El Nothing Phone (1) nos gusta más de lo que cabía esperar
Probamos por fin el nuevo teléfono creado por Carl Pei.
Carl Pei, el cofundador de OnePlus, dejó la compañía para crear algo nuevo y agitar así la industria de los teléfonos móviles, cansado de terminales idénticos que no le decían nada. Con Nothing, creada hace un par de años con base en Londres, busca hacer algo que sea refrescante, y su Phone (1) ha sido el primer paso.
El Nothing Phone (1) llegó con la promesa de ser “una llamada a despertar la industria”, y aunque puede parecer una exageración, pocos productos han empezado tantas conversaciones como este. Una vez que ha caído en nuestras manos tras varios meses de espera, vamos a ver sus puntos fuertes.
Diseño
El principal reclamo de este teléfono, por encima de cualquier especificación, es el 'look & feel' del terminal. Como sabéis, la parte trasera del teléfono deja a la vista sus piezas internas a través de un cristal impecable que parece difícil de rayar. Una insignia ya de esta marca que repite en el diseño de los auriculares con los que debutó.
Esa transparencia deja también a la vista la Interfaz Glyph, una amalgama de 900 LEDs que se ilumina para crear notificaciones personalizadas que no necesitan de sonido ni de vibración para ser efectivas. Podremos saber cuando determinados contactos nos están llamando, el estado de carga y multitud de detalles más. No ha debido ser fácil hacer que el interior del teléfono sea agradable a la vista; estamos seguros de que si abriésemos la parte trasera de nuestros terminales encontraríamos un lío de componentes y cables.
Más allá de los atributos especiales e identificativos del teléfono y pese al precio que marca la etiqueta, en la mano, este Nothing(1) se siente como un terminal sólido y bien fabricado que identificaríamos como "caro". Una sensación muy similar a la que os daría un iPhone 14. Diseño que, por cierto, Nothing reconoce como una de las principales fuentes de inspiración.
Cámara
La fotografía es uno de los aspectos que los usuarios suelen tener en más alta estima. La mayoría de las cámaras hacen un buen trabajo en condiciones favorables de luz, y Nothing no ha inventado nada con Phone (1), pero si ha eliminado cosas que sobran.
Y es que el teléfono que tenemos entre manos salió con dos sensores traseros de 50MP, uno principal y una lente gran angular, además de una cámara de selfies de 16MP bastante decente. Nada de sensores de profundidad, monocromos o unidades macro de 2MP que están para figurar y hacernos creer que tenemos infinitas posibilidades para hacer fotos.
Las dos cámaras del Phone (1) son de fiar en la mayoría de situaciones, especialmente con las actualizaciones que han salido desde el lanzamiento del teléfono. ¿Son las mejores que hay? No, pero teniendo en cuenta el precio del teléfono, obtenemos fotos que cumplirán para los más exigente si el destino son las redes sociales e, incluso, podrán pasar el examen de la visualización en pantalla de ordenador (sobretodo las hechas con la cámara principal).
El punto débil, como el de tantos y tantos smartphones, son las fotos nocturnas, donde el Nothing Phone (1) tiene algunos problemas con el enfoque y el detalle, pero, en general, el apartado fotográfico cumple con honores con la expectativa que crea la etiqueta de precio.
¿Cuánto dura la batería?
En los días que hemos podido probar el teléfono no hemos notado nada raro con la batería. Tenemos una capacidad de 4.500mAh, bastante estándar, y se llega bastante bien al final del día sin dejarla seca. En cuanto a la carga, que es de 33W, tenemos la mitad lista en media hora.
El Phone (1) dispone de carga inalámbrica y de carga inversa, por lo que se pueden poner auriculares compatibles en la parte trasera del teléfono cuando esté boca abajo y también se recargarán. Ideal si nos quedamos sin carga en ellos cuando estemos fuera de casa.
¿Qué es el Interfaz Glyph?
Como hemos dicho antes, la elección del diseño trasero es más que un conjunto de “luces bonitas”, pero es cosa nuestra como de útiles son en realidad. Si no sois de dejar el teléfono boca abajo normalmente no vais a aprovecharlo mucho, pero si lo hacéis veréis lo currado que está.
Cuando se conecta a un cable de carga, la luz inferior brilla para mostrar como de cargado está el teléfono. También puede encenderse cuando estamos cargándolo de forma inalámbrica, y se puede emparejar un patrón de luz con un tono de llamada específico, para así asociarlo a distintos contactos. De esa manera, sabremos quién llama sin tener que darle la vuelta al teléfono.
Es bastante “guay” en la práctica, pero esto significa memorizar los patrones de los contactos más habituales. Y no hay que olvidar que estamos en una época donde se mandan más mensajes que llamadas, y ahí las luces no ayudan tanto. Aun así, sigue siendo un detalle bastante atractivo y único del terminal.
¿Qué tal funciona?
El Phone (1) corre bajo el sistema operativo Nothing OS y Android 12. Igual que en OnePlus, Carl Pei ha creado una capa de personalización limpia, sin las típicas aplicaciones preinstaladas que luego es difícil o imposible quitar.
La compañía dará soporte para actualizaciones importantes durante tres años, incluidas las de Android, por lo que tenemos asegurado hasta Android 15. Lo único malo es que no está entre los teléfonos más tempraneros que recibirán Android 13, aún le faltan unos cuantos meses.
Una gran pantalla
La pantalla que tenemos entre manos es un panel OLED que rivaliza en resolución con flagships como el Pixel 6, y además tiene refresco dinámico entre 60 y 120Hz, lo cual dice mucho para un teléfono de este rango de precios. Es grande, colorida y con brillo más que suficiente.
¿Para quién?
Hemos de considerar que Nothing es el “nuevo chico en la oficina” en el mercado de la telefonía móvil, pero aún así han acertado en bastantes puntos clave con su primer smartphone. Es un terminal muy capaz con una gran pantalla, un rendimiento de diez y dos cámaras muy decentes, lo suficientemente buenas para la mayoría de ocasiones.
En la mano se siente como un teléfono sólido, frágil y caro. Los bordes planos de aluminio y la pantalla plana le dan ese 'look iPhone' que tanto se codicia hoy en día.
Nothing(1) es un teléfono perfecto para aquellos que busquen un teléfono especial y que estén cansados de los diseños de siempre. Como decíamos, la cámara, aunque sin honores, pasa el examen y no hemos podido encontrar pega alguna al rendimiento del terminal, notaréis que en la navegación vuela como volaría un Oneplus o un Pixel.
No encontrareis móviles más atrevidos que este por 400 euros para su versión de 8/128GB, o 500 si queremos la superior de 12/256GB.