Adele, su inmortal peineta “a los del traje” y otros enfados de la diva británica
La cantante es muy dada a subir su dedo corazón cuando se enfada, muchas veces cargada de razón
La noche del 21 de febrero de 2012, Adele quedó inmortalizada sobre el escenario del O2 Arena de Londres. Y no porque se convirtiera en una de las grandes triunfadoras de los Brit Awards. Lo que la prensa internacional destacó en titulares y en imágenes al día siguiente de la ceremonia fue su peineta. El ofensivo gesto, centro de un enorme torbellino de habladurías, respondía a su enfado por ‘sacarla’ del escenario en pleno discurso de agradecimiento. No es la única vez que la diva británica es noticia por sus cabreos y los exterioriza con el dedo corazón en alto o de cualquier otra forma. Es justo reconocer que muchos de esos enfados son perfectamente entendibles.
Una peineta “a los del traje”
Adele estaba pletórica. 21, su segundo álbum, batía récords de ventas y acababa de regresar de Los Ángeles tras conseguir seis Grammys. Y ahora estaba en el O2 Arena de Londres, a punto de convertirse en la gran triunfadora de los Brits junto a Ed Sheeran. Esa noche del 21 de Febrero de 2012, la cantante subiría dos veces al escenario. Una a recoger la estatuilla a Mejor Vocalista Femenina (se la entregó Kylie Minogue) y la otra a recibir el galardón más codiciado, el de Mejor Álbum. George Michael fue el encargado de dárselo. Con todo el recinto en pie, aplaudiendo, una Adele emocionada inició su discurso de agradecimiento.
"Gracias, muchas gracias”, decía la intérprete de Hello. Y a continuación, manifestó lo orgullosa que se sentía “de ser británica y poder enarbolar nuestra bandera”, de “estar aquí con todos vosotros y...". No pudo seguir. James Cordon (el actor cómico presentador de la gala) se acercó a ella para interrumpirla: “Lo siento mucho”, dijo. Adele se despidió, - “Adiós, os veré en una próxima ocasión” - al mismo tiempo que inclinaba la cabeza y hacía una peineta. Sonriendo. Sin perder la compostura. Blur ya estaba en el escenario y empezaba su actuación. Había prisa.
Posteriormente explicaría que ese dedo medio en alto de su mano derecha era un gesto de protesta “a los del traje (en referencia a los productores del evento), no a los fans”. Y añadió, “Lo siento si he ofendido a alguien, pero los trajeados me han ofendido a mí”. Por su parte, Corden, claramente incómodo con el incidente, dijo en ITV2: “Me sentí mal teniendo que cortar a Adele. No entiendo por qué tuve que hacerlo, no fue una manera muy agradable de terminar. Blur tenía que tocar 11 minutos y ella apenas tuvo la oportunidad de dar las gracias”.
La peineta tuvo respuesta por parte de ITV y de los Brits. A través de un comunicado manifestaron sus más sinceras disculpas: “Los Brits son un evento en directo. Desafortunadamente, el programa estaba sobrepasando el tiempo y teníamos que seguir. Nos gustaría disculparnos con Adele por la interrupción”.
Las peinetas a los paparazzi
La de los Brits es la peineta más famosa de Adele. Pero la cantante es muy dada a subir su dedo corazón cuando se enfada. Solo un mes antes de la gala, en Enero de 2012, fue captada junto a su pareja, Simon Konecki (y posterior marido hasta su divorcio en 2019) cuando llegaba al aeropuerto Londres. Regresaban de Miami, donde la cantante estuvo recuperándose de una operación de las cuerdas vocales. Cuando se dio cuenta de la presencia de los fotógrafos, se dirigió a ellos y levantó su dedo medio.
En Febrero de 2020, visiblemente enfadada, su gesto con el dedo también quedó también para la eternidad. Había estado celebrando la boda de su amiga Laura Dockrill en el pub londinense Mason’s Arms. Durante la fiesta interpretó animada algunos de sus éxitos. El problema llegó a la salida, cuando se topó con las cámaras de los paparazzi. Mientras caminaba hacia el coche, intentó ocultar su cara con un ramo de flores. Pero no logró pasar desapercibida como evidencian las fotografías de Adele gritando a los reporteros y haciéndoles la peineta cuando ya estaba en el vehículo.
“¿Podrías dejar de grabar?”
Contrariada, Adele dejó de cantar en medio de un concierto en Verona (Italia) con el que presentaba su tercer álbum, 25, dentro de la gira ‘Adele Live 2016’. En un momento de la actuación, se dirigió a una persona del público: “¿Podrías dejar de grabar con una cámara de vídeo?”, preguntó. "Porque verdaderamente estoy aquí, en la vida real. Puedes disfrutar esto en la vida real mejor que a través de tu cámara". El público la vitoreó mientras la cantante pidió a la mujer que bajara su trípode. "Esto no es un DVD, esto es un show real y me gustaría que disfrutarais de mi concierto porque hay montones de personas fuera que no pueden entrar".
Una piscina que parecía “un estanque viejo”
El diseño de una piscina enfureció tanto a Adele que canceló su residencia en Las Vegas ‘Weekends With Adele’. Al menos eso es lo que publicó The Sun. Los shows iban a celebrarse en Caesars Palace, entre Enero y Abril de 2022. Pero se suspendieron con solo 24 horas de antelación. Según las declaraciones de una fuente cercana al tabloide británico: “La idea era llenar la piscina de agua durante el concierto y ella sería elevada con un mecanismo, una especie de grúa, creando la ilusión de estaba flotando sobre el agua. Cuando vio el diseño final, se negó a actuar. Adele describió la piscina como un 'estanque viejo' y rechazó, sin rodeos, estar en medio de eso".
La artista inglesa anunció que posponía todos los conciertos de Las Vegas “porque mi show no está preparado y la mitad de mi equipo tiene COVID “. Finalmente, los retomó en noviembre.
“¿Qué piensas de mi álbum?”
Adele, molesta, abandonó una entrevista para la televisión australiana Channel 7 porque se sintió ofendida. No porque indagaran en su vida personal. Fue por otra razón. Y de peso. El periodista Matt Doran había volado a Londres para charlar con la diva durante unos "20-30 minutos". Pero durante la conversación, en Noviembre de 2021, Doran no hizo ninguna pregunta sobre su nuevo disco. Justo entonces, la estrella acababa de lanzar su cuarto álbum, titulado 30, el primero en seis años. Y le preguntó, "¿Qué piensas de mi álbum?”. Él contestó, “No lo he escuchado”. Adele abandonó la entrevista realmente irritada.
Doran, según The Guardian, confesó que había "cometido un terrible error" y admitió que había "insultado a Adele”. Aunque otras fuentes aseguran que la entrevista ya había terminado cuando la artista puso a prueba a Matt.
Alicia Sánchez
Periodista en busca de historias chulas del pop