Entrevista a Vico C: "El cantante nuevo que quiere una oportunidad va a grabar lo que el inversionista le diga"

Cualquiera que piense en historia del rap y hip hop piensa inmediatamente en Vico C. El artista puertorriqueño es uno de los pioneros del género en su país. Sus letras reflexivas y cargadas de mensajes han inspirado a generaciones desde mediados de los 90, que lo han convertido en una leyenda de la escena a nivel internacional. Esto se ha visto en discos como Hispanic Soul y temas como Lo Grande Que Es Perdonar y 5 De Septiembre.

La pasión del artista por la música no tiene límites, y eso es algo que lleva demostrando durante décadas. De hecho, no ha dejado de crear y actualmente ha lanzado su disco Pánico, que cuenta historias diferentes al resto de sus proyectos. Aprovechando su visita a Sevilla para los Latin Grammys 2023, hablamos con él sobre esto, la escena actual del género, la importancia de la esencia de un artista y lo próximo que trae, entre otras cosas:

Pregunta (P): Vico, estás en España. ¿Cómo se siente al estar aquí?

Respuesta (R): Bastante familiar. He venido un par de veces pero no me había quedado tanto, así que es un poco especial cada visita. Especialmente cuando es para una nominación para un Grammy, yo creo que es más especial.

P: Eres una auténtica leyenda. Iniciaste en Puerto Rico el movimiento del hip hop. ¿Cómo fue aquello?

R: Las luchas eran distintas para uno hacer lo que quería hacer. Uno lo que tenía que hacer era ser aceptado por lo que era la industria musical, que nos vieran primero como artistas, con una proposición y que a nivel comercial eventualmente lo menos que veían era que la música urbana iba a pasar todos los números en ventas, pero eso se dio luego. Al principio había que ponerlo en el mapa, por eso digo lo de que las luchas eran distintas y cada logro se disfrutaba más porque realmente era un logro. Cuando el hip hop se metió en Bellas Artes, eso fue un logro. Cuando lo llevamos al Coliseo Roberto Clemente, que era el principal en Puerto Rico en ese tiempo, fue otro logro. Fueron logros tras logros y por eso que tiene su distinción.

P: Antes la música urbana no estaba bien vista. Empezar un movimiento tuvo que ser muy complicado. ¿Cómo crees que hubiese sido tu carrera si en vez de entonces, hubieses empezado ahora? Las redes sociales tienen un papel fundamental.

R: Ahora mismo tiene sus altas y tiene sus bajas. Yo más bien diría si hubiesen existido las redes en ese tiempo, qué diferencias hubiese habido. Realmente, la diferencia no creo que esté en los mecanismos dentro de la industria. La diferencia está en la gente, la sociedad como tal. Por ejemplo, tú has dicho que no era bien vista, pero ahora el contenido mayormente dentro de lo urbano sí debe ser uno donde haya ciertas restricciones y ciertas preocupaciones que no hay. Entonces, cuando había menos de ese contenido, había más preocupación. Entonces, eso demuestra que el problema no estaba en el contenido sino en la idiosincrasia que se presentaba dentro de la industria. El miedo a que nos está invadiendo una clase social que desconocemos y que no queremos conocer y que no queremos ser parte de ella, porque no somos parte de ella. Entonces era la lucha inicial. Cuando yo empecé a hacer discos, mis canciones ya eran letras que aportaban. Así que Vico C y otros que empezaron con letras con buenas propuestas a finales de los 80, igual, el contenido era bueno para la juventud. No tiene que ver con el contenido esa puerta cerrada. El miedo era eso, la idiosincrasia.

Cuando yo empecé a hacer discos, mis canciones ya eran letras que aportaban.

—  Vico C

P: El otro día hablaba con J Noa, que es una rapera dominicana de 18 años, que decía que el rap no está en su mejor momento porque muchos raperos solo están en búsqueda de dinero. ¿También lo ves así?

R: Eso es muy obvio, no es algo que alguien tiene analizar y que alguien tenga que tener una opinión tan diferente a la verdad misma que vemos. Los medios de comunicación son los que más te dicen de esa actitud. El cantante nuevo que quiere una oportunidad, va a grabar lo que el inversionista le diga. Y el inversionista va a traer los productos que la radio le pida. Lo que se forma es un círculo en el que no se sabe quién es el más talentoso y quién no. No necesariamente todo el mundo está dando su 100%.

P: Además, esto se ve en cualquier género musical, ¿no?

R: Esa es la historia de la música popular. Lo mismo pasó con la salsa, lo mismo pasó con el merengue, lo mismo pasó con todos los géneros que se han hecho populares. Que dejen dinero ya ahí están preparados los que hacen su trabajo, que es la gente de industria que no necesariamente tienen que saber de música, sino de marketing. Entonces, al meter el ingrediente de marketing, empiezan a transformar la música como tal, lo que suena, no la esencia que realmente la gente quiere sino lo que ellos entienden que puede ser más viable para la venta. Ha pasado con todos los géneros. Por eso la salsa que era un género tan urbano y tan fuerte y tan distorsionada y tan calle, con esa tierra que satisfacía, la empezaron a limpiar demasiado. Entonces empezaron a enfatizar sobre figuras y no sobre la música como tal. Y eso lo vemos todos siempre. Lo vemos en todos los géneros. Lo vemos en la industria.

P: Precisamente por lo que dices de esta importancia del marketing, en el caso del rap, ¿crees que se ha perdido la esencia?

R: Es que la esencia es invisible. No es algo que tú puedas destruir. La esencia o la das o no, pero está. En muchos de esos cantantes que cantan cancioncitas nada más que para vender, tienen esencia pero no la están usando. No es una cuestión de que esté o no. Porque cuando tú traes el hip hop o el reggaeton con esencia, es algo que ya está ahí. Esencia es algo que tú no puedes destruir. Simplemente tú la aplicas o no.

P: Hablando de las nuevas generaciones. ¿Quiénes crees que están transformando el género ahora mismo?

R: En todo el género han existido artistas que lo pueden transformar, en todas las épocas. Siempre han existido artistas con suficiente en sí mismos para aportar mucho para el género. Pero la diferencia la establecen los que mandan en la industria y no necesariamente los artistas. Cuando hablamos de la industria, no es el artista el que toma la decisión. Por lo tanto, volvemos a lo mismo, no está tanto en el artista. Está si el artista es atrevido, pero si hablamos de jóvenes que no saben del negocio, que tienen sed, que tienen un sueño y que lo quieren cumplir ya y que ven dinero enfrente, obviamente ahí la parte de peso va a ser la de la industria. Lo que le diga al artista, y no lo que el artista le diga a la industria. Y en medio de eso está el público, que es el que consume lo que le dan. Entonces somos pocos los que buscamos música específica. Por ejemplo, yo soy de los que les gusta escuchar música específica si voy a escuchar música, no de que me meto en la radio para ver lo nuevo que hay. De eso oigo para estar al día, pero cuando hablamos de música personal para mí, yo tengo que buscarla. No puedo depender de lo que están haciendo ahora porque no la están haciendo mayormente.

No se trata de que no me importe la venta, es que me importa la música.

—  Vico C

P: ¿Qué consejo les darías a las nuevas generaciones?

R: Que observen, que sean observadores de todo, de lo implica en su carrera, en su vida y cómo afectan las cosas de la carrera en su vida. Que estén pendiente a eso y uno con más madurez ve las cosas venir y tienes prioridades más valiosas a medida que uno va cumpliendo más años.

P: Hay artistas que dicen que no escuchan la radio, que no quieren ni saber cuántas reproducciones tienen sus canciones ni las modas de la industria.

R: Yo no puedo ser hipócrita y decirte que a mí no me interesa vender porque yo vivo de esto. Es si me atrevo o no a proponer, por eso te digo la palabra “atrevidos”. Una cosa que no necesariamente es lo que seguramente va a vender y tenerle esperanza de que venda. No se trata de que no me importe la venta, es que me importa la música.

Yo no puedo ser hipócrita y decirte que a mí no me interesa vender porque yo vivo de esto.

—  Vico C

P: Llevas desde 1985 compartiendo tu talento con todos. ¿Cuál es la clave de estar siempre ahí, en la industria?

R: Yo no creo que haya clave porque cuando te inventas una fórmula, hay mil cosas que pueden pasar para que esa fórmula no funcione. Hay muchas cosas inesperadas en este negocio. Son diferentes elementos que ayudan a que uno transcienda. Hay unos elementos que aportan más que otros pero sí son diferentes. No hay una fórmula. Los elementos son el trabajo, no ser perezoso, mantener relaciones dentro del negocio... Porque es un negocio, y cuando hablamos del negocio no podemos limitarnos a qué es lo que se puede hacer en la música para arreglar esto y lo otro. No, es qué se puede hacer en la industria.

P: Llegas con tu nuevo álbum Pánico. ¿En qué se diferencia este del resto?

R: La diferencia entre lo que yo estoy buscando cada vez que hago un producto nuevo es lo mismo, es que me escuchen y ofrecer algo que salga de mí realmente y que resulta diferente. La diferencia entre alguien como yo que lo quiere hacer así a alguien que quiere vender... Cada disco mío lo impredecible está en qué voy a decir, en cuál va a ser el tema. Lo que buscan en los otros no es tanto cuál va a ser el tema sino qué me va a hacer bailar o esto me va a gustar, cuánto me lo voy a vacilar o cuán popular se va a hacer tema. Ahí está la diferencia también. Yo no voy a hacer algo diferente, lo que va a ser diferente es que el contenido, como estoy más maduro, he vivido más y he aprendido más, por ahí vienen más temas, pero la actitud es la misma. Igual que el que quiere vender, la actitud es la misma. Pero el que quiere vender, te va a grabar lo que sea. Si hoy está de moda hacer el diablo, eres un diablo. Y si mañana está de moda ser un ángel, eres un ángel. Es irónico. A pesar de que siguen haciendo lo mismo, hay una variedad dentro de eso. Lo mismo es hacer lo que sea que venda, y hay variedad, pero la actitud es la misma. Conmigo es lo mismo pero en el otro extremo. Voy variando pero las razones no es porque esté de moda, sino porque varío mis temas. La música la hago moderna. Tampoco es que voy a hacer algo 100% diferente que ni entienda. Uno va creciendo, evolucionando, no buscando qué es lo que vende en el momento. Uno trabajo según uno ha evolucionado, más que ver cuál es el tema del momento.

P: Si no fueses Vico C y te lo encontrases por la calle, ¿qué pensarías de él?

R: Si la persona comparte conmigo un rato, depende de la musa en la que yo esté es lo que va a pensar de mí. Porque de repente tú puedes ser un ángel y nadie te ha visto nunca haciendo lo que tú eres, que eres un ángel. Cuando te conocen, te conocen exactamente en el minuto peor de tu vida donde tú estás enojado con alguien, y esa persona eso fue lo que vio. Como ángel no te va a describir aunque lo seas, y viceversa. Al ángel no se le hace tan fácil ser un diablo porque no es algo que le nace pero el diablo se le hace fácil lucir como ángel porque es una buena estrategia. El diablo normalmente se conoce menos que el bueno, porque el bueno es más sincero, no tiene nada que esconder. El malo sí, tiene planes, estrategias, manipuleos dentro... el malo es más oportunista que el bueno. Digo malo y bueno por ponerles un sello. En las entrevistas lo he dicho, hay gente que seguro que tiene una idea de lo que soy yo muy lejos de la realidad porque me conocieron en un momento que el cálculo que les dio después del minuto que me conocieron fue en el modo diablo. Pero si me conocen más en otro momento me valorarían más como persona y como cualquier cosa otra que sepan de mí, de la música, de la industria... Confío en eso.

Esa idea imaginaria que se crea un artista no la creó el artista, la creó la gente. Y el artista responde a la imaginación de la gente. Y hay veces que respondemos tanto que tenemos etapas en las que nos la creemos. No necesariamente que lo queremos lucir, sino que creemos que lo somos. Eso es automático cuando la sociedad entera te dice que tú no fallas. Eso lo crea la gente, esa imaginación. Yo puedo tener 20 canciones número 1, y si la gente no me saluda, no se emociona cuando me ve, no me felicitan, no me tratan como algo especial, a pesar de saber que estoy pegado con 20 canciones, no necesariamente mi persona se tiene que empezar a adaptar a algo diferente en mi vida cotidiana porque la sociedad la siento igual. Pero cuando la sociedad empieza a decirme qué lindo, qué brillante, qué genio, el pionero, la leyenda... eso es lo que empieza a moldear la mentalidad de la figura. Es la gente.

P: ¿Qué se viene ahora?

R: Como te dije, en la misma actitud, no tengo una decisión exacta de nombre de disco. Voy como siempre, haciendo tema por tema, lo que me viene al momento, muchas cosas que urgen y otras que no. Fuera de eso, ya lo otro es impredecible porque yo voy trabajando al momento. No es una fórmula. Esto es una cosa de que la vida cotidiana es el tiempo mío para escribir. Lo podría hacer en cualquier momento, en el avión, en la casa...