Sara Carbonero aumenta la preocupación por su estado de salud tras su última publicación: "Justo en este momento..."

En las últimas horas, el estado de salud de Sara Carbonero ha preocupado mucho a sus seguidores y a todo su entorno. La periodista ha compartido en redes un significativo mensaje que ha dado mucho de qué pensar, principalmente porque todo indica a que de nuevo se encuentra en el hospital.

A punto de cumplirse cinco años desde que le diagnosticaron un tumor maligno de ovario del que se recuperó completamente, Carbonero ha vuelto a activar las alarmas: "Me produce una extraña alegría que en la habitación 678, justo en este momento, alguien lee exactamente el mismo libro que yo, probablemente en el mismo sofá de polipiel, con la misma incertidumbre", empezaba escribiendo.

La periodista ha confesado que tiene sentimientos encontrados al estar de nuevo en ese lugar ya que, como reconoce, "todos sabemos la necesidad de cariño y afecto en estos días interminables", pues es cierto que cuando uno está en el hospital, "entre estas paredes se valora mucho más cualquier gesto, cualquier detalle, cualquier soplo de aire fresco. Cualquier buena noticia", aseguraba, dejando entrever que continúa en la Clínica de Navarra donde ya ha estado varias veces.

"En la sala de al lado, han puesto unos juegos y unos libros para que la gente pueda matar el tiempo ahí. Ayer por la tarde me acerqué un rato y vi a un señor que no podía caminar, ni hablar, jugando al dominó con su nieto. Creo que este último se dejó ganar porque bromeaban sobre el asunto. También un aparato de música que funciona con CDs. Todos son de música clásica, elijo uno de Haydn porque me recuerda a los viajes en coche de pequeña. Y acabo pinchando para toda la planta", revelaba.

Sin más noticias de Sara Carbonero

En este mensaje, Sara Carbonero no ha revelado si es por ella o si está acompañando a algún familiar en esta visita al hospital, pero si ha recordado que es en estas salas donde "los ramos de flores inundan las habitaciones y traer la primavera a cada rincón gris". "A través de la ventana observo que la gente en la calle está de manga corta y yo duermo con dos mantas. Lo de dormir, es un decir", afirma.

Un texto lleno de emociones que concluye con una reflexión: "Con la noche bien entrada, abro a la vez el sofá cama y el libro que me tiene absorta y leo uno de los proverbios, que dice: Allá va la lengua donde duele la muela. No lo pillo porque me estoy quedando dormida, pero rápido capto el mensaje. Cierro los ojos pensando en que estoy cerca del mar con una Super Bock Por último, abro IG, llego a una ilustración de Mafalda y la leo en voz alta. ¿Pensaron alguna vez que si no fuera por todos nadie sería nada? Buenas noches. "