Vanesa Martín, sobre 'Objetos Perdidos': "Abrí una nueva paleta de colores que yo había limitado por un tiempo"
Hablamos con la cantautora malagueña sobre el primer single de su nueva era
Vanesa Martín no estaba muerta, estaba de parranda. Y es que la artista malagueña ha vuelto nueve meses después de lanzar su último sencillo, El Nudo, para inaugurar una nueva era musical. Una etapa que empieza con Objetos Perdidos. Y sí, es la Vanesa de siempre, pero distinta. Como diría Rocío Jurado en aquel anuncio de Titanlux: es lo mismo, pero no es lo mismo.
Y es que Vanesa Martín ha tenido que cruzar el Atlántico, empaparse de los sonidos de Latinoamérica, para encontrar de nuevo su raíz y su esencia. Lo curioso de todo es que esta malagueña, que nunca ha soltado la guitarra española, la ha encontrado en una bachata. Porque Objetos Perdidos, el esperadísimo regreso de Vanesa, es una canción para celebrar las despedidas y los cierres. Pero a golpe de cadera. Porque mientras que la letra te invita a ser nostálgico, el sonido te lleva a bailar toda la noche. Lo mejor de ambos mundos. Y no nos extraña, porque para encontrar este sonido la cantante ha tenido que recorrer la mitad de uno.
Para contarnos todos los secretos sobre este primer single con el que inicia una nueva era musical, Vanesa ha venido a los estudios de LOS40. La cantante nos ha desvelado algunos detalles de cómo nació esta canción. Además nos ha adelantado aspectos de su próximo disco (algunos de ellos los desvelaremos en la entrevista en vídeo que saldrá en los próximos días).
P: Objetos perdidos es el primer single de tu nueva era. Una canción donde apuestas por una bachata, ¿en qué momento decidiste lanzarte a este tema?
Llevo tiempo pensando que no todas las letras profundas tienen que estar acompañadas de un dramatismo en la música. Y dentro de ese cambio que yo quería, creo que la bachata aporta ese punto de nostalgia e incluso de ironía de algo que ha quedado atrás. La bachata tiene un equilibrio entre que es movida, pero no es una canción disco, que le quitaría mucho mensaje a la letra. Ese espíritu latino divertido de hay que festejar la vida.
La producción ha corrido a cargo de Casta, que ha trabajado con artistas como Karol G, ¿en qué momento os conocisteis?
Ha sido una pieza fundamental porque es el productor de una de las bachatas por excelencia que todos conocemos (La Bachata de Manuel Turizo). Y eso me provocó un poco de reticencia. Es que esa canción ha sido muy grande y pensar que era mi productor y que íbamos a hacer una bachata era como rizar el rizo. Él me dijo que ni La Bachata de Turizo es la única y que encajaba perfectamente con la métrica de la canción y con el tiempo. Y ahi fue. Casta ha sido una pieza fundamental.
Y qué fue antes, ¿Casta o la bachata?
Casta fue antes. Y hablando, yo le dije que no quería una canción dramática. Es que como es la vida que yo esta canción no quería meterla en el disco. Y mira, ahora es el single. Yo no quería una pena de canción. Quería que fuese como cuando te acuerdas con alguien con una sonrisa. No tener ese momento de corta venas. Entonces Casta me dijo que veía a Juan Luis Guerra y yo me quedé en plan “¿cómo?”. Y él me dijo, la veo por aquí.
Objetos perdidos no quería meterla en el disco y, mira, ahora es el single
¿Por qué Objetos Perdidos como single si en un principio no iba ni a entrar en el disco?
Yo creo que explica muy bien mi pasado y mi presente. Entra como una balada y de repente se pone a festejar la vida. Pero cuando empiezas a escucharla es como “bueno, ya viene Vanesa con una balada”. Es como rescatar mi pasado y subirlo al carrito del presente. Me estoy divirtiendo tanto y me apetecía. Y es que este disco que viene tiene mucho que ver con lo que yo escucho. Yo es que a Casta le enviaba desde coplas hasta Rels B, pasando por Nathy Peluso. A mí me apetecía salir a este lanzamiento así.
¿Ha tenido que ver este cambio de sonido con tu cambio de discográfica?
Ha tenido que ver en cuanto a que Jesús López, el presidente de Universal, me decía “yo quiero a la Vanesa de la que me enamoré en su día”. Él decía que tenía que mostrar mi identidad al cien por cien de mi verdad. Él me dijo que me olvidase de todo y que me sumergiese en mi raíz, en mi verdad, y dime qué hay. Él vino a mi casa y me dijo cántame una rumba que hayas escrito con 17 años, una canción que hayas cantado con 24... y ahí me dijo “yo quiero esto”. Olvídate de la industria y conecta con tu raíz para que conecte con otras. Me estaba abriendo una nueva paleta de colores que yo había limitado por un tiempo. Me devolvió la ilusión. He escrito 42 canciones, la primera vez que escribo tanto para un disco. Una seguridad que cogí. Un disfrute, un no darme miedo a nada.
Me estaba abriendo una nueva paleta de colores que yo había limitado por un tiempo. Me devolvió la ilusión
¿Y cómo nació la letra de Objetos perdidos?
Mira que tontería, pero llegamos de Latinoamérica precisamente y no encontrábamos la maleta de mi batería. Los de la compañía nos dijeron que nos acercáramos a objetos perdidos para ver si estaba ahí. Yo no había estado nunca allí. Gracias a Dios, toco madera. Y cuando llegué allí, dije “cuántas historias ahí aquí, esa mochila, esa cámara de fotos” y lo vas metiendo en tu saco de cosas que quieres contar.
¿Qué es lo que más te molestaría perder y que no estuviese en Objetos Perdidos?
Una guitarra. Me jodería muchísimo. Tengo una serie de guitarras mías que considero muy importantes. Que viajan siempre conmigo. Que alguna de esas se me perdiera. Las mayores discusiones que he tenido en mi vida ha sido con azafatos y azafatas que querían llevarse mi guitarra a bodega cuando yo había pagado para que no. Que me perdiesen una guitarra de estas me dolería.
La entrevista completa en vídeo muy pronto en LOS40