Lola Indigo se corona en el Metropolitano de Madrid con un festín de hits y una reivindicación por el colectivo LGTBI
La granadina contó sobre el escenario con artistas invitados de la talla de Tini, Paulo Londra, Belén Aguilera y José del Tomate

Lola Índigo en concierto en el Riyadh Air Metropolitano de Madrid, 14 de junio de 2025. / Aldara Zarraoa
14 de julio de 2025. 30ºC a la sombra. Poco a poco, cae el sol en Madrid. Lola Indigo por fin arranca su gira por estadios en el Riyadh Air Metropolitano de la capital. Parecía que este día no llegaría nunca (y no por lejanía en el tiempo, precisamente), pero aquí está. Ha pasado. La magia de La Bruja, la ilusión de La Niña y la fuerza de El Dragón lo han hecho posible (además del trabajo, el empeño y la cabezonería de una granadina y todo su equipo).
El concierto comenzó apenas pasadas las 21h. Antes, diferentes versiones de la artista se proyectaban, sobre la enorme pantalla de casi 30 metros en forma de prisma triangular, para hacer las veces de DJ y amenizar la espera hasta la hora de salir al escenario. Aquí, por ejemplo, gracias a Tití Me Preguntó y NuevaYol, pudimos descubrir cómo sonará Bad Bunny dentro de un año con su tour Debí Tirar Más Fotos.
Ahora bien, cuando llegó el momento de la verdad, aquel por el que más de 60.000 personas habían aceptado un cambio de recinto, Lola Indigo separó el show en tres actos ―uno por cada era― , y un bloque flamenco en honor a su EP GRX, el cual tuvo como primera estrella invitada a José del Tomate, guitarrista hijo de Tomatito y nieto de El Tomate, con fuertes influencia de Paco de Lucía y Sabicas. Junto a él y a otros músicos pusieron banda sonora a canciones como El condenao, Plastilina, EL Pantalón o La Primavera. E incluso asistimos a una cover muy personal de Corazón partío de Alejandro Sanz.
LOS40
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Lola Índigo en concierto en el estadio Riyadh Air Metropolitano de Madrid, 14 de junio de 2025. / Aldara Zarraoa

Lola Índigo en concierto en el estadio Riyadh Air Metropolitano de Madrid, 14 de junio de 2025. / Aldara Zarraoa
Pero vamos a empezar por el principio. Tal y como hizo Mimi Doblas ayer en el campo de fútbol del Atlético de Madrid. Ya no quiero na, su single debut (y su primer N°1 de LOS40) inauguró la velada para locura de todos los fans. La andaluza emergió del fondo de la pasarela, de blanco y rodeada de una banda de tambores (como una auténtica porrista). Lola Indigo estaba dispuesta a crear su propia Super Bowl, con una pequeña diferencia: no tenía 15 minutos, sino dos horas y media de show.
Seguidamente, La (Mujer) Bruja hizo acto de presencia a través de los visuales, tanto en la pantalla como en la pasarela. Y cuando había cantado cuatro temas en total (Maldición y Santería incluidas), Lola no pudo evitar emocionarse al darse cuenta de lo que había logrado (tras los quebraderos de cabeza que ha supuesto producir un espectáculo de estas características). "Gracias por esperarme así", expresó entre lágrimas. Unas lágrimas que se repetirían de tanto en tanto a lo largo del concierto.

Luna, Mala Suerte, Trendy y Casanova terminaron de completar este Acto I, que sirvió casi de calentamiento, porque justo de dar paso al Acto II: La Niña, Mimi realizó el primer cambio de vestuario. Como si de Trinity en Matrix se tratara, la anfitriona apareció con un mono negro de látex ajustado para interpretar un medley de Fuerte, El Humo, Yo tengo un novio y 4 besos. Todo ello, con su dance break correspondiente y la primera tanda de fuegos artificiales.
4 Artistas invitados, 3 Eras, 2 Nacionalidades y 1 nexo común: Lola Indigo
Cuando se cargó su era más rosa, Lola aquí se volvió una muñeca. Una Barbie o, en este caso, una Bratz a la que le faltaba parte de su squad. Por ello, en compañía de Tini dio la bienvenida a este ya tercer bloque con el éxito La Niña de la Escuela.
En este tramo del show, la cantante quiso hacer un inciso para presentar a su cuerpo de bailarines y hablar sobre los sueños. Porque para cumplirlos, también hay que "trabajar y darle duro", como reza su hit Culo, el cual introdujo con la ayuda de las palmas del público.
Después de Killa y Calle, Lola Indigo hizo una reflexión sobre el tempus fugit que concluyó con un carpe diem. Exclamó que estaba disfrutando mucho de la velada, algo que no suele pasar en este tipo de cosas. Eventos que organizas y planeas durante muchísimo tiempo, luego se suelen desvanecer en un abrir y cerrar de ojos, sin que te des cuenta. Por eso es importante estar presente. "Porque después de ocho años, a veces es difícil procesar esta realidad que estoy viviendo", dijo.
El ecuador del concierto estuvo protagonizado por Me quedo (y ese coro al unísono de "mis amigas me llaman: Aitana"), Toy Story y La Tirita, que tuvo como artista invitada a Belén Aguilera, con quien la artista se fundió en un largo abrazo lleno de incredulidad y emoción.
Para concluir este segundo acto, nuestra protagonista tocó Spice Girl, ABC, Lola Bunny Tamagochi y Spinelli para cambiar el coche mini que plantó en medio de la tarima por otro medio de transporte, un poco más medieval ―como su penúltimo cambio de vestuario― y fantástico: El Dragón.
Con el tercer y último acto, el Metropolitano se tiñó de verde con las luces láser y una breve instrumental de AN1MAL. Una vez sumergidos de lleno en el mood electrónico de la fiesta que se venía, un huevo plateado ascendió desde los infiernos de la ciudad de Madrid. Como ya hizo en la gira Dragón, Lola Indigo rompió el cascarón, una vez más, para ponernos a bailar con El Tonto, Corazones Rotos, La Santa, Mi Coleta o Discoteka.
El último invitado de la velada fue "una persona con un corazón muy noble". Y, con una enorme ovación, los asistentes recibieron con los brazos abiertos a Paulo Londra, que interpretó Adán y Eva, y Perreito Pa Llorar.
Sin Autotune tuvo un destinatario muy especial. Lola quiso dedicarle el tema Triana, una joven fan que soñaba con ir al concierto y tristemente falleció hace poco. "Gracias a Triana esta canción va a tener un significado diferente y va a ser su canción", declaró nuevamente visiblemente emocionada.
Con esta solemnidad, el show de La Niña, La Bruja y El Dragón vivió su instante de pausa, bajando revoluciones con un mash up de Yo Te Llevo y Dragón, con la participación de un coro góspel.
El fin de fiesta vino de la mano de 1000 Cosas y MOJA1TA (que hizo su debut en directo), no sin antes despedirse y agradecer la acogida en el estadio, entre otras personas, a la comunidad LGTBI en pleno mes del Orgullo. "Sé que sin ellos yo no estaría aquí hoy", afirmó. Y es que Mimi dio un importante discurso contra la transfobia y en favor de cuidar al colectivo trans en un momento tan vulnerable como este.
Con La Reina, y un reprise de MOJA1TA, Lola Indigo se coronó desde su tronto en rojo pasión y vivió la dolce vita que siempre soñó, con fuegos artificiales ilumimando el cielo de Madrid.