Antonio Orozco enternece hablando de la canción que ha dedicado a su hija
Antonio Orozco ficha a Sebastián Yatra en su última colaboración. / Samuel de Roman/Redferns
Antonio Orozco es, sin duda, un padre orgulloso. Su primogénito, Jan, ha dejado de ser un niño para convertirse en un jovencito talentoso que sigue los pasos de su padre y derrocha pasión por la música, aunque en otro registro. Desde hace años le hemos visto poco a poco ganando seguridad tocando la batería o poniéndose detrás de una mesa de DJ.
Lo cierto es que le hemos empezado a conocer cuando ya tenía unos añitos. Durante su primera infancia le mantuvo muy escondido. Pero con su segunda hija, Antonella, las cosas han sido diferentes. Desde que nació, ha ido compartiendo con todos sus seguidores cómo la pequeña iba creciendo.
Se le cae la baba cuando habla de su pequeña y nosotros morimos de amor cada vez que la vemos. A ella le ha dedicado su última canción: La revolución.
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“Hay revoluciones que aun avisando de que van a venir, y te van a cambiar tu vida de arriba a abajo, te generan tal emoción que hasta sirven de inspiración para nuevas canciones”, aseguraba en su Instagram.
“En este trocito de vídeo hablo de Antonella, mi hija, mi gran revolución desde ya un año y medio, y que además de unos grandes ojos azules, tiene desde este verano una canción que está inspirada en lo que me ha hecho sentir”, añadía.
Amor incondicional
“Cuando la escuchéis en el coche de camino a la playa, tumbados en la arena o quizá en el inicio de un concierto, os daréis cuenta de que es una canción muy especial. Y lo es porque habla del amor más puro e incondicional, del amor que sientes por alguien que acaba de llegar a tu vida y te cambia para siempre”, expresaba sobre lo que ha supuesto la llegada de su hija.
Y enternece cada vez que habla de ella y del amor que siente que ha logrado transmitir de la manera que mejor sabe hacerlo, a través de la música. Asegura que La revolución, “habla de la felicidad que sientes cuando la miras, del miedo que te da pensar en todo lo que tienes por delante y de la emoción que llega cuando sabes que vas a estar ahí para esa persona para siempre. Es una canción que habla de sueños, de aventuras, del presente y de sentirse vivo. Y también del pasado, y de todo lo que has aprendido gracias a las cosas que han construido el puzzle de tus días”.
Y es una de las canciones que suena en sus directos, esos en los que sigue colgando el cartel de entradas agotadas.
