Juan Berrueta, editor de ‘Cuarto Milenio’. desvela lo que hay detrás del programa: “Yo me sentía un poco como Harry Potter llegando a Hogwarts”
Nos descubre, además, cómo es Iker Jiménez como jefe
Paranormal, yo. Así se llama el libro que ha escrito Juan Berrueta que seguro que muchos de vosotros no sabéis quién es, pero es buen momento para saberlo. Se trata de uno de los editores de Cuarto Milenio que ha querido contar sus aventuras y desventuras en este programa tan particular. Porque una cosa es lo que vemos en pantalla y otro lo que ocurre detrás. Y sí, si te lo estás preguntando, ha contado con el visto bueno de Iker Jiménez que siempre apoya a su equipo.
Se considera escéptico ante las cuestiones paranormales después de quince años trabajando con el programa, aunque confiesa que tuvo un sueño con Paloma Navarrete, tras su muerte, que no puede explicar.
Berrueta no solo ha trabajado con él, también ha pasado por otros programas como Gran Hermano, Fama, a bailar! o Granjero busca esposa. Ha editado algún videoclip y tiene una larga trayectoria en televisión con muchas cosas que contar.
Así que, nosotros que somos muy curiosos y nos gusta meternos en todos los recovecos para encontrar diferentes puntos de vista, hemos hablado con él de su libro y su trayectoria para descubrir que tiene un gran sentido del humor y disfruta del misterio a su manera.
Adviertes desde el principio que es un libro ombliguista, o sea, que los haters de Cuarto Milenio no lo van a disfrutar.
Jajajaja, puede que lo disfruten, los haters incluidos. No es una guía de Cuarto Milenio, es una experiencia personal de lo que significa trabajar en un programa que es tan mágico y tan especial.
Iker Jiménez dice en el prólogo que se ve reflejado. De no ser así, ¿habrías hecho cambios?
Bueno, yo necesitaba su permiso para publicarlo porque habla de él y de su programa. ¿Cambios? No sé, a mí me gusta pensar que no. No sé lo que habría hecho, lo que te puedo asegurar es que no me pidió ningún cambio y se respetó de principio a fin. En ese aspecto estoy muy contento y muy agradecido.
Entonces no le sentó mal que dijeses que a veces tiene mala leche cuando se enfada, ¿no?
No, jajaja, de hecho, hasta lo agradeció porque es muy sincero. Imagino que hay gente, no digo Iker, perfiles públicos que recibirán constantes alabanzas y en este caso, parte del entusiasmo de Iker es la sinceridad. Tampoco digo nada malo, se describe a la persona tal cual es y yo creo que eso le ha gustado.
Cuando las redes arden como el día de Eurovisión en el que el mundo se echó encima de Iker por sus comentarios sobre el ganador, ¿se nota luego en el trabajo en la oficina?
No te creas. La mayoría de las polémicas tienen que ver con sus redes personales o como mucho con el programa de Horizonte que igual es más polémico porque está pegado a la actualidad. Pero en Cuarto Milenio nos mantenemos en una línea muy blanca y estas polémicas no nos afectan. Además, las entendemos como intrínsecas cuando tienes un programa de éxito durante tantos años donde hay seguidores y detractores que cualquier cosa que digas se comenta, es parte de la rutina.
Aunque claro, de oficina, ya poco. Que os habéis apuntado al teletrabajo… cada vez más alejado del misterio.
No, no, estoy igual de cerca o más. De hecho, al salir de la oficina me he acercado a un caso aquí al lado de casa. El teletrabajo en Cuarto Milenio está perfectamente implementado y trabajamos con la misma normalidad con la que trabajábamos todos juntos en el centro de Madrid, incluso con más libertad.
Mencionas la pasión reverencial por la tele de la gente y cómo te conviertes en el centro de las conversaciones cuando dices dónde trabajas. ¿Cuál es la pregunta más rara que te han hecho?
La más rara no te sé decir, pero creo que hay una serie de preguntas muy repetitivas. Todo el mundo me pregunta si todo es verdad, si en la tele se miente o no se miente, si los sensitivos tienen o no información previa. Son curiosidades muy normales porque todo escapa a la comprensión y a la lógica y la gente tiene preguntas. Pero lo que más me sorprende de lo que me cuenta la gente cuando hablo con ellos son sus propias experiencias. Cuando les digo que trabajo en Cuarto Milenio la gente, de repente, encuentra como una persona amiga a la que puede contar que a ellos también les ha pasado algo extraño y quieren comentarlo y me hablan de los fantasmas que han visto, experiencias que no entienden y eso es lo más llamativo porque no te lo esperas nunca.
Debe ser que los atraes porque en mi entorno no tengo gente que haya vivido este tipo de experiencias.
Eso te crees tú, pero si sacas el tema en la próxima cena de amigos más de uno te va a contar alguna historia, pongo la mano en el fuego. Que le pasó algo extraño, o que a su madre le pasó algo extraño, te lo aseguro. Y yo invito a todos los lectores a hacer la prueba porque antes o después alguien salta donde menos te lo esperas.
Yo me sentía un poco como Harry Potter llegando a Hogwarts, donde todo el mundo sabe todo de la magia menos tú.
Háblame del primer día que flipaste de verdad trabajando en este programa.
El primer día que flipé fue directamente el primer día de trabajo. A mí lo de Belchite me dejó totalmente alucinado porque yo venía de hacer televisión, diversos tipos de programas y todo es un poco exagerado, es la búsqueda constante del espectáculo y cuando me dicen que en una grabación se ha colado una voz de ultratumba, por resumirlo mucho, no me lo creo. Pienso que si sale eso es porque el editor se ha hecho cargo. Pero el editor soy yo y lo que me encuentro es que no solo no lo ha hecho nadie, sino que es una grabación en un sitio desolador en el que no hay nada se escucha una voz imposible. Ese día fue muy llamativo porque todo era verdad. Yo me sentía un poco como Harry Potter llegando a Hogwarts, donde todo el mundo sabe todo de la magia menos tú. Y me gustaría que el libro sirviese un poco para que el lector se sintiera también un poco así.
Te declaras escéptico y eso dice mucho después de tantos años en el programa. Si tú no crees, qué difícil lo tenemos el resto, ¿no?
Bueno no, habrá gente que sea más proclive a creer, cada uno tiene su propia forma de pensar. El ser humano no tiene las respuestas a todas las preguntas y las respuestas que a ti te dejan satisfecho son las que te convierten en un creyente o en un escéptico. Habrá gente que con mucho menos abrace el misterio con entusiasmo y gente que viendo un fantasma en persona siga negándolo.
Si tuvieras el poder de conocer la explicación de un suceso que, a priori, es inexplicable, ¿cuál escogerías?
Hay unos cuantos. Por supuesto, de las actuaciones de los sensitivos que es una cuestión de rutina que hacen día a día y yo no entiendo lo que hacen y necesito saberlo. Si hablamos de casos nacionales, el famoso ovni de Manises que hemos tratado muchas veces. El piloto Fernando Cámara que ha venido mucho al programa, que salió con su caza y vio un ovni y observó una luz que escapó más rápido que su caza. Vale, no era un ovni, pero, ¿qué era? Necesito saberlo.
¿Uno se acostumbra a estar rodeado constantemente de tanta pregunta sin respuesta?
Dicen que en el final se ve el camino, asumir que no tengo la respuesta para todo. Al principio sí sufría más buscando las respuestas y viendo cómo era posible que estuviésemos contando lo que estábamos contando, con testigos afirmando cosas que pueden parecer disparatadas o que no tienen mucho sentido, pero, sin embargo, me siento mucho más cómodo asumiendo que no voy a saber las respuestas. No tengo, por ello, que desconfiar de lo que contamos, simplemente me resigno a aceptar que hay muchas cosas que nunca voy a saber. Me gustaría pensar que existe una respuesta que a mí me deje satisfecho como escéptico, que pueda llegar una persona que me explique las cosas para que yo las entienda las cosas más imposibles, pero creo que no va a suceder, así que tengo que vivir con eso y estoy conforme.
Aunque pongan ante mí una prueba incontestable de lo paranormal no pensaría que es cierto, sino que he perdido la cabeza.
Aun así, has tenido apariciones en sueños.
Sí, hay una cosa extraña que me sucedió que tiene que ver con un episodio onírico. Ahí me he pasado un poco al otro lado. Estoy contando una cosa un poco inverosímil y necesito que la gente se la crea, aunque si no se la quieren creer que tampoco se la crean, tampoco me importa demasiado, pero la cuestión es que no tengo forma de demostrar lo que sucedió más allá de mi propia palabra, que es algo que pasa mucho en el programa. Pero en este caso, como protagonizo yo el asunto, yo no dudo que tuve un sueño absolutamente premonitorio y fui descubriendo su significado después de haberlo soñado. Y un sueño muy extraño en tanto en cuanto que lo recordé perfectamente, algo que nunca me sucede, y con una narrativa muy elaborada. Luego comprobé que tenía una serie de casualidades que se iban cumpliendo y que no voy a revelar porque están en el libro y me encantaría que la gente las descubriese, pero tenía que ver con Paloma Navarrete que es una médium que trabajó mucho con nosotros y que falleció hace un tiempo. Ahí no dudo de los testigos porque el testigo soy yo. Aun así sigo siendo escéptico porque no soy capaz de cambiar por muchas cosas que me pase. Aunque pongan ante mí una prueba incontestable de lo paranormal no pensaría que es cierto, sino que he perdido la cabeza. Yo necesito muchas pruebas para cambiar de opinión o, simplemente, es imposible.
Usas las bandas sonoras para hacer guiños en tus ediciones, ¿cuál es la que más has disfrutado colocar en uno de tus vídeos?
Disfruto mucho cada vez que puedo esconder un guiño musical. He escuchado muchas bandas sonoras de pelis de la infancia de los 80 tipo Willow, o La guerra de las galaxias. Me gusta colar Indiana Jones y la última cruzada cuando hablamos de nazis y ese tipo de cosas. Hay una que nunca he usado y creo que quedaría demasiado humorístico y no es el tono del programa, pero siempre he querido tener la excusa de poner el tema de Expediente X y nunca me he atrevido porque si me lo ve Iker me lo quita porque parecería una parodia, pero encontraré el día en el que encaje y lo pueda meter y me quede contento.
Cuentas que poníais Alpha de Vangelis cuando terminaba el visionado final de programa, que, en sus inicios, os llevaba hasta la madrugada, ¿por qué esta canción?
No recuerdo exactamente el origen de la costumbre, pero creo que tenía que ver con algo del programa. Intenté buscarlo, pero no encontré la referencia, me hubiese encantado. Los que estábamos a cargo de la entrega del programa que acabábamos muy cansados y sin energía decidíamos poner esa canción y salir triunfantes, por todo lo alta con Alpha sonando a todo trapo. Ahora con el teletrabajo oigo la canción y me recuerda a esos momentos de oficina y me trae mucha nostalgia.
Vangelis - Alpha (Audio)
Tú cuando hablas de rap no piensas en Drake o Kendrick Lamar sino en psicofonías, ¿alguna vez te han asustado?
Rap, además de un estilo de música es el ruido que suena al principio de una psicofonía. Cuando se cuela una voz de otro mundo en una grabación, o eso es lo que dicen los investigadores, suele venir acompañada de un golpe inicial, un chasquido, que los investigadores conocen como rap. Que seguramente sean unos iniciales cuyo significado no conozco. Cada vez que llega una psicofonía y suena un golpe todos se ponen muy contentos y dicen, aquí está el rap que da paso a la psicofonía. Y está claro que en mi vida están más presentes las psicofonías que la música rap.
El otro día con unos amigos y sus hijos les decía, mirad, esta es mi compañera que cobra por buscar fantasmas. Es así. Y dices, qué gente más extraña, pero es gente majísima, encantadora y simpatiquísima.
A partir de la pandemia, la nave del misterio viró hacia un rumbo menos de entretenimiento y más de prestigio que no te acaba de convencer, ¿echas de menos la otra etapa?
No, de hecho, ha habido una serie de cambios últimamente porque efectivamente Iker siempre quiso que le vieran más como periodista que engloba cualquier tema, primero porque el misterio engloba cualquier tema depende de cómo lo mires. La vida misma es un misterio. Él quería hablar de todos los temas y el covid nos lo sirvió en bandeja porque él trabajó mucho y muy bien, informó de mano de muchísimos expertos y ganó muchísimo prestigio y un tiempo se siguió esa senda. Pero gracias al despegue de Horizonte que lleva ya unos cuantos años y está muy consolidado, digamos que se ha separado y la actualidad va a Horizonte y Cuarto Milenio ha vuelto a vivir de los misterios, de lo inexplicable, los fantasmas y yo lo celebro porque me divierte no solo como editor sino como espectador. Me encantan las historietas de miedo y de cosas inexplicables. Ha vuelto. Sí es verdad que durante un tiempo me preguntaba por dónde va a ir el programa que es muy estimulante, y estoy contento con cómo se ha repartido el asunto.
Después de tantos años, ¿con cuál de los colaboradores has logrado crear mejor conexión?
Mejor conexión tengo más bien con los reporteros que salen a buscar misterios, que son compañeros de la productora. Es curioso porque tienen una vida muy extraña. El otro día con unos amigos y sus hijos les decía, mirad, esta es mi compañera que cobra por buscar fantasmas. Es así. Y dices, qué gente más extraña, pero es gente majísima, encantadora y simpatiquísima.
Si alguno te cae mal, ¿le dejas peor en los vídeos?
Jajajaja, es una buena pregunta. Algún invitado que me cae mal, por supuesto, trabajo su material con la mismísima profesionalidad que el de los que te caen mejor. Pero otra cosa es que subconscientemente cuando alguien te cae bien intentas dejarlo lo mejor posible. Tendría que hacer un análisis frío y objetivo de cómo dejo a unos y cómo dejo a otros, pero espero que no se note demasiado quién me cae bien y quién me cae mal. Si alguien se le traba la lengua mucho en Cuarto Milenio, seguramente es que me cae mal porque no he cortado.
Has sido editor de realities, ¿se vive de otra manera detrás de la pantalla?
Sí, no tiene nada que ver cómo se organiza el trabajo. No puedo decir que Cuarto Milenio sea distinto a todos porque no he trabajado en todos los programas, pero por mi experiencia previa en varios programas infantiles y realities shows era más un trabajo de cadena de montaje de televisión. Hay un montón de gente trabajando ocho horas y salías y entraba otro, ocho horas y estaban todo el día las máquinas trabajando como si te imaginases una cadena de montaje de la Ford. En Cuarto Milenio es un trabajo mucho más artesanal en el que cada uno se encarga del montaje de sus reportajes desde un punto de vista muy creativo y muy autoral. Es más familiar y dependemos más de la genialidad creativa de Iker y del resto de compañeros que están todo el rato inventando historias.
Los realities shows, por mi experiencia en Gran Hermano o en Granjero busca esposa o algún otro, es que son verdad.
Estuviste en, Fama a bailar!, ¿no sería la edición de Lola Índigo?
No, jajajaja. En realidad, aunque se ha dicho mucho, en Fama estuve poco tiempo, solo unas cuantas semanas haciendo alguna sustitución. Era la segunda edición creo recordar. Pero no te podría contar muchos cotilleos de ella porque los editores no estamos en los platós, por lo general, trabajamos en cubículos oscuros por los que no desfilan las grandes estrellas. Estamos apartados y trabajamos en la sombra. La mejor edición, a veces, es la que pasa desapercibida.
También trabajaste en Gran Hermano. Supongo que te habrán preguntado mucho cuánto hay de guion en este tipo de programas.
Sí, es la pregunta recurrente y yo siempre digo a todo el mundo lo mismo. Los realities shows, por mi experiencia en Gran Hermano o en Granjero busca esposa o algún otro, es que son verdad. No hay ningún guion, no se les dice lo que tienen que hacer y dejar de hacer. Las reacciones a veces pueden parecer excesivas, pero porque los caracteres que se han elegido son más expresivos. Cuando yo estaba en Gran Hermano nadie me pasaba un guion, al revés, lo que yo tenía que hacer era preguntar qué han hecho hoy, y en función de lo que habían hecho tú contabas tu historia. El trabajo era a destajo y la norma era, que se entienda lo que ha pasado, nada de deja bien a este o deja bien al otro, hay que salvar a nuestro favorito, nada de eso, que se entienda lo que ha pasado y tú haces tu pieza siguiendo esos parámetros, pero con libertad total.
Entonces, ¿no has creado ninguna trama interesante en la casa de Guadalix?
No, no, ya te digo que no se creaban las tramas. Y si alguna vez edité un vídeo donde dejaba mal a alguien es porque posiblemente me caía a mí mal y me gustaba ponerle un gesto de desagrado cuando alguien se equivocaba. O algunos trucos con los que a veces puedes condicionar la opinión del espectador, pero en base a tus criterios personales. Nadie me decía, tienes que crear una trama en la que se vea que uno se ha comido el bocadillo del otro o que se vea que este está enamorado del otro. Lo que pasa que cualquier mínimo atisbo de emoción o un ligero enfadillo de alguien, si lo montas de la forma adecuada, con la música adecuada y la realización adecuada parecerá un grandísimo enfado. A mí siempre me ha gustado pensar en los editores como los titiriteros en la sombra. No soy consumidor de realities, no son mi formato favorito, pero hacerlos es super divertido y me reía muchísimo. Hay un aspecto de observador de la pecera, los ves ahí encerrados, porque realmente están encerrados
Ahora vuelve una edición anónima con Jorge Javier Vázquez, ¿valoración?
Siempre fue un formato muy popular, quizás con algún momento un poco más polémico en la historia reciente, pero no tengo mucha más valoración que hacer. Conozco a muchos de los trabajadores, no me meto en el contenido ni el famoseo, pero los trabajadores son todos unos profesionales y gente estupenda y les deseo mucho éxito.
También has editado videoclips… cuéntame.
Era mi época de aprendizaje. Hice, por ejemplo, el de Medina Azahara con una de Las Grecas, Te estoy amando locamente. Hicieron una versión y me lo pasé muy bien. Era low cost, pero muy ambicioso porque se montaron una historia espacial. Es un poco bizarro.
CARMELA DE LAS GRECAS Y MEDINA AZAHARA -A DUETO TE ESTOY AMANDO LOCAMENTE 2009
Después de 13 años, trabajar en cualquier otro programa te resultará aburrido.
No diría yo eso, seguro que hay un montón de programas muy divertidos. Es verdad que de este no soy solo trabajador si no que soy muy fan y me lo paso muy bien con estos casos extraños que, como digo en el libro, me acompañan aun cuando dejo de trabajar.
Acabas contigo haciendo trabajo de campo, ¿mejor que en una sala editando?
Distinto, creo que en la variedad está el gusto y hablé con un compañero que me consultó porque era un caso que pasaba cerca de donde yo vivo y me pidió que le ayudara a buscar información. Yo creo que no hay nada mejor que editar vídeos, que por eso me dedico a ello, pero era muy divertido. Pero no me arrepiento, me gustó ver a mi compañero en acción porque es muy joven, pero es ya todo un veterano que ha escrito un montón de libros. Imagínate a ti mismo yendo a una casa a preguntar si ven fantasmas, es algo digno de ver.
¿Te han criticado mucho por el final de libro?
No, de momento muy pocas críticas negativas y los que lo han criticado son los damnificados sin leerlo porque desprecian Cuarto Milenio de toda la vida, pero la gente está muy contenta. Lo único de lo que se han quejado es que es un final muy abierto. Lo he hecho así para quedarte atrapada y que llenes los huecos con tu imaginación o porque no pasó nada.
Entonces, para acabar, si tuviéramos que poner un tema central a este libro sería el de Expediente X, ¿no?
Sí, sí, me gustaría. Yo creo que esa sería la más adecuada porque yo crecí con esta serie y en este caso sí encaja en el tono paródico porque, aunque el libro no es una parodia, tiene humor, pero no es una burla en ningún caso, pero me gusta que la gente vea un punto pop en el texto.
Cristina Zavala
Periodista enamorada de todo el entretenimiento....