Bruce Springsteen: La portada de ‘Born in the U.S.A.’ no contenía un mensaje secreto
La gorra roja de béisbol colgando del bolsillo había pertenecido al padre de un amigo que acababa de fallecer

Bruce Springsteen durante su gira Born in the U.S.A. Tour / Bob Riha Jr
No. No contenía ningún mensaje secreto. No era su estilo. Mientras ‘Born in the U.S.A.’ se convertía en el álbum más vendido de 1985 y lideraba las listas de nueve países, Bruce Springsteen tuvo que desmentir el rumor que se había propagado. En la fotografía de la icónica portada, tomada por Annie Liebovitz, no estaba vaciando su vejiga sobre América. Simplemente, del montón de fotos hechas durante la sesión, “la imagen de mi trasero era la mejor”.
El 4 de Junio de 1984, Bruce Springsteen publicó su séptimo álbum de estudio. Indiscutiblemente, ‘Born in the U.S.A.’ cambió su carrera para siempre, la disparó a la estratosfera y transformó al artista en una superestrella mundial. Sus siete singles – ‘Dancing in the dark’, ‘Born in the U.S.A.’, ‘I'm on fire’, ‘Cover me’, ‘Glory Days’, ‘I'm goin' down’, ‘My hometown’ - alcanzaron los primeros puestos de las listas internacionales. El disco, el primero publicado en Estados Unidos en formato Compact Disc, superó los 30 millones de copias en el mundo. Uno de los más vendidos de todos los tiempos.
Como colofón, la icónica portada se incluye en las listas de Billboard y de Rolling Stone entre las 100 mejores de la historia.
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La emblemática imagen fue un trabajo de equipo orquestado por la fotógrafa Annie Leibovitz, la directora de arte Andrea Klein y el propio Springsteen. Querían algo que representara el contenido del disco.
Con una gran bandera americana, comprada por Bruce, empezaron las sesiones en las que Annie hizo muchas fotos. Al final, el artista eligió un descarte. Una instantánea que no le gustaba a su autora. Era una improvisación que había desechado. Se convirtió en una de las pocas en las que no aparece la cara de Springsteen. Porque lo que se muestra es su trasero.
En la portada de ‘Born in the U.S.A’ Bruce Springsteen aparece de espaldas. La pierna derecha un poco adelantada. Camiseta blanca, vaqueros desgastados y una gorra roja de béisbol colgando del bolsillo derecho. Frente a él, como telón de fondo, las rayas rojas de la bandera de Estados Unidos. Era lo que él quería. Una imagen “sencilla pero potente”.
Y un homenaje. La entrañable historia de la gorra roja. Había pertenecido al padre, recientemente fallecido, de su amigo Lance Larson. Era la favorita del anciano y se la regaló al artista, quien la inmortalizó encajándola en el bolsillo de sus jeans. A continuación, le dijo a su colega que su padre viviría siempre a través de su álbum.
La bandera no era un homenaje a América. “Bueno, pusimos la bandera en la portada porque la primera canción se llama ‘Born in the U.S.A.’ y la temática principal del disco tiene relación con lo que he estado escribiendo durante los últimos seis o siete años”, revelaba Springsteen en Rolling Stone. El artista escribió el tema impelido por la necesidad de manifestar su enorme decepción. Había entablado amistad con un par de veteranos de Vietnam, e incluso asistió a un centro de antiguos soldados y escuchó sus historias. Le dolía el trato que habían recibido cuando regresaron a casa después de jugarse la vida por su país.
El título, no obstante, lo “tomó prestado” de un guion que recibió del director Paul Schrader pidiéndole que escribiera la música para una película llamada 'Born in de U.S.A.'
El mensaje del Boss no fue bien entendido. Tanto la canción como la portada se malinterpretaron. Aquellos que pensaban que ‘Born in the U.S.A.’ era una carta de amor o una manifestación de patriotismo y admiración hacia la administración de Ronald Reagan, entonces presidente de EEUU, estaban equivocados.
También lo estaban los que indagaron y descifraron que la portada escondía un mensaje secreto. Esos que expandieron el rumor de que, en realidad, Bruce Springsteen se estaba orinando sobre el símbolo de América.
El artista tuvo que desmentirlo en una entrevista publicada en Rolling Stone: “No, no. Eso fue involuntario. Hicimos un montón de tipos diferentes de fotografías y al final, la imagen de mi trasero era la mejor, mejor que la de mi cara, así que esa fue la que elegimos para la portada. Yo no tenía ningún mensaje secreto. Yo no hago eso”.
En su podcast ‘Renegades: Born in the USA’, explicó: “Es una imagen compleja del país. Nuestro protagonista es alguien que ha sido traicionado por su nación y que todavía se siente profundamente conectado con el país en el que ha crecido”.
Por tanto, la portada de ‘Born in the U.S.A.’ ni es una celebración de América ni Springsteen se está orinando en su país.












