Especial
Los rumores de cierre de Shein Europa desatan el pánico en redes
La cadena low cost ofrece últimas tendencias de moda a precios bajos
El posible cierre en Europa de la tienda de moda online low cost Shein ha provocado en España un tremendo revuelo en redes. Si bien es cierto que la compañía de momento no se ha pronunciado en Twitter o en TikTok los seguidores de la marca están que trinan.
Son muchas las personas fieles a esta marca que han encontrado moda a precios asumibles y variedad de tallas.
Sin embargo, todo tiene su lado negativo y es que son muchas las voces que critican el modelo de esta y otras cadenas de moda por promover el consumismo o por la poca sostenibilidad del modelo de negocio.
Shein es todo un fenómeno en redes como Instagram o TikTok donde las influencer o rostros no populares muestran que prendas han adquirido en la enseña textil.
El debate está servido. Muchos opinian que el tipo de moda que ofrecen estas cadenas hace que se consuma más y otros dicen que gracias a ellas pueden renovar su vestuario a precios asumibles. ¿Qué es mejor poca ropa de calidad o mucha de menor calidad?, se preguntan los usuarios.
El gigante chino Shein no vende en tiendas físicas. El único modo de tener sus prendas es por su web o por su aplicación. Llama la atención las cifras de negocio que maneja. Así la cadena low cost factura alrededor de 13.000 millones de euros al año. El público que adquiere sus prendas y complementos es fundamentalmente joven y lo que busca es tener las últimas tendencias de moda por poco dinero.
Shein tiene gran capacidad para detectar tendencias y en poco tiempo poner las prendas a la venta. Ese es uno de sus puntos fuertes. La calidad de la ropa es cuestionable pero sus compradores saben que lo que adquieren les va a durar poco y lo asumen. Aceptan además que los pedidos tarden en llegar entre los 10 y 15 días.
La Comisión Europea anunciaba hace algunas semanas el documento 'Pacto Verde Europeo', que va encaminado a fomentar la economía circular. Uno de los modos para fomentarlo y poner freno al consumismo desbocado sería cercando el modelo Fast Fashion que siguen este tipo de enseñas.