Sam Smith contraataca tras ser declarado no culpable de plagio y exige casi un millón de dólares
Es su compensación por los gastos legales del juicio
En su día lo dijo Ed Sheeran cuando se libró de varias acusaciones por supuesto plagio tanto en Reino Unido como en Estados Unidos y Sam Smith lo ha vuelto a poner de manifiesto. Tras ser declarado no culpable de plagio ha decidido contraatacar y exigir a sus demandantes casi un millón de dólares en concepto de compensación por los gastos legales en los que incurrió en el juicio.
La estrella británica pudo respirar por fin con tranquilidad después de que un juez federal en Estados Unidos rechazara todas las acusaciones que se habían vertido contra su canción Dancing with a stranger. Según sus acusadores, su colaboración con Normani Kordei que tuvo un éxito brutal en 2019 era un presunto plagio.
Dos años después y tras una potente batalla legal en la que ha tenido que defender su inocencia, Sam Smith tiene claro que alguien tiene que pagar por la factura de su bufete de abogados que en todo el proceso le ha supuesto un gasto de casi 750.000 dólares.
"Los reclamos defectuosos por infracción de derechos de autor, como los reclamos del demandante aquí, sobrecargan al tribunal, causan publicidad negativa potencialmente dañina para los artistas que graban... y otros, y les imponen honorarios de abogados innecesarios. Otorgar los honorarios de los abogados aquí disuadirá al demandante y a otros de presentar y procesar ciegamente tales reclamos sin nada parecido a la base fáctica y legal requerida" se podía leer en un comunicado emitido por el abogado de Sam Smith que recoge Billboard.
Todo ello aún potenciado mucho más por el fallo del juez federal Wesley L. Hsu que se mostró muy crítico con los demandantes (los compositores Jordan Vincent, Christopher Miranda y Rosco Banlaoi): "Permitir que los demandantes de derechos de autor prevalezcan... rotando acordes, recalibrando el tempo y alterando el tono de la canción de un acusado para que suene más similar a la de los demandantes llevaría a los tribunales a considerar sustancialmente similares dos composiciones musicales muy diferentes".
Ahora los abogados de Sam Smith como de Normani Kordei tiene claro que alguien tiene que pagar las costas del juicio: "El demandante buscó monopolizar elementos no protegidos que son propiedad común de todos. Afirmaciones como las del demandante amenazan con engañar al dominio público y restringir la creación de nuevas obras".
Teniendo en cuenta las millonarias cifras que dejó Dancing with a stranger y la cantidad que pedían los demandantes (todas las ganancias de la canción) el importe de casi un millón de dólares de la factura legal es mínimo para Sam Smith pero desde luego no está dispuesto a que se vayan 'de rositas' después de acusarle de plagio.
Juan Ignacio Herrero
Redactor de LOS40 desde 2005