Imposible no reírse con Manolo García y Quimi Portet explicando a qué se debe el regreso de El último de la Fila, 25 años después

Hace unos días nos quedábamos impactados con la noticia de que El último de la fila decidía volver a publicar un disco 25 años después de disolverse como grupo. En todos estos años, Manolo García y Quimi Portet no habían vuelto a trabajar juntos en un disco de aquel grupo que les unió con tanto éxito… Hasta ahora que llega Desbarajuste piramidal.

Han escogido 24 canciones de su repertorio para volver a grabarlas en el estudio y han incluido, incluso, una de Los Rápidos. Y si hay algo que siguen manteniendo intacto es su modo surrealista de entender la vida y el sentido del humor con el que se enfrentan a ella. No hay más que ver las imágenes que han escogido para explicar todo este proyecto. Ya nos han dado las claves.

La motivación

Cuando todos los que disfrutaron en su día con canciones como Insurrección o Como un burro amarrado a la puerta del baile, no imaginaban que podrían volver a verles juntos. Pero se equivocaban.

“Tampoco teníamos otras alternativas, la disciplina familiar es férrea y cualquier oportunidad para huir de ella y realizar alguna actividad lúdica junto a amigos o incluso conocidos o desconocidos es bienvenido”, explica Portet sobre lo que les ha motivado a reunirse de nuevo.

Manolo, reconoce que también ha influido, “la risa, mi amigo Quimi Portet es la persona con la que más me he reído y me río del planeta Tierra y siempre lo he dicho”. “Es mutuo. Lo pasamos bien y cuando trabajamos nos reímos mucho, aparte de trabajar, nos reímos mucho”, añade su compañero de aventura.

“Buscar complicidades, es algo que, con el tiempo, con los años, vas perdiendo esta búsqueda, esta necesidad de complicidad y te vas quedando acotado a estímulos, a veces, un poco vacuos y una complicidad verdadera y un poco tierna también es un estímulo para continuar en el periplo de la vida”, expresa Manolo.

El repertorio

Han grabado 24 de sus canciones y en cuánto a la selección, reconocen que no hubo debate, escogieron las que más les apetecía grabar en el estudio. “A boleo”, aseguraba Manolo.

La grabación

“Hemos recuperado una forma de trabajar que era la que nos unió como El último de la fila que era estar los dos solos en un estudio y con los pocos recursos que teníamos, conseguir lo máximo. En esta nueva grabación lo hemos vuelto a hacer y hemos recuperado exactamente ese espíritu”, explica Portet.

“El método consiste en que Quimi toca y yo canto y funciona”, simplifica su amigo con ese humor que le caracteriza. “Y a la hora de comer, pues comemos”, añade Quimi.

El título

“Los discos tienen que tener un título”, aseguran, “y Desbarajuste piramidal en el momento que apareció, que era probablemente a la hora del carajillo de alguna comida, es un título excelente”.

“Decrecer, desacelerar, sintetizar… nosotros empezamos toda esta historia de una forma bastante precaria y muy divertida y la continuación de esa etapa bastante precaria es esta que tiene una precariedad con más alicientes, la de la promo de pasar un poco de todo, con todo el respeto, en el nivel que cada uno puede y la alegría de poder hacerlo”, explica Manolo.

“Esto se ha hecho entre visita al urólogo y visita al urólogo y el resultado es este y el urólogo nos ha dicho que vamos muy bien, que podemos continuar”, terminan reconociendo.

Ya queda menos para ese 1 de diciembre cuando lancen ese nuevo material del que sirve como adelanto la nueva versión de Lejos de las leyes de los hombres.