Kiko Matamoros y Anabel Pantoja se unen a la ‘Sálvame Fashion Week’ desde ‘Supervivientes’

“En estos momentos se está celebrando la Sálvame Fashion Week 2022, el evento más especial del año para toda la familia del programa y no podía hacerlo sin ti. Por eso, aunque estás sobreviviendo en Honduras queremos que participes en el desfile de la colección cápsula que Agatha Ruiz de la Prada para conmemorar los 13 años que ha cumplido Sálvame”, empezaron a leer Kiko Matamoros y Anabel Pantoja en Supervivientes.

“Te hacemos entrega del modelo que Agatha y su equipo creativo han diseñado pensando en ti para que luzcas en Cayo Cochinos. Dalo todo sobre la arena como si fuera la gran pasarela que hemos montado en España. Sin ti, Sálvame Fashion Week 2022 no tendría sentido”, terminaron leyendo embargados por la emoción.

Lo leían dejándose llevar por la emoción del momento. Sus compañeros seguían acordándose de ellos y querían tenerles presentes en su gran gala de la moda. “Muchas gracias, os quiero muchísimo”, decía entre lágrimas Anabel.

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Pasarela improvisada

Bañador lleno de color y camisa blanca con banda fucsia con el nombre del programa conformaban el look de Kiko que se puso las gafas y sacó su lado más serio para recorrer una improvisada pasarela que compartía con sus compañeros de concurso que con hojas de palma seca en las manos no dejaban de jalearle.

Se vino tan arriba que repitió el recorrido, más sonriente y señalando el corazón que tenía en la camisa para explicar, con ese gesto, lo que sentía en ese momento.

También un corazón llevaba Anabel en su vestido fucsia. Y demostró no ser supersticiosa con la diadema que llevaba en la cabeza con el número 13 que hacía referencia a los años que lleva Sálvame en antena. Desplegó todo su estilo y acabó bailando en su pasarela al ritmo de los aplausos de sus compañeros de aventura.

No pudo evitar su lado más sexy y es que eso del twerking se ha convertido en seña de identidad, presente en cada cosa que hace.

Nada que ver con lo que se vivió en Madrid, pero en Honduras, sin ningún incidente reseñable. Un momento distinto en la rutina que llevan en la playa.