Taylor Swift en Viena: así era el plan de los terroristas para el concierto

Los swifties europeos viven uno de los momentos más desconcertantes de su vida. Pero gracias a las autoridades austriacas, no están pasando por un episodio peor. La industria musical se paraba en la tarde de este miércoles cuando saltó la noticia de que Taylor Swift suspendía sus tres conciertos en la ciudad de Viena por la amenaza de un atentado terrorista en el recinto.

En las últimas horas, el ministro del Interior de Austria, Gerhard Karner, ha asegurado que se ha logrado impedir una tragedia al cancelar los shows de la cantante estadounidense. Y es que, el principal sospechoso ha confesado que tenía intención de hacerse inmolar frente al estadio Ernst Happel, lugar en el que se iba a celebrar el evento. Sin embargo, el político admite que la situación "es seria", ya que el detenido tenía muy avanzada la fabricación del dispositivo.

Así habría sido el atentado en Viena en el concierto de Taylor Swift

En total, la Policía de Austria ha detenido a tres sospechosos, el cabecilla tiene 19 años y los otros dos cuentan con 17 y 15 años. Tras las primeras informaciones que han llegado a la prensa europea, se estima que los individuos llevaban preparando el atentado desde finales de julio. El objetivo principal era matarse a sí mismos y a "una gran multitud" durante el concierto, según apuntan los medios.

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A medida que pasan las horas, se van conociendo más detalles sobre los sospechosos y hay informaciones de cómo podría haber sido el atentado. El chico de 17 años habría sido contratado para trabajar en la seguridad de The Eras Tour y su intención sería facilitar la entrada del cabecilla al recinto para inmolarse dentro. Los equipos de antiterrorismo detuvieron al joven en las inmediaciones del estadio que detuvieron los planes del atentado terrorista en nombre del ISI, según cuenta el medio austríaco Kurier.

Tras los registros pertinentes, se encontraron diferentes sustancias, entre ellas había peróxido de hidrógeno así como dispositivos técnicos y materiales para la fabricación de bombas, como detonadores, cables y máquinas para iniciar una explosión. Las autoridades también han encontrado una sirena policial que se sospecha que podría haber sido usada en la llegada o en la huida. Además, y según apuntan otros medios europeos, se sospecha que también había intención de atropellar a una gran multitud en las inmediaciones del concierto.

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La situación en Viena

"La situación en torno al atentado terrorista supuestamente planeado en Viena era muy grave", ha declarado el canciller federal de Austria, Karl Nehammer. Asimismo ha querido recordar que no hay que bajar la guardia y que las investigaciones deben continuar.

El cabecilla del grupo es un joven de 19 años que fue detenido en Ternitz, a 65 kilómetros de Viena. El joven había jurado lealtad al Estado Islámico y renunció a su trabajo el pasado 25 de julio declarando que tenía "grandes planes para el futuro", según ha explicado a la prensa el director general de Seguridad Pública, Franz Ruf y recoge 20 Minutos.

"Desde entonces, se ha centrado en los preparativos para un atentado terrorista. Los resultados de la investigación muestran que se utilizó peróxido de hidrógeno para fabricar, efectivamente, explosivos. El sospechoso de diecinueve años ha confesado todo", ha explicado un responsable policial.