Cristina Pedroche no espera a las Campanadas para impactar con su vestido y lo hace en ‘El Hormiguero’
Y ha desvelado algunas curiosidades de sus retransmisiones en Nochevieja
Un año más Cristina Pedroche dará las Campanadas en Antena 3 junto a Alberto Chicote. Y como viene sucediendo desde hace varios años, la gran incógnita es el estilismo con el que va a sorprendernos esa noche tan especial.
Hasta ahora se había basado en cuánta piel iba a dejar al descubierto por mucho que ella quisiera poner el blanco en lo artístico de sus diseños, pero parece que este año hay algo más.
De momento, ha centrado toda la campaña en su pelo. Hemos podido ver un vídeo en el que supuestamente la vemos cortarse el pelo y coger una maquinilla de afeitar que nos hace pensar en una cabeza rapada.
Entrada triunfal
Te recomendamos
De todo eso ha ido a hablar a El Hormiguero. Solo la entrada al programa ya ha sido triunfal y no sólo por el baile de reguetón que se ha marcado sino por su estilismo, no hemos tenido que esperar a Nochevieja para quedarnos impactados.
Pedroche ha aparecido con un vestido dorado que resaltaba los atributos femeninos, diseño de Sergio Castaño Peña. Un artista veinteañero de nuestro país con proyección internacional y una idea de la moda basada en la sostenibilidad, el anti capitalismo y con mucho surrealismo por medio.
Junto al vestido, un corte de pelo que no era la habitual larga melena que ella suele lucir. Había que seguir con el misterio de lo que ha ocurrido en su cabeza.
El misterio del pelo
“Este año pasan más cosas alrededor que no es solo el vestido y lo que me puede o no cubrir. Hay más cosas. Ha pasado una cosa en el mundo cabeza y Josie me dijo, ‘hay que hacer un cambio’. Yo, más o menos, he podido aceptar, o no, ese reto… es que no estoy diciendo nada. Es que, es muy difícil dar pistas sin darlas. Pero van a pasar cosas desde que empiece la retransmisión. No vais a tener que esperar a las campanadas ni nada. Según empieza tú ya ves lo que hay allí”, le explicaba a Pablo Motos.
El presentador quiso preguntarle por su media melena. “Esto es una peluca, lo que pasa es que parece mi pelo porque el color es bastante parecido y es pelo natural, es buena, es de las buenas. Lo que no quiero es que se sepa lo que hay aquí debajo, lo que pasa, lo que no pasa, lo que va a pasar”, aseguraba ella.
No ha podido desvelar mucho que no es cuestión de cargarse la sorpresa, pero sí que ha dejado claro que puede salir completamente rapada, su vestido no es ajustado y no es un vestido de tela como tal, es un mensaje. Poco más pudimos saber y mira que Trancas y Barrancas se esforzaron por sacar información.
Curioseando
Lo que sí lograron es sacarle confesiones como que no se bebe nada de alcohol durante la retransmisión o que el catering lo pone Chicote. Por cierto, que admitió que tiene un trato con su compañero sobre lo de comerse las uvas. “Alberto va diciendo una, dos… y yo me las voy comiendo porque soy un poco supersticiosa con el tema uvas, de hecho, creo que soy solo supersticiosa con eso, pero me como las uvas siempre”.
Y, en contra de lo que muchos puedan pensar, Cristina confesó que esa noche pasa mucho calor “de los nervios, del estrés, del no sé qué, de la emoción. No me doy cuenta del frío hasta que termina todo. Me hago la foto con el equipo y de repente digo, ‘uy, parece que refresca, ¿no?’. Y luego me meto en el camerino y me cambio”.
Del vestido no sacamos mucha más información por mucho que lo intentaron. “Tenéis que pensar que, haga lo que haga, por muy llamativo, o no llamativo, o más bonito, o menos bonito, siempre hay un concepto de moda”, quiso dejar claro.
Pues nada, tendremos que esperar al 31 de diciembre para descubrir uno de los secretos mejor guardados de la Navidad.
Cristina Zavala
Periodista enamorada de todo el entretenimiento. Enganchada a la tele, los libros, los últimos lanzamientos...