4 pesadillas de Navidad que se repiten cada año
No todo iban a ser regalos y turrones
¡Claro que nos gusta la Navidad! Sería hipócrita decir lo contrario, pero todo lado bueno tiene sus pequeñas pegas y en este caso hemos sacado a nuestro pequeño Grinch para que no te pille por sorpresa. Aquí tienes 4 Pesadillas de Navidad, que independientemente de donde vivas, cuantos años tengas y cuáles sean tus costumbres, se repetirán en muchos de los hogares y calles españolas. Po eso y a pesar de este pequeño espíritu aguafiestas, ¡seremos los primeros en felicitarte las fiestas!
¡Qué alegría Pablito! ¿Cuántas canciones más te sabes?
Hasta los más cascarrabias sienten devoción por los niños pequeños, pero los muy pequeños, los que no hablan básicamente. Porque luego aprenden a hablar, y hasta ahí todo bien, lo malo es cuando aprenden a cantar. Mil y una canciones que te tocarán cantar, bailar y coreografiar con tus primos, sobrinos o hijos pequeños. Ellos son una de las grandes alegrías de la Navidad, así que lo hacemos encantados, pero después de 1 Kilo de aperitivos, 2 platos de caldo, medio kg de carne, postre y copa, no estamos para bailes infantiles. Además puede que "Pablito" se haya aprendido 22 tipos de villancicos o peor aún, sólo se sepa uno y te toque cantarlo 22 veces seguidas. Aunque existen madres capaces de solucionar todo esto con una frase muy recurrente, "Pablito por qué no te vas a jugar con los primos".
El Invitado "H"... de Hortera
No queremos apuntar a nadie, no sabemos si hablamos de nosotros o de vosotros, si nos estamos refiriendo a los cuñad@s o a los yern@s, el caso es que siempre hay alguien que da la nota textilmente hablando. Y siempre es siempre. Una pajarita roja con puntos blancos o una camisa con un dragón bordado, un vestido inapropiado o cualquier cosa que se nos ocurra, ejemplos tendremos muchos en nuestras comidas y cenas. Pero sin duda este es un básico de la Navidad.
Los que optamos por las versiones más normales no tenemos porque renunciar a vestir de forma original, y mucho menos en Navidad, por eso siempre podrás regalarles algo de ropa en Reyes o Papa Noel y si ya quieres redondear la jugada, puedes hacerlo con algunos de los mejores descuentos en moda, de los que ya te hemos informado alguna vez que otra.
20 Minutos, 150 metros. Literalmente
Suena exagerado pero es real, tan real como pasear un sábado por las calles más céntricas de casi cualquier ciudad y esto sin duda, es una de las pesadillas de Navidad. Es normal que la gente salga de compras, vaya al cine o haga lo que crea conveniente, pero no hace falta que vayamos todos a la vez. Ver cómo pasan las agujas del reloj y que tu posición sigue siendo la misma es desesperante, como también lo es llevar 20 minutos andando detrás de un guiri de dos metros quince centímetros que no te deja ni ver las luces de Navidad. Hemos visto atascos de coches más fluidos que la calle preciados en el mes de diciembre.
Cenas de todo con todos, todos los días
La Navidad tiene algo muy parecido al verano y es que la mayoría de amigos y familiares en el extranjero suelen volver a casa. Sí, cómo dice la canción. El problema de la Navidad y que no tiene el verano es que uno dura 10-15 días y el otro casi 2 meses, por lo que las visitas se reparten. En Navidad siempre quieres ver a tus amigos, eso es inevitable, el problema son las 12 comidas, 8 cenas, 9 aperitivos y otras tantas sobremesas que tienes en esos 15 días y que convierten tu Navidad en un reto gastronómico digno de Crónicas carnívoras.
Así que estamos empezando a pensar que lo de la cuesta de enero no puede ser una expresión puramente económica, tiene que haber algo detrás... Algo como el culo y la barriga que hemos sacado a relucir estas navidades y que nos impiden subir la cuesta. Aun así, disfrutaremos como niños cada una de estas pesadillas de Navidad.
