Las ciudades más contaminadas son menos productivas
Un estudio pone el foco en cómo afecta la concentración de partículas a la productividad laboral.

Polución en la ciudad de Madrid. / Marcos del Mazo
Sabemos que la contaminación atmosférica es un problema de salud de primer nivel: se estima que cada año mueren de forma prematura unas 10.000 personas en España por culpa de la mala calidad del aire, una cifra que asciende a las 800.000 en la Unión Europea y hasta los 7 millones en todo el mundo. Pero ahora conocemos un dato más: también afecta, y mucho, a lo laboral. Y por tanto, a lo económico.
Así lo revela un exhaustivo análisis publicado por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE). Según sus responsables, la exposición continuada a partículas ultrafinas (esas temidas PM2,5, menores de 2,5 micrómetros) está pasando factura en el rendimiento laboral de todo el continente.

Un atasco en la Avenida Meridiana, en Barcelona. / Europa Press News

Un atasco en la Avenida Meridiana, en Barcelona. / Europa Press News
"Los resultados refuerzan la necesidad de integrar las agendas de política ambiental y económica, en especial, ahora que los gobiernos buscan dinamizar la productividad mientras apuestan firme por la transición ecológica y digital", enfatizan desde el organismo en su resumen ejecutivo.
LOS40
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La clave está en la correlación de datos: la OCDE trabajó con información de más de 2,5 millones de empresas en 22 países europeos, cruzando registros meteorológicos y niveles de contaminación geolocalizados que abarcan dos décadas. El fin: medir, de una forma rigurosa, cómo influyen esas micropartículas en la economía real de cada zona.
La contaminación provoca más bajas por enfermedad y mina el rendimiento
El resultado no deja lugar a dudas. Un incremento de un microgramo por metro cúbico en la concentración media de PM2,5 se traduce en una caída estimada del 0,55% en la productividad laboral durante ese mismo año. ¿Y por qué ocurre? Porque estas partículas afectan la salud de la plantilla: provocan más bajas por enfermedad y minan tanto el rendimiento cognitivo como el físico en el trabajo.
El estudio no sólo se refiere a trabajos manuales o al aire libre. De hecho, el estudio destaca que las empresas con plantilla altamente cualificada se ven igual o más afectadas. Los trabajadores de oficina también sufren estrés respiratorio o menor concentración cuando el aire lleva más polvo o gases en suspensión. Y hay sectores especialmente vulnerables: las compañías medianas con poca inversión en capital, o aquellas del sector de la construcción, donde priman las faenas al aire libre, son quienes sienten con más intensidad este impacto negativo.
¿Luz al final del túnel?
La buena noticia llega entre 2010 y 2019. Según la OCDE, la mejora en la calidad del aire en Europa durante ese periodo puede explicar casi un tercio del crecimiento total de la productividad laboral. O dicho de otro modo: limpiar el aire no solo protege la salud de la población; también impulsa la economía real.
No se trata de una mejora homogénea: las regiones que más redujeron las PM2,5 —entre las que están el norte de Italia, el norte de España y varias zonas de Europa central y oriental— son, coincidentemente, las que más se han beneficiado de la reducción de contaminación. Esas comunidades han experimentado ganancias palpables en eficiencia laboral gracias a un aire más limpio.
De cara al futuro, los expertos recomiendan actuar en tres direcciones. La primera pasa por que las agendas ambientales y económicas de los gobiernos vayan de la mano. No se trata de sacrificar una por la otra: limpiar el aire y dinamizar los negocios pueden ir en el mismo paquete. La segunda tiene que ver con fomentar la inversión en monitorización y mitigación: mejorar las infraestructuras para medir la contaminación y reducir emisiones contaminantes (tráfico, industria, calefacción, agricultura) resulta doblemente rentable. Y por último, es vital fomentar prácticas verdes en las empresas: desde teletrabajo parcial hasta purificadores en interiores o incentivación del transporte sostenible, detalles que ayudan tanto al planeta como a la cuenta de resultados.