Depeche Mode: Dave Gahan, un vampiro que dormía en un ataúd y mordía en el cuello
“Lo siguiente que sé es que ¡me mordió en el cuello!, recuerda un periodista británico
David Bowie creía que la piscina de su casa de Los Ángeles estaba encantada y poseída por el diablo. Slash (Guns N'Roses) corrió desnudo, huyendo de un alienígena que intentaba matarle. El vocalista de Depeche Mode creía que era un vampiro y dormía en una cama con forma de ataúd. Tenían algo el común: realmente creían lo que lo solo estaba en su cabeza. Era el peaje por los excesos.
“Definitivamente, podría haber sido un vampiro, dentro de mi propia cabeza”, confesó Dave Gahan en una entrevista con Uncut de 2001. “Incluso la cama en la que dormía en Los Ángeles, tenía forma de ataúd - ¡una enorme cama doble moldeada como un féretro! - . En ese tiempo, toda mi vida era una parodia”. Ese tiempo al que se refiere el vocalista de Depeche Mode, era el de la famosa gira ‘Devotional Tour’ de 1993. La de los excesos…. "la más degenerada de todas las giras realizadas jamás".
En 1994, la gira de presentación de ‘Songs of faith and devotion’ se extendió a países en los que el grupo nunca había estado. El llamado Exotic Tour/ Summer Tour llegó, por ejemplo, a Sudamérica. Por entonces, el teclista Andrew Fletcher (recientemente fallecido), ya había abandonado la gira por "inestabilidad mental". Y Gahan continuaba con sus adicciones y su creencia de que era una versión del Conde Drácula. Por eso, su morboso lecho no permaneció en Los Ángeles. Se lo llevó de tour. Según publica BBC, "como si de una broma macabra se tratara, un auténtico ataúd fue transportado por Dave en su tour por Sudamérica, y se echaba una cabezadita antes de los conciertos". Al parecer, lo utilizaba como una especie de ‘espacio meditativo pre-shows’. Su objetivo era llegar con el estado de ánimo adecuado a las actuaciones.
Durante esa parte de la gira, ocurrió un incidente escalofriante. Lo vivió en sus propias carnes Andrew Perry, periodista de la revista británica ‘Select’ que estaba cubriendo el tour – con Primal Scream como teloneros. El 16 de Junio de 1994, el grupo tocaba en el Anfiteatro Jones Beach de Wantagh (Nueva York). Estaban en el vestuario: “… Dave Gahan sentado en medio de la habitación, en una butaca, aparentemente, metiéndose cocaína por la nariz a un ritmo alarmante”, recordaba en la revista 'Q'.
Y seguía rememorando: “De repente, pareció darse cuenta de que yo era un periodista, me apuntó, y uno de sus grandes lacayos vino y me agarró. Tuve que arrodillarme al lado de la butaca para poder hablar con él. Empezó a balbucear sobre cómo la gente no le entendía, pero cambió de repente y dijo '¡Te voy a maldecir!'. Lo siguiente que sé es que ¡me mordió en el cuello!. Ahora él estaba gritando y todo el mundo le miraba hasta que salió furioso de la habitación, todavía gritando que me iba a echar una maldición. Asumí que estaba completamente fuera sí, pero después, sobre el escenario, era totalmente profesional".
¿Recordaba Dave Gahan el incidente del mordisco?. Se lo preguntaron en ‘Uncut’: "Recuerdo que lo leí después, pero la verdad es que no recuerdo haberlo hecho", se ríe. "Creo que tenía alguna extraña fascinación durante esa época con los vampiros. Hablando en serio, estaba empezando a moverme dentro de este sitio en el que realmente creía lo que lo solo estaba en mi cabeza. Definitivamente, podría haber sido un vampiro, en mi propia cabeza".
Al vocalista de la banda inglesa le apodaron ‘El Gato’. Gradualmente había ido acabando con cada una de sus siete vidas. Ya siendo adolescente empezó a consumir drogas: barbitúricos que le robaba a su madre y anfetaminas. Su padre había desaparecido de su vida para siempre y según confesaba en ‘Irish Independent’: “Yo pensaba, ‘que le jodan a todos’ y empecé a meterme en problemas, robando coches y siendo un ladrón”. Asegura: “Unirme a Depeche Mode me salvó la vida”.
Tenía 18 años cuando, en 1980, se unió a Martin Gore, Andy Fletcher y Vince Clarke (que se marchó poco después). Y en esa fase de su vida, ya consumía heroína. Solo una década después, Depeche Mode eran estrellas internacionales y habían vendido millones de discos. Pero los excesos eran su prioridad en esos días salvajes de los 90s y principios de 00s. En 1993 su adicción le provocó un ataque cardiaco y un intento de suicidio. En 1995, en un hotel de 5 estrellas en Hollywood, tomó Valium y una botella de vino y se cortó las muñecas. Telefoneó a su madre en Essex… “Definitivamente fue un intento de suicidio, pero también una llamada de auxilio. Me aseguré de hubiera gente que me podía encontrar”.
Después de esto, se retiró a su apartamento de Santa Mónica, donde vivió con las luces apagadas y las cortinas selladas con cinta adhesiva. Dormía en su enorme cama con forma de ataúd. Cada vez que salía, estaba tan paranoico que nunca lo hacía sin una pistola: “Tenía montones de pistolas… pensaba que ellos estaban ahí fuera para atraparme. Sí, era como el final de El Padrino, con helicópteros sobrevolando… era un maniático”, desvelaba en ‘Irish Independent’.
En mayo de 1996, una nueva sobredosis, pero esta vez escuchó a los médicos que le dijeron la impactante verdad: “David, has muerto. Has estado en paro cardiaco durante dos minutos. Estuviste muerto”. Dos meses después, entró en un programa ambulatorio que incluía asesoramiento o análisis de orina. Desde entonces, Gahan está limpio. Las drogas le llevaron al borde del abismo, remontó, y hoy recuerda con humor sus obsesiones vampíricas.
Alicia Sánchez
Periodista en busca de historias chulas del pop