Nvidia anuncia sus nuevas gráficas y los precios asustan a su público

Jugar en PC con todo "al máximo" cada vez será más caro.

RTX4090 / Nvidia

Nvidia ha anunciado oficialmente su nueva serie de tarjetas gráficas RTX-40. Aunque parezca que llegan antes de hora, la serie 30 ya lleva algún tiempo en la calle y va siendo hora de girar un poquito más la tuerca del Ray Tracing a aquellos que encuentran el ocio electrónico en el ordenador.

La nueva RTX 4090 llegará el 12 de Octubre con un precio de 1599 dólares y su hermana pequeña, la RTX 4080, en Noviembre a un precio de 899 dólares. Ambos haciendo gala de la nueva arquitectura “Ada Lovelace” y dando la bienvenida a la generación de los 120 frames por segundo bajo el sistema DLSS3.

Como siempre, en España nos llevamos una de las peores partes del pastel y vemos como esos precios suben irremediablemente en nuestro territorio. RTX 4090 se quedará a una pestaña de los 2000 euros, con un precio oficial de 1959 euros y su compañera de viaje, la RTX 4080, partirá de los 1099 euros para la primera configuración y llegará a los 1469 euros, para la segunda.

La RTX 4090 llegará con una cantidad de memoria sin precedentes; 24 Gb de memoria GDDR6X y la propia compañía dice que será de 2 a 4 veces más rápida que la actual RTX 3090 Ti, consumiendo la misma cantidad de voltaje. La fuente de alimentación recomendada es de 850 watios.

La RTX4080, por el contrario, llegarán en dos configuraciones, una de 12Gb de memoria y otra de 16Gb y, de nuevo, dicen que será de 2 a 4 veces más potente que la actual RTX 3080Ti.

La compañía ha dejado algunas muestras de lo que son capaces estas tarjetas gráficas de nueva generación.

El alto precio de ambas gráficas ha levantado algo de revuelo entre los jugadores de PC, pero Nvidia se escuda diciendo que “la idea de que los chips bajan de precio es una historia de pasado” y que “las RTX 3080 de 10Gb sigue siendo una oferta increíble y continuarán ofreciéndola en su catálogo”, rompiendo las esperanzas que muchos usuarios de PC tenían de ver una bajada de precio de las tarjetas gráficas sabiendo que el minado de criptomonedas con ellas cada vez resulta menos rentable.

Seguir jugando en PC todavía es posible, pero parece que mover los juegos con todo en “High” será cada vez más caro.