Alejo Stivel, sobre la escena urbana de artistas como Duki, Emilia o Bizarrap: “La valoro con mucha precaución porque a mí me espanta”
Un referente de la escena rock, no ve con buenos ojos la escena urbana y explica por qué
Alejo Stivel acaba de lanzar su biografía, Yo debería estar muerto, y el título, ya de entrada nos deja claro que el relato de su vida da para mucho. Y es que pocos pueden afirmar que han vivido con tanta intensidad como lo ha hecho él para lo bueno y lo malo.
No tuvo una infancia muy típica. Con tan solo 8 años ya iba al psicoanalista y se relacionaba con muchos adultos, la mayoría del círculo cercano de su madre y padrastro, actriz y escritor comprometido políticamente, que convirtieron su casa en una especie de centro cultural porque el que desfilaron multitud de figuras relevantes argentinas con las que Alejo tuvo contacto.
Cuando llegó la dictadura y asesinaron a su padrastro, él y su madre se exiliaron y llegaron a España. Aquí empezó una nueva vida junto a uno de sus amigos que también había huido, Ariel Rot. Ambos se habían sumergido en el rock argentino y fliparon con la escena musical que se encontraron en España que estaba muy alejada de la que habían vivido en su país.
Decidieron formar una banda, Tequila, y llenaron un hueco vacío en nuestra escena que les catapultó a la fama de manera inmediata. Y eso que lejos de dejarse llevar por las tendencias apostaron por lo suyo, el rock en español. Un género que siguen defendiendo cada uno por su camino.
Valorando la escena urbana
Pero la potente escena de rock en Argentina le ha cedido la popularidad a la escena urbana. Multitud de artistas de este nuevo movimiento conquistan el mundo. Artistas como Bizarrap, Duki, Emilia, Nicki Nicole, María Becerra, Tini, Tiago PZK o Milo J solo algunos ejemplos.
“La valoro con mucha precaución porque a mí me espanta”, aseguraba Alejo sobre esta escena, “el reguetón, el trap y estas cosas no es algo que a mí me apasione por decirlo de una manera elegante, como tampoco me gustan otros estilos musicales, no es lo único que no me gusta”.
Como en todos los géneros, hay cosas buenas y otras no tanto. “Creo que algunos de ellos tienen un poco más de talento. Creo que hay gente que igual hace unas rimas mejores”.
Pero Alejo lo tiene claro, asegura que a él le gusta “la melodía y me gustan las canciones y por eso me gusta Charly García y me gusta Spinetta de Argentina. Del mundo me gustan los Beatles, Paul McCartney, Paul Simon, Steve Wonder, James Taylor. Valoro mucho la melodía y creo que lo que se hace ahora es hablar, que bien para recitales de poesía, pero hablan sobre un ritmo. A mí no me emociona mucho hablar”.
No es un género que rechace del todo: “Del rap hay cosas que me gustan, americanos sobre todo que hacen rimas con mucho ritmo en la voz, que tienen un ritmo que casi no te das cuenta de que están hablando y por eso digo precaución porque es algo masivo, Duki ha llenado el Bernabéu, algo que Charly García no pudo soñar siquiera”.
“Bienvenido sea si aporta algo a que todos estos argentinos viajen por el mundo y les vaya bien, yo me alegro por ellos. Pero yo no lo concibo”, sentencia. Él sigue apostando por la escena del rock que “caló de una manera muy fuerte. Quitando Estados Unidos y Reino Unido, es el país donde hay más rock, sin duda, de los países no angloparlantes. Todavía llena estadios”.
Dos formas de leer la escena musical de Argentina.
Cristina Zavala
Periodista enamorada de todo el entretenimiento....