Cuando Camela era un grupo de tres: ¿Qué pasó con Miguel Ángel Cabrera?

Puede que mucha gente no lo sepa, pero hubo un día en que Camela era un trío musical. De 1994 a 2013, el emblemático grupo musical español estuvo formado por Dioni, Ángeles y Miguel Ángel Cabrera.

El que fuera teclista del ahora dúo musical ha visitado Y ahora Sonsoles esta semana para hablar con total sinceridad de lo que desencadenó su salida de Camela y cómo es su día a día.

"Media España no sabe que yo he hecho todas esas canciones", ha recordado el músico. Un detalle, que al final del día, "no le importa, porque los fans que me siguen cada día y los que están conmigo lo saben", ha añadido.

"Yo me fui [de Camela] en el 2013 y me abandoné mucho. [Me fui] porque no estábamos bien; yo lo he pasado mal, pero nadie me echó. Ni Dioni, ni Ángeles han tenido culpa. Es más, lo saben ellos que yo los quiero mucho, porque llevo con ellos media vida", ha recordado.

"Los dos se han portado muy bien conmigo, pero yo me cansé... La música también te quema mucho y más cuando eres un trío o un cuarteto. Yo puse unas condiciones por tema económico [etc.] que me dijeron que no podían ser así. Yo estaba con mis teclas y mis canciones, pero yo no canto. Entonces, eso influye", ha declarado.

Ha destacado que Dioni le dijo "que quería que siguiera, porque si no se iba a acabar Camela". A pesar de ello, Miguel ha compartido que en aquel momento "tenía mucho orgullo" y decidió que estaba muy cansado, así como ha reiterado "con el corazón" que "no fue culpa de nadie".

Ha confesado que, además de divertirse mucho, también ha llorado mucho a lo largo de las dos décadas que estuvo en activo. "Cuando estás en un trío musical, realmente, hay cosas que tú no mandas", ni en el éxito ni en el fracaso.

"Hubo veces que Dioni y yo no nos hablábamos; otras veces Ángeles y Dioni no se hablaban, porque nos duran los enfados un mes —un rumor que también surgió el verano pasado en torno a los cuñados—, dos meses, tres días... Y ya decidí irme".

A pesar de los piques y posibles rifirrafes entre ellos —algo normal en la convivencia y en el desarrollo artístico de una formación y en la toma de decisiones, como el setlist—, "nunca ha habido maldad".

Lo que se queda con él es el repertorio que deja como letrista de Camela: "Dejé el legado, porque ahí están las canciones, que siguen sonando por todos los lados después de 34 años, que se dice pronto. Ese es mi legado".

La muerte de su hijo, una tragedia que le marcó de por vida

En 2022, su hijo Rafael falleció a los 18 años a causa de un accidente de tráfico que sufrió en Aranjuez. "Es un dolor diferente a los demás, en la vida solo existe ese dolor cuando te pasa", ha expresado, "pero hay que tirar para adelante".

Desde aquel día, Cabrera lleva el luto que dejará de llevar cuando visite Nueva York, la ciudad que siempre ha querido visitar con su hijo.