La casa de Guillermo del Toro triunfa (y aterroriza) con sus fotos más reveladoras

Si Guillermo del Toro es conocido por algo, es por poner el máximo detalle a sus películas. Eso sí, viniendo de un apasionado del cine de terror como es él, no es de extrañar que aproveche todas sus influencias del siglo XX para ello. Aunque hay otro sitio en el que las vuelca, e incluso las colecciona: su propia casa.

El hogar del mexicano está repleto de figuras, libros y objetos relacionados con su cine o el cine de terror que quizá estén por encima del título de ser meras piezas de coleccionismo. De hecho, todo ello le sirvió para montar una exposición en Guadalajara en la que la gente pudiese disfrutar de su particular galería de arte.

Ahora un usuario de Twitter, @Roybattyforever, ha reunido algunas instantáneas de la casa del cineasta que ya están triunfando entre los usuarios de la red social. Y ojo, que no tienen desperdicio:

Con un señorial recibidor, los apliques no son lo que más llama la atención del domicilio, sino la gran cabeza del monstruo de Frankstein que preside la barandilla frontal. Obviando los miles de libros que tienen sus estanterías, algo muy sorprendente son las figuras a tamaño real que tiene tanto de criaturas del horror como de humanos. Como adorno extra, también ha colocado una ventana falsa que da la sensación de que en el exterior está lloviendo; creando una atmósfera perfecta.

Sin duda, todo un espacio que podría competir directamente con cualquier Madame Tussauds -con más calaveras que caras de celebrities y famosos, claro-, aunque esto es para disfrute único del director. Aunque lo bueno de ser uno de los cineastas del género más populares de la actualidad es que no solo te tienes que limitar a reunir objetos de otras películas, sino que también puedes tener de las tuyas propias. Y gratis, ya que posiblemente se las pueda llevar del propio set de grabación directas a esta casa.

De este modo, se pueden ver también réplicas del protagonista de la oscarizada La Forma del Agua, además de algún material de Hellboy, saga de la que dirigió las dos entregas que se estrenaron a principios de los 2000. Precisamente en la exposición nombrada anteriormente también se podía ver que una de las piezas era la tan decisiva para la trama raíz de jengibre que se puede ver en El Laberinto del Fauno, por lo que no olvida su -muy exitoso- paso por España.

Sin embargo, del Toro falla en lo que sería más original de todo: no vive ahí. A su familia le parece lo bastante espeluznante como para pasar una noche allí, por lo que el director tiene que conformarse con tenerlo de estudio a dond escaparse. Seguro que, con todos esos estímulos, es de lo más sencillo planificar nuevo cine de terror.