Natalia Palacios y Carliyo sellan su historia de amor con una romántica boda en Málaga, dos años después de su viaje a Nueva York
La pareja que se conoció gracias a las redes sociales ha puesto el broche de oro a una historia de amor preciosa
Carliyo y Natalia / Pablo Cuadra
La historia de amor de Natalia Palacios y Carlos García, conocido como Carliyo en redes sociales, ha dado un paso más este fin de semana con una boda que ha emocionado a los miles de seguidoores que han seguido su romance desde el principio.
Dos años después de aquel viaje a Nueva York que consolidó su relación, la pareja de influencers se ha dado el "sí, quiero” en una romántica ceremonia celebrada en el Castillo de Santa Catalina, en Málaga, su ciudad natal, este viernes 19 de septiembre. Un lugar perfecto para celebrar su amor junto a sus familiares y amigos más cercanos.
La pareja ya ha compartido las primeras imágenes del enlace, en las que se refleja la alegría y emoción vivida durante toda la ceremonia. Cada fotografía transmite la felicidad con la que Natalia y Carliyo han celebrado su gran día, rodeados de sus seres queridos y en un entorno que parecía sacado de un cuento.
LOS40
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En las diferentes publicaciones, podemos ver que la creadora de contenido malagueña ha optado por llevar dos vestidos diferentes. El primero con corte de princesa y cola de ensueño y el segundo de corte sirena con encaje.
La boda no solo fue el broche de oro a una relación que nació en las redes y se consolidó en Nueva York, sino también una fiesta llena de sorpresas y anécdotas que quedarán en sus recuerdos para siempre.
Un amor que nació en las redes y se consolidó en Nueva York
La relación entre Natalia y Carliyo comenzó como muchas historias modernas: con un intercambio de mensajes en redes sociales. Sin embargo, lo que parecía una amistad virtual pronto se transformó en algo más profundo. El flechazo fue inmediato y, tras unos días hablando por redes, decidieron embarcarse juntos en un viaje a Nueva York, sin haberse visto en persona. Aquella aventura, que compartieron con sus seguidores, marcó un antes y un después en su historia de amor y fue el inicio de una relación sólida y llena de complicidad.
Durante estos dos años, la pareja ha compartido con su comunidad cada paso importante: desde su primer viaje juntos, pasando por la pedida de mano, hasta la cuenta atrás para la boda, que Natalia documentó en su miniserie 21 días antes de mi boda. La transparencia y naturalidad con la que han mostrado su día a día ha hecho que sus seguidores se sientan parte de la historia, aumentando la expectación por el gran día.
Dos años después de aquel viaje a Nueva York que cambió sus vidas, la pareja ha sellado su compromiso rodeada de quienes más quieren y con el cariño de miles de seguidores que han acompañado cada paso del camino. Sin duda, un final de cuento para una pareja que ha demostrado que las historias de amor también pueden nacer —y consolidarse— en la era digital.
Alba Benito
Periodista porque uso el teclado para algo más que jugar a videojuegos. Un día me colé en una fiesta...
