La hija de Kim Kardashian y la hermana pequeña de Selena Gómez dan espectáculo en un concierto de Katy Perry

Katy Perry tiene una residencia en Las Vegas y ha contado con la visita de grandes amigas. Hace un par de días la veíamos con Kim Kardashian, Paris Hilton o Sia. La cantante australiana no dudaba en lucir un caftán con una foto de Katy estampada a lo grande.

“Me encanta cuando mis chicas vienen a #PLAY🍄 @kimkardashian @siamusic @parisilton ♥️♥️♥️”, compartía la cantante en sus redes respecto a sus invitadas de honor. Y es que parece que su espectáculo está siendo todo un éxito y no solo por los muchos amigos que están yendo a verla.

Las imágenes que hemos podido ver nos dejan claro que hay muy buena relación entre estas mujeres que, juntas, acumulan millones y millones de seguidores en redes sociales.

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Pero no ha sido el único momentazo que le han dejado estos conciertos en la ciudad del juego. Kim Kardashian se ha llevado a su hija North West a ver el espectáculo y ha tenido su momento de gloria sobre el escenario.

El momentazo

Katy Perry se percataba de que la hija de Kim Kardashian y Kanye West estaba en primera fila y la invitaba a subir al escenario. Entonces admitía públicamente que era muy fan de los TikTok de baile de la pequeña y la preguntaba si podría contar con una bailarina tan grande con ella en su concierto.

North preguntaba entonces si podían acompañarla sus amigas con las que había ido al concierto. Y la cantante no lo dudó. Allí que subieron todas, incluida la hermana pequeña de Selena Gómez, Gracie, a la que hace poco veíamos también en el concierto de Taylor Swift. Está claro que una nueva generación de baby celebs están robando el protagonismo a sus mayores.

Mientras sonaba Swish Swish de fondo, las chicas comenzaban a dar volteretas sobre el escenario y Katy no se ha queda atrás y les ha seguido el ritmo. Tan arriba se ha venido que ha terminado en el suelo abierta de piernas.

Lo que está claro es que toda esa pandilla de amigas sabe lo que es el espectáculo y no han tenido ningún reparo en sumarse al espectáculo sin un ápice de vergüenza.

Sin duda, un momento que será difícil de olvidar para las niñas que tienen la suerte de pertenecer a familias con privilegios. No faltó la visita al camerino para hacerse las pertinentes fotos y pedir los deseados autógrafos.

Dentro de nada, vemos a la hija de Katy Perry seguir sus pasos.