Los mejores artistas de la música pop de los años 2000

Del pop adolescente al R&B más sofisticado, una década que definió el sonido de una generación

Beyoncé, en su Renaissance World Tour / Kevin Mazur

30/07/2025 - 18:48 CEST

La década de los 2000 fue una explosión de creatividad, escándalos mediáticos y reinvención musical. En una era marcada por la transición del CD al MP3, y del ver los videoclips en televisión a disfrutarlos a través de las plataformas digitales como YouTube, el pop vivió uno de sus momentos más vibrantes. Britney Spears, Justin Timberlake, Beyoncé y Christina Aguilera no solo dominaron las listas de éxitos, sino que también marcaron el estilo, la moda y la cultura de toda una generación. Sus canciones se convirtieron en himnos generacionales, y sus videoclips, en piezas icónicas que aún hoy siguen inspirando a nuevos artistas.

Estos artistas no solo vendieron millones de discos, sino que también redefinieron lo que significaba ser una estrella del pop. Desde el pop adolescente hasta el R&B más sofisticado, pasando por fusiones con el hip hop y la electrónica, los 2000 fueron un laboratorio sonoro que dejó huella. En este artículo repasamos a los nombres más influyentes de aquella década dorada, aquellos que no podían faltar en ninguna fiesta, karaoke o lista de reproducción. Porque si algo nos enseñaron los 2000, es que el pop puede ser tan pegadizo como profundo, tan comercial como revolucionario.

Britney Spears: la princesa del pop

Britney Spears fue, sin duda, el rostro más reconocible del pop de los 2000. Tras su debut en 1998 con ...Baby One More Time, la cantante consolidó su estatus con éxitos como Oops!... I Did It Again, Toxic y Everytime. Su mezcla de inocencia y provocación, sumada a una estética visual impactante, la convirtió en un fenómeno global. A pesar de los altibajos personales, su influencia en la música, la moda y la cultura pop sigue siendo incuestionable.

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Justin Timberlake: del chico de NSYNC al príncipe del pop

Después de su paso por la boy band NSYNC, Justin Timberlake se lanzó como solista en 2002 con el álbum Justified, que incluía éxitos como Cry Me a River y Rock Your Body. Su estilo fusionaba pop, R&B y funk, y su carisma lo convirtió en uno de los artistas masculinos más importantes de la década. Timberlake no solo triunfó en la música, sino también en el cine y la moda, consolidando su imagen de artista completo.

Christina Aguilera: la voz de una generación

Con un rango vocal de cuatro octavas, Christina Aguilera fue mucho más que una estrella pop. Su álbum Stripped (2002) mostró una faceta más madura y personal, con temas como Beautiful y Fighter. Además, su participación en Lady Marmalade junto a Pink, Mýa y Lil’ Kim fue uno de los momentos más icónicos de la década. Aguilera combinó potencia vocal con una imagen camaleónica que rompía moldes.

Beyoncé: el ascenso de una reina

Aunque comenzó la década como parte de Destiny’s Child, Beyoncé lanzó su carrera en solitario en 2003 con Dangerously in Love, que incluía éxitos como Crazy in Love y Baby Boy. Su presencia escénica, su control artístico y su capacidad para reinventarse la convirtieron en una de las artistas más influyentes no solo de los 2000, sino de todo el siglo XXI.

Rihanna: la nueva cara del pop

Rihanna irrumpió en 2005 con Pon de Replay, pero fue con Umbrella (2007) que se consolidó como una superestrella. Su estilo caribeño fusionado con pop y R&B, junto a una imagen cada vez más audaz, la convirtieron en un ícono de la moda y la música. Su capacidad para adaptarse a las tendencias y marcar otras nuevas la hizo imprescindible en cualquier lista de los mejores artistas de la década.

Otros nombres imprescindibles

Además de los grandes nombres, los 2000 vieron surgir a artistas como Pink, que combinó actitud rockera con sensibilidad pop y Kelly Clarkson, la primera ganadora de American Idol, que demostró que los concursos podían lanzar carreras duraderas. También destacan Alicia Keys, con su mezcla de soul y piano clásico, y Usher, que dominó las listas con su R&B sensual y bailable.

El pop en España: una década de oro nacional

Mientras el pop internacional vivía su auge, España también disfrutaba de una escena vibrante y muy personal. Alejandro Sanz consolidó su carrera con álbumes como El alma al aire (2000) y No es lo mismo (2003), fusionando pop con flamenco y letras profundas que conectaban con el gran público. Su colaboración con artistas internacionales, como Shakira, lo posicionó como uno de los músicos españoles más influyentes del mundo.

La Oreja de Van Gogh fue la banda sonora de miles de jóvenes con su pop melódico y letras nostálgicas. Canciones como Rosas, La playa o Puedes contar conmigo marcaron una época y siguen siendo imprescindibles en cualquier recopilatorio de la década.

Por su parte, El Canto del Loco aportó frescura, energía y una actitud desenfadada con temas como Zapatillas, Besos o Volverá, convirtiéndose en un fenómeno de masas que llenaba estadios y encabezaba listas de ventas.

Un legado que sigue vivo

Los artistas pop de los años 2000 no solo definieron una década, sino que sentaron las bases del pop contemporáneo. Muchos de ellos siguen activos, reinventándose y colaborando con nuevas generaciones. Sus canciones siguen sonando en playlists nostálgicas, en TikTok y en karaokes de todo el mundo. Porque si algo nos enseñaron los 2000, es que el pop, cuando se hace bien, nunca pasa de moda