Adiós a dormir con la calefacción encendida: una experta aconseja que la habitación esté a 19º
La temperatura ideal para dormir es clave para un descanso reparador

Dormitorio / Xavier Lorenzo
En la búsqueda de un sueño perfecto, muchos de nosotros hemos recurrido a diversas estrategias, desde colchones ergonómicos hasta aplicaciones de meditación. Sin embargo, hay un factor crucial que a menudo pasamos por alto: la temperatura de nuestra habitación.
Recientemente, La Dra. Susanna Søberg, científica metabólica, explicó en el podcast Feel Better, Live More del Dr. Rangan Chatterjee que mantener la habitación a 19ºC puede ser la clave para un descanso óptimo. Esta recomendación ha generado un gran interés, especialmente entre aquellos que suelen dormir con la calefacción encendida durante los meses más fríos.
La experta ha explicado que una temperatura adecuada no solo mejora la calidad del sueño, sino que también tiene beneficios para la salud en general. La temperatura ideal para dormir, según estudios realizados por instituciones como Harvard, se encuentra entre 16ºC y 18ºC. Mantener la habitación a 19ºC se alinea con estas recomendaciones y puede ayudar a mejorar la calidad del sueño.
Además de mejorar la calidad del sueño, dormir en una habitación a 19ºC puede tener otros beneficios para la salud. De hecho, existe un tipo de grasa, la grasa parda, que puede ser muy beneficiosa para nuestro organismo. La grasa parda es una grasa "buena" y saludable, que desempeña varias funciones clave, como mejorar el metabolismo, aumentar el gasto energético e incluso regular la temperatura corporal.
Esta grasa se activa principalmente en condiciones de frío y ofrece múltiples beneficios para la salud. Entre sus efectos positivos se encuentran la mejora de la sensibilidad a la insulina, la reducción de la presión arterial y el aumento del gasto energético. Luego, al dormir en una habitación a 19 grados, es decir, a una temperatura más fría (pero no extremadamente fría), observaron que aumentaba la cantidad de grasa parda y, además, se volvían más sensibles a la insulina. "Todo esto en solo un mes", comenta la Dra. Søberg.
La regulación de la temperatura corporal es esencial para un buen descanso. Durante el sueño, nuestro cuerpo experimenta una ligera disminución de la temperatura, lo que indica que es hora de descansar. Si la habitación está demasiado caliente, este proceso natural se ve interrumpido, lo que puede llevar a un sueño fragmentado y menos reparador. Además, dormir en un ambiente fresco puede reducir el riesgo de trastornos del sueño como el insomnio y la apnea del sueño.
Para aquellos que están acostumbrados a dormir con la calefacción encendida, hacer este cambio puede parecer un desafío. Sin embargo, hay varias estrategias que pueden ayudar a mantener la habitación a una temperatura adecuada sin sacrificar el confort. Utilizar mantas y edredones de materiales que retengan el calor sin sobrecalentar es una opción efectiva. Además, la ventilación adecuada del dormitorio puede ayudar a mantener una temperatura constante y agradable.