Jordi González se retira de televisión tras estar a punto de morir: "Lo podemos escribir ante notario"
El presentador ha tomado esta decisión tras estar entre la vida y la muerte
Jordi González en la gala de Navidad de RTVE. / Aldara Zarraoa
Uno de los rostros más emblemáticos de los debates y los realitys ha anunciado su retirada definitiva de los platós: Jordi González, a sus 63 años, ha puesto el punto y final a su trayectoria profesional como presentador. Así lo ha anunciado en una entrevista con Diari Ara donde, además, ha hablado sin tapujos sobre su etapa en Telecinco, desvelado lo que cobraba.
"Llegó la propuesta de TV3 con un programa con reputación, audiencia, solvente, en Cataluña y en catalán. Además, no solo presento, sino que también soy director. Es una manera muy satisfactoria de acabar una carrera", ha asegurado el catalán.
"Lo podemos escribir ante notario. Puede durar tres meses o tres años, pero no haré otro programa más", ha puntualizado, confirmado así que no volverá a afrontar nuevos proyectos.
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Una solvencia económica que le permite poner el punto y final
En la conversación, Jordi González ha hablado sin tapujos sobre su época dorada en Mediaset, trabajando en canales como Telecinco o Telemadrid y destacando que en 1999 ganaba 20 millones de pesetas, lo que equivale a 120 000 euros por emisión. Asimismo, también ha recordado como Paolo Vasile se refería a ellos como "la aristocracia de la tele".
Sobre trabajar en unas cadenas tan populares también ha tenido algo que decir, destacando las ventajas y los límites de la cadena: “Lo mejor es su agilidad; lo peor, la escasez de platós para tanta producción”
El presentador ha aprovechado para recordar su etapa reciente marcada por una grave enfermedad con respiración asistida. En enero de 2025 contrajo una bacteria en Colombia, permaneció tres semanas en coma, dos meses en UCI, y sufrió secuelas como neumonía bilateral con crisis renal. Afirmaba no haber cobrado por su regreso a TardeAR en Telecinco: "Lo hice por cariño, por afecto, por mí estar en casa".
Desde entonces, se instaló en TV3. Tras su reaparición en Col·lapse, confirmó la ruptura con TVE y su intención de dedicarse a directores y producción en Telecinco a partir de septiembre, aunque sin cámaras a la vista. Ahora se plantea otros planes: viajar a Japón, aprender inglés y cocina –actividades postergadas durante décadas
