumática violación a manos de un productor musical cuando tenía 19 años, así como otras experiencias fuertes de su pasado que marcaron su carrera y que, por motivos obvios, no ha querido especificar.
De hecho, el propio Ridley Scott tuvo que intervenir durante el rodaje para que Lady Gaga parase de utilizar estas técnicas de interpretación –que también han utilizado y causaron problemas a actores como Heath Ledger o Will Smith– para que no acabase volviéndose loca. De entrada, la actriz confesó que durante los nueve meses de preproducción y rodaje ella estuvo hablando con el acento italiano y las formas de Patrizia Reggiani, su personaje en La Casa Gucci. Hasta cuando estaba fuera del set fingía hablar de esa forma. Pero delante de las cámaras incluso llevó la experiencia más allá y conectó con su infierno interior.
Uno de los peores momentos lo vivió cuando estaba rodando con Salma Hayek. «Es una escena en la que golpeo una vela encendida a lo largo de una habitación, y recuerdo que le provoqué un infarto a Salma aquel mismo día. Me estaba derrumbando mientras Patrizia se derrumbaba [...] Ridley dijo entonces: 'No quiero que te traumatices'. Y yo le dije: 'Ya lo he hecho. Ya he pasado por esto de todos modos. También podría dártelo a ti'. Y él respondió: 'Déjalo aquí y no te hagas más esto'».
La mezcla de «ansiedad, fatiga, trauma, exhaustividad, compromiso y amor» hicieron que Lady Gaga llegase a vomitar en reiteradas ocasiones en pleno rodaje. Su compromiso con su personaje era tal que las emociones que vive Patrizia Reggiani en pantalla son absolutamente naturales y orgánicas. Gaga se compromete con sus papeles como lo hicieron algunas de las grandes actrices de todos los tiempos. Pero durante la misma entrevista ella matiza: «Me siento muy insegura hablando de ello. Me pone nerviosa pensar que la gente crea que voy a tratar de hacer sensacionalista cierto tipo de actuación».