Esta noche de Britney Spears en una fiesta de P.Diddy se entiende ahora de otra manera, ¿otra víctima del rapero?

El escándalo de abusos no deja de sacar nombres a la luz y el de Britney no ha faltado

Britney Spears y Puff Daddy, en el cumpleaños de Cassie Ventura, en 2007. / Johnny Nunez/WireImage

2007 fue un año clave en la vida de Britney Spears. Fue el año en el que se separó de Kevin Federline, en el que se puso en juego la custodia de sus hijos. También el año en el que pasó por una clínica de rehabilitación (aunque solo fueron 24 horas) y se rapó la cabeza. Muchos empezaron a cuestionar su salud y a dar por sentado que su comportamiento era producto de su vida desenfrenada.

También fue el año en el que salió un tanto perjudicada de una fiesta de P. Diddy. La tuvieron que sacar en brazos porque no se podía mantener por sí misma.

Entre tanto escándalo que protagonizaba en aquel momento no se le dio tanta importancia a esa noche en la que asistió al cumpleaños de Casandra Ventura, la pareja por aquel entonces del rapero y cuya denuncia el pasado año por violencia y abusos puso en marcha toda la investigación que ahora le ha llevado entre rejas.

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Dos formas de entender aquella noche

En aquel momento, ella explicó que le habían metido algo en la copa y de ahí su estado un tanto desubicado que provocó que necesitara ayuda para moverse. Entonces nadie la creyó, porque no estaba atravesando su mejor momento y, se pasaba el día de fiesta con amigas como Paris Hilton o Lindsay Lohan. Se entendió más como una consecuencia de esa vida desenfrenada.

Pero ahora, aquella escena se analiza de otra manera. Después del gran escándalo que planea la vida de Sean Combs está rescatando viejas imágenes que ahora cobran un significado distinto. Lo vimos con Justin Bieber, y ahora, ocurre lo mismo con Britney.

Se ha hablado mucho en las últimas semanas de las famosas fiestas de Puff Daddy que eran de todo menos inocentes. El rapero, que actualmente está en prisión a espera de juicio, tiene que enfrentar un gran número de demandas que le acusan de abusos sexuales, entre otros delitos.

Todo lo que está saliendo a la luz cambia la historia de muchos momentos pasados que se juzgaron de una manera y ahora empiezan a verse de otra muy distinta.

A partir de ese momento, la vida de Britney Spears fue en declive. Tuvo una horrible actuación en los MTV Awards. Y, aunque ella explicó en sus memorias que fue culpa de comprobar como a su ex, Justin Timberlake, le iban muy bien las cosas, mientras que ella sufría de pánico escénico, lo cierto es que ahora, todo parece cobrar otra dimensión.

Muchos creen que fue otra de las víctimas de Diddy y que esos abusos, siendo apenas una adolescente, provocaron su desequilibrio que le llevó a cometer locuras que nadie entendía en ese momento.

Punto de conexión

Hay un punto de conexión entre el rapero y la princesa del pop. Como relata Daily Mail, Tri Star Sports & Entertainment Group es la empresa de gestión de celebridades que fue criticada por su supuesta participación en la batalla por la tutela de Britney Spears. Ahora se ha descubierto que tiene una conexión con Sean 'Diddy' Combs.

El fundador, presidente y director ejecutivo de la compañía no es otro que el ex gerente comercial de Spears, Lou M. Taylor, a quien acusó de desempeñar un papel clave en la implementación de la tutela en 2008. Taylor también representó a Combs con el que mantuvo una relación desde 1990.

Spears también había criticado al director de servicios de Tri Star, Robin Greenhill, quien fue mencionado en una demanda civil contra Diddy por el productor Rodney 'Lil Rod' Jones antes de saltar por los aires todo el escándalo que le ha metido en la cárcel.

En el expediente judicial, Jones afirmó que le ordenaron reclutar prostitutas y tener relaciones sexuales con ellas para el placer de la estrella, y tiene cientos de horas de vídeo que documentan la "grave actividad ilegal" de Combs.

Un informe de 2021 de The New York Times afirmó que Greenhill tenía el control de las tarjetas de crédito y los medicamentos de Spears y que Tri Star supuestamente había usado el propio dinero de la cantante para contratar un equipo de seguridad para vigilarla durante su tutela.

Tri Star, Taylor y Greenhill han negado las acusaciones y han insistido en que la tutela de Spears fue presentada por "recomendación de un asesor legal, no de Tri Star, y aprobada por el Tribunal durante más de 12 años". Pero ahora, surgen las dudas y los que esperan que todo salga a la luz.

Parece que lo que hemos ido conociendo hasta ahora del rapero, no es más que la punta del iceberg y nos quedan muchas historias por descubrir que nos van a dejar con la boca abierta.

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Cristina Zavala

Periodista enamorada de todo el entretenimiento....