Samsung copiará el modelo de Apple en 2025 para desbancar al iPhone

Sabemos de sobra que los Galaxy S23 que saldrán a principios de 2023 van a llevar un procesador Snapdragon 8 Gen2, y los test que han salido muestran que Qualcomm está acercándose poco a poco a cerrar la distancia que le saca el Bionic A16 de Apple.

Rumores recientes sugieren que Samsung no va a esperar a que Qualcomm sobrepase el rendimiento de los chips de Apple, y podría copiar el modelo que usan tanto la marca de Cupertino como Google, diseñar sus propios procesadores.

Estoy podría llevar a confusión, sado que Samsung ya tiene sus procesadores propios con el Exynos. El Galaxy S22 aún usaba el Exynos en algunas regiones, y varios de los demás modelos lo llevan en su interior. También hay fabricantes como Vivo que le compran a Samsung sus chips.

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Samsung vende chips a sus competidores porque la división de procesadores actúa como compañía independiente. Lo que se conoce como ‘Samsung Semiconductor’ está dividida por un “firewall” legal de las otras divisiones, incluyendo ‘Samsung Mobile’, que diseña y produce los teléfonos móviles, tablets y dispositivos vestibles (relojes y productos del estilo).

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Lo que convierte en interesante el rumor es que Samsung Mobile tomaría más responsabilidad en la producción de los nuevos chips. En el pasado, los Exynos fueron diseñados en colaboración con otros grupos de la compañía, pero ahora lo haría el mismo grupo que se encarga de los smartphones.

Según el portal coreano TheElec, ese grupo sería liderado por Choi Won-Joon, que llegó a Samsung procedente de Qualcomm, así que la experiencia la tiene. Con este cambio en la estrategia, Samsung pasaría a trabajar como Apple y Google, compañías que ya ponen sus chips a los teléfonos (Bionic y Tensor respectivamente).

Se espera que Samsung siga usando el procesador Snapdragon de momento, pero el cambio llegaría con el Galaxy S25, si para entonces la numeración sigue como está ahora. Eso pondría al nuevo procesador de Samsung en competencia con el iPhone 16, que habría salido unos meses antes, y el iPhone 17 con el año más avanzado.

Por mucho que Google esté haciendo esto mismo, la rumorología apunta a que el movimiento está enfocado a la lucha con Apple, el verdadero rival. El chip Bionic está a la cabeza del rendimiento, pese a que el Snapdragon 8 Gen2 se haya quedado bastante cerca.

Samsung no se conforma, y quiere que sus Galaxy S sean los teléfonos más potentes que se puedan comprar. La compañía quedó decepcionada durante años por la incapacidad de batir a Apple con su Exynos, por lo que la meta final está clara. Sin embargo, deberían no olvidar otras prioridades, como la gestión de la energía o incluir funciones innovadoras, no solo centrarse en “fuerza bruta”.