¿De qué murió Jeff Buckley? La trágica historia de un artista que encandiló al público con un solo disco

El 29 de mayo de 1997, el mundo perdió a una de las voces más prometedoras del rock alternativo. Jeff Buckley, con solo 30 años, falleció ahogado en el río Misisipi mientras trabajaba en su segundo álbum. Su muerte, tan inesperada como simbólica, dejó una huella imborrable en la historia de la música.

Un baño que terminó en tragedia

Jeff Buckley se encontraba en Memphis, Tennessee, grabando nuevas canciones para su segundo disco, tras el éxito crítico de Grace (1994). Aquella tarde de primavera, decidió darse un baño en el Wolf River Harbor, un canal del río Misisipi. Vestido con camiseta, pantalones y botas, se metió al agua mientras cantaba Whole Lotta Love de Led Zeppelin.

Un remolcador pasó cerca, generando fuertes corrientes. En cuestión de segundos, Buckley desapareció bajo el agua. Su cuerpo fue hallado cinco días después, el 4 de junio, atrapado entre ramas a pocos metros de donde fue visto por última vez. Apenas unos días después, la autopsia confirmó que no había presencia de drogas ni niveles significativos de alcohol en su organismo. De esta manera, se declaró que la causa oficial fue ahogamiento accidental.

Un artista en plena evolución

Hijo del también músico Tim Buckley, Jeff había logrado forjar su propio camino artístico. Su álbum Grace fue aclamado por la crítica y, aunque no fue un éxito comercial inmediato, con el tiempo se convirtió en un disco de culto. Su interpretación de Hallelujah, de Leonard Cohen, es considerada una de las más conmovedoras de todos los tiempos.

En el momento de su muerte, Buckley estaba trabajando en Sketches for My Sweetheart the Drunk, un proyecto que quedó inconcluso pero fue publicado póstumamente en 1998. El disco muestra una faceta más experimental y cruda del artista, con canciones como Everybody Here Wants You y The Sky Is a Landfill.

Algunos fans y críticos han señalado que ciertas letras de Grace parecen presagiar su destino. En la canción Grace, por ejemplo, canta: And I feel them drown my name. Aunque nunca se confirmó que tuviera pensamientos oscuros, su sensibilidad artística y su conexión con lo espiritual alimentaron el mito en torno a su figura.

Un legado que no se apaga

A pesar de su corta carrera, Jeff Buckley dejó una marca profunda en la música contemporánea. Artistas como Radiohead, Muse, Coldplay y Lana Del Rey han citado su influencia en numerosas ocasiones. Su estilo vocal, que combinaba fuerza, vulnerabilidad y un rango impresionante, sigue siendo una referencia para nuevas generaciones.

En 2025, HBO estrenó el documental It’s Never Over, Jeff Buckley, dirigido por Amy Berg. La producción incluye material inédito, entrevistas con su madre Mary Guibert, ex parejas como Joan Wasser y músicos cercanos. El título, tomado de la letra de Lover, You Should’ve Come Over, resume el sentimiento de quienes aún lo escuchan: Jeff Buckley nunca se fue del todo.

Jeff Buckley fue mucho más que una promesa truncada. Fue un artista total, un alma inquieta que vivió intensamente y dejó un legado eterno. Su voz sigue flotando, como aquel día en el río, entre la belleza y la tragedia.