‘Raphaelismo’ llega a Movistar+: el documental al que el artista solo puso un “límite”

Tras el éxito de la biografía de Lola Flores en Movistar+, la plataforma estrena el próximo 15 de enero: Raphaelismo. Una serie documental de cuatro episodios que, por primera vez, cuenta con la implicación directa del propio artista, su familia, RLM y Universal Music Spain.

La nueva apuesta seguirá a la figura del cantante, como protagonista porque la historia de Raphael es la historia de todos nosotros. Al contar su historia, estamos contando también la nuestra, desde los inicios de esa posguerra marcada por el hambre hasta la generación millenial.

Lo hace a través de su voz, pero también de otras como la de Natalia Figueroa (su mujer), hijos, su entorno musical y otras personalidades como la de Miguel Ríos, Alaska, David Bisbal, Vega, Álex de la Iglesia y otros muchos.

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Enrique Bunbury, por ejemplo, asegura que "Raphael, de alguna forma, es un recuerdo permanente en la historia de varias generaciones. Estaba en la televisión en blanco y negro, ha estado en la televisión en color, en la Transición, en Nochebuena, en las plazas de toros, en la radio… Es un recuerdo permanente. Es la banda sonora de la vida de muchas personas”.

La palabra tabú para Raphael

Raphaelismo está siendo aplaudido por la crítica que ya ha visto el documental y tras él están las mentes de Charlie Arnaiz y Alberto Ortega -  de Dadá Films & Entertainment, que estuvieron nominados al Goya por 'Anatomía de un Dandy'  en 2020-.

Ambos son los creadores y directores del proyecto, con quienes hemos hablado de los entresijos. Nos contaron que desde el primer momento el artista estuvo a favor de obra hablando de cualquier tema, excepto de la palabra "fracaso" que es un tabú para él. Según ellos, "no existe en su diccionario", pero tuvieron que tratarla porque en una vida llena de luces también hay sombras.

Sobre ello, afirmaron que en los años 90 sí que "hubo algunos discos que sacó el artista, menos acertados y de los que no tuvo reparo en hablar". Sin embargo, el único límite que puso fue relatar su operación en 2003, "cuando estuvo muy malito. No puede hablar de ello, le sobrecoge tanto que debe parar. Así que lo contamos a través de su entorno".

Subrayan que mientras le han ido conociendo, se han dado cuenta de la importancia de su figura, cada vez más. Siendo un "artista adelantado a su tiempo y que ha sabido adaptarse a cada época". Creado himnos para cada una de las generaciones que han ido surgiendo.