‘MasterChef Junior 9’ vive una victoria muy ajustada con Guillem y Carla: así fue la gran final

Tras cuatro programas de lo más intensos, MasterChef Junior 9 ha llegado a su fin. Lo ha hecho tras acoger a 12 aspirantes de lo más competitivos que, más allá de protagonizar momentos hilarantes junto al trío de jueces, le han puesto muy difícil a la audiencia escoger un solo favorito. Aunque ahora ya cuenta con un ganador oficial.

No ha sido un último programa fácil, pues los cuatro jóvenes talentos lo han dado todo para poder hacerse con su chaquetilla de duelista. Lo han hecho primero ante la atenta mirada del chef Martín Berasategui, que lideró la primera prueba dictándoles unas instrucciones para conseguir un postre que solo Guillem, de 12 años, consiguió replicar a gusto de todos.

En la posterior prueba de exteriores, las chicas se ponían tras los fogones para dar de comer al casting de MasterChef Celebrity 9. Les costó tiempo y mucho sufrimiento -a Olivia, después de romper a llorar en varias ocasiones, tuvieron que ir a echarle una mano Belén López y Vanesa Romero- pero consiguieron sacar a tiempo todas las elaboraciones del menú. La mejor acabó siendo Carla -que no Carola, como Pepe Rodríguez la llamó antes de darse cuenta de que se estaba equivocando-, que acabó batiéndose en un duelo con Guillem del que ya tenemos la identidad del que ganó:

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El gran vencedor de la noche fue Guillem, en un duelo de lo más ajustado en el que su contrincante no se lo puso nada fácil. Ambos, curiosamente de la misma edad, optaron por reflejar sus respectivos lugares de nacimiento en el menú. Ella mostró un respetuoso tributo a La Mancha y él un homenaje muy completo a Cataluña.

Pero aunque los dos acabaron en el mismo punto del programa, su pasión por la cocina tiene orígenes totalmente diferentes. A Guillem le nació en pleno confinamiento, y gracias a tutoriales y a ver el mismo programa por Internet acabó replicando una técnica que ha acabado haciendo suya; mientras que para Carla es una afición que le encanta a ella y salva más de una comida para su familia, no demasiado fan de la cocina. Siguiendo esta diferencia, escogieron ingredientes muy distintos entre ellos aunque igual de complicados a ojos de los jueces -ella arroz, y él gamba roja-, aunque consiguieron pasar la prueba con éxito. Como de costumbre, le repitieron a Carla el riesgo que suponía llevar el arroz a una última prueba, aunque terminaron por admitir que estaba de diez.

Sin embargo, los platos de Guillem consiguieron terminar de conquistar al jurado un poco más que los de Carla. En especial a Jordi Cruz, quien muy emocionado contó una anécdota muy especial: que se veía en él de pequeño después de que el concursante contase que tiene muy claro que quiere dedicarse a la cocina en el futuro. Mucho antes de su victoria, sus padres y hermanas dejaron claro que estaban más que orgullosos de él, algo que el mismo Cruz confesó que le llevó 14 años en conseguir de su familia. Por supuesto, la emoción no faltó en los últimos minutos de emisión.