5 lecciones que hemos aprendido viendo ‘My Mind & Me’, el documental de Selena Gómez

Después de darle muchas vueltas, de pensar si esto le beneficiaría o no, Selena Gómez ha tomado una decisión: tomar las riendas de su narrativa, de su historia y de su sufrimiento en el ámbito de la salud mental.

Para evitar que la prensa siga especulando sobre su vida privada, la cantante ha estrenado su documental más personal hasta la fecha, My Mind & Me, y así contar su verdad en primera persona. Dirigido por Alek Keshishian, muestra el viaje de luces y sombras que realizó desde 2016, con los preparativos de su gira Revival, hasta 2019 -y la actualidad-, cuando decidió confesar públicamente que había sido diagnosticada con trastorno de la bipolaridad.

A modo de diario, y través de imágenes que se intercalan y se entremezclan con momentos sobre el escenario, entre bambalinas y de su infancia, descubrimos cómo de abrumadora ha sido la vida de la artista, la cual siempre ha estado en el foco mediático de una forma u otra. Y es que había estado encadenando trabajo sin parar desde los 7 años, cuando se introdujo en el mundo del entretenimiento de la mano de Barney and friends, hasta los 27, cuando finalmente colapsó en una crisis nerviosa propiciada por un pico de ansiedad y un episodio depresivo severo, que desembocó en su retirada de los escenarios y en el internamiento en varios centros psiquiátricos.

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No solo ha querido enseñar al mundo cómo ha sido su dura rehabilitación con el fin de acallar los rumores sobre adicciones y problemas de salud, sino también para que sirva de espejo para que otras personas en una situación igual o muy parecida a la suya se atrevan a dar un paso adelante a hablar sobre sus problemas, sin importar cuán graves o baladíes sean.

Con motivo del lanzamiento de este largometraje tan especial, aquí te dejamos las 5 lecciones que hemos aprendido después de verlo:

1. Somos nuestro peor enemigo, pero eso no debe paralizarnos. Selena visita el instituto donde estudió para lanzar un mensaje de motivación a los estudiantes: "Si creéis que no podéis hacer algo, debéis saber que nadie más que vosotros os dirá que no podéis. Así que continuad haciendo lo que queráis".
2. Si lo necesitas, pide ayuda. No te aísles. Durante la mayor parte de su adolescencia, y durante su carrera musical, la artista se ha sentido muy sola. A partir de abrirse y rodearse de las personas indicadas, se da cuenta de que le encanta socializar y relacionarse con otros.
3. Encuentra un motivo por el que levantarte cada día; di "por favor" y "gracias". ¿Cuál es tu vocación? La de Selena es utilizar su plataforma para ayudar a gente sin recursos a acceder a mejores condiciones de vida (educación y salud) y visibilizar los problemas de salud (física, como el lupus y la bipoliridad; y mental, como la ansiedad o la depresión). Un problema que, afortunadamente, cada vez es menos tabú.
4. No tires la toalla por tus seres queridos. En este caso, quién no no lo hizo fue la madre de Selena Gómez. Junto a su círculo más íntimo, fue la persona que le acompañó en todo momento durante el periodo más difícil de su vida, a pesar de los comentarios hirientes que hacía sin venir a cuento (ya que aún desconocía que padecía trastorno bipolar y no sabía por qué se comportaba de aquella manera).
5. Muestra empatía y sé honestx contigx mismx. Escucha atentamente a lo que tienen que decirte, por muy nimio que parezca. Lo que puede ser una tontería para ti, puede no serlo para la otra persona y no pretendas ser alguien que no eres. Di tu verdad.

Además de estas pequeñas lecciones de vida, hay otras conclusiones que se pueden sacar viendo My Mind & Me, como que todo es temporal, incluso la tristeza (y que también hay que hablar de ella); que es importante conocer nuestros sentimientos para aprender a gestionarlos; y que no pasa nada por sentirse perdidx, porque tenemos capacidad para reaprender aquello que creímos haber olvidado.