Halsey invita a Lauren Jauregui a su gira para mayores de edad y cantan ‘Strangers’ trasladándonos a 2017

Si alguien sabe cómo convertir la música en espectáculo, esa es Halsey que tras hacer pública su enfermedad, se ha entregado a ella. Pero esta vez no ha venido solo a cantar. Con For My Last Trick Tour, la artista estadounidense nos ha regalado algo más que una gira: una experiencia, un viaje emocional, y quizá —aunque aún nos cueste creerlo— una despedida encubierta.

Su última parada ha sido en Chicago donde se ha vivido un momento nostalgia cuando ha salido al escenario Lauren Jauregui para cantar juntas Strangers.

Un tema que lanzaron en 2017. Halsey lanzaba Hopeless Fountain Kingdom, un disco cargado de narrativa, mitología moderna y, sobre todo, visibilidad. Ahí encontrábamos esta canción que compartió con Jauregui que, en ese momento, aún era miembro de Fifth Harmony.

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Volverlas a ver juntas en el escenario ha provocado una oleada de reacciones nostálgicas a favor de este reencuentro que ha emocionado a muchos, sobre todo, con el abrazo final que se han dado sobre el escenario.

Strangers: el himno queer que unió a Halsey y Lauren Jauregui

Más allá de ser una colaboración entre dos voces femeninas potentes, Strangers fue —y sigue siendo— un grito de representación. No era la típica canción de amor platónico. Aquí dos mujeres se cantaban la una a la otra, con pronombres femeninos y sin esconder lo que sentían. Amor entre chicas, contado sin tapujos. Un gesto simple, pero revolucionario.

Ambas artistas son abiertamente bisexuales, y eso se nota en cada verso. Halsey quiso que esa parte de la historia fuera real, sincera. Por eso eligió a Lauren. Porque no se trataba solo de invitar a alguien con buena voz —que la tiene, y de sobra—, sino de contar algo desde dentro.

La química entre ellas se dejó ver desde el primer directo, en programas como Today Show o festivales como iHeartSummer '17. Y no fue solo cosa de afinación: era la mirada, la energía, lo que hacía que el mensaje llegara más allá de la letra.

A nivel sonoro, la canción juega con las texturas. La voz dulce y envolvente de Halsey se contrasta con el tono más denso y desgarrado de Jauregui. El resultado: una tensión emocional que lo dice todo sin necesidad de gritos.

El videoclip, que tardó en llegar, pero no defraudó, presentó a ambas como luchadoras en un ring de boxeo. Halsey era Luna, Lauren era Rosa. Una historia de confrontación emocional, una metáfora visual que encajaba como un guante con la narrativa shakespeariana del álbum.

Y aunque nunca fue un single oficial, Billboard la colocó entre las mejores canciones del año y la reconoció como uno de los momentos más importantes de representación bisexual en la música mainstream. Una canción que no solo rompió barreras, sino que abrió caminos.

El impacto fue tal que, años después, sigue apareciendo en listas de canciones queer imprescindibles. Y para Lauren, supuso también un espaldarazo en su camino como referente LGBTQ+, llegando a recibir premios por su visibilidad.

Una gira ¿de despedida?

La gira de Halsey ha dado mucho que hablar. Arrancó en mayo y se extenderá hasta julio y pone en escena el universo sonoro de su último álbum, The End/ The Great Impersonator, una obra profunda, cruda y teatral que lleva la firma de alguien que ha decidido entregarse sin filtros. Pero ojo, porque, aunque se titule ‘mi último truco’, no es una nota de cierre, sino un acto de rebelión escénica.

El show está planteado en dos partes. En la primera, nos encontramos con una Halsey casi onírica: en blanco y negro, atravesando atmósferas frágiles, letras introspectivas y proyecciones cinematográficas que parecen sacadas de una película de autor. Todo empieza con una caída: Alice cayendo por la madriguera, solo que esta vez, la madriguera es el escenario.

La segunda parte es fuego. Literal y emocional. Una explosión de sonido, de luces, de fuerza. Guitarras afiladas, voz al límite y una artista que se transforma frente a tus ojos.

Por si fuera poco, Halsey no ha querido hacerlo sola. A lo largo del tour ha contado con invitadas muy especiales como Evanescence, Alvvays, The Warning, Magdalena Bay o Hope Tala, que se han ido turnando como teloneras en distintas ciudades. Mujeres que pisan fuerte, que aportan frescura, distorsión, sutileza... según el día. Porque este show cambia. Y cambia mucho.

No es un concierto al uso. Es un espectáculo que, como la propia Halsey, no se puede encasillar. Y que, por cierto, no es para todos los públicos: la propia artista ha advertido que no es una gira apta para menores.

El título lo dice todo: For My Last Trick. Pero, ¿es de verdad el último? ¿O solo el nombre de una era que se reinventa? Halsey ha jugado al despiste desde el primer teaser. Lo que está claro es que este tour no es cualquier cosa. Es un manifiesto artístico, una explosión emocional, una obra que se vive con los cinco sentidos.

Y si de verdad es su último truco… qué forma tan brillante de decir adiós.